Al igual que Jeter, hay una comodidad, fácil de llevar, discreta, pero un aire intensamente competitivo sobre Posey que lo hace parecer fácil pero es un monstruo al jugar en su contra.
Y al igual que Jeter, vamos a ponerlo de esta manera: Buster Posey puede mover algo de mercancía.

"Sí," dijo el asistente del gerente general de los Gigantes, Bobby Evans, en su intermitente forma de mirarlo. "Quiero decir, cuando se habla de Derek Jeter, que no sé cómo se escribirá la historia de Buster, o cómo la historia va a jugar en términos de su carrera. Pero sin duda tiene una fundación para eso. Cuando se piensa lo que Jeter ha significado --respeto por el juego, y jugándolo de la manera correcta, proporcionar un liderazgo apacible -- en algún nivel Buster tiene todas esas cualidades".

Correcto, correcto, correcto, correcto. Y correcto. Pero espera. Hay más. Bobby Evans apenas estaba consiguiendo el balance.
"Le encanta el juego", Evans continuó. "Juega duro. Ha tenido temporadas como JMV. Ganó dos Series Mundiales en un lapso de tres años, con la posibilidad de ganar una tercera. Fue el novato del año. Ganó un título de bateo en el año que ganó el JMV. Al salir de la universidad, ganó el premio Johnny Bench y el trofeo Golden Spikes. Un Todo Estrella en múltiples ocasiones. Y en términos de ventas de camisetas, él y Jeter son el 1-2, creo. Así que en cuanto a la preferencia nacional, tiene la visibilidad nacional. Esas son un montón de similitudes".
Sí, podrías decir eso, él sólo dijo eso.

Pero Posey ha ganado más trofeos al JMV (1-0) y títulos de bateo (1-0) que Jeter.
Y, en un acontecimiento relacionado, Posey hizo algo en 2012 que Jeter nunca hizo y, para el caso, sólo dos de los Yankees en la historia (Joe DiMaggio y Mickey Mantle) lo han hecho -- ganar una Serie Mundial, un premio al JMV y un título de bateo en la misma temporada.

Después de que los Gigantes ganaron la Serie de Campeonato el jueves para avanzar a su tercera Serie Mundial en las últimas cinco temporadas, Posey se paró en el campo, viendo los fuegos artificiales que explotaban sobre el AT&T Park, y mostró un lado que Jeter nunca trató de revelar:
Emoción. Genuina, humana, emoción apasionada sobre lo que acaba de pasar.
Los testigos dijeron que tenía lágrimas en sus ojos, tanto por lo que se estaba obteniendo como por la manera en la que su equipo acababa de ganar - con un jonrón de película de su buen amigo, Travis Ishikawa, un tipo que había vivido una reencarnación en el béisbol en la saga por la cual Posey nunca tendrá que preocuparse por volver a representar.

Al igual que Jeter, Posey no muy a menudo se enorgullece de que se presente este aspecto de su personalidad. Sin embargo, "en momentos como éste, voy a dejar que se vaya", dijo. "Se trata de momentos de una vez-en-la-vida... Volvemos a la Serie Mundial".
Bueno son una vez-en-la-vida para la mayoría de la gente. Son tres veces-en-la-vida para él. Y teniendo en cuenta que tiene 27 años y juega en un equipo que parece tener esta cosa en octubre por el frío ¿Quién sabe cuántos más están por venir?

"Si te fijas en las cosas que ha logrado y cómo lo realiza en el escenario, que es lo que es", dijo Wotus, cobrando fuerza ahora. "Siempre ha estado en estas situaciones como El Chico que lo ha realizado... por qué no se inmutó por nada de esto. Tiene calma a su alrededor. Tiene una confianza apacible, supongo que debería decirlo. Y te apuesto a que lo ha tenido toda su vida, porque ha sido tan exitosa como su carrera de jugador de béisbol".

Pero está claro que hay mucho más de consistencia, de un buen comportamiento de Derek Jeter en el mega-talentoso receptor de los Gigantes que hay en bruto del siempre vanguardista Pete Rose. Al igual que Jeter, el equipo de Buster Posey nunca tiene que preocuparse por nada de lo que dice o cualquier cosa que haga dentro o fuera del campo. Y cuando se agrega que la calidad en el resto del paquete -- la victoria, los premios, el liderazgo, el aura -- ¿Hay alguien más en este deporte, en este momento que se haya ganado por derecho el adjetivo mágico de "El estilo de Jeter ["Jeter-esque"]?

Cuarta Crónica de Hoy:
De las Series Invernales del Caribe
Liga Mexicana del Pacífico(LMP)
Tovar y Tomateros hacen historia en LMP
El pitcher zurdo Marco Tovar, de los Charros de Jalisco, y los Tomateros de Culiacán hicieron historia la noche del domingo en el Estadio General Ángel Flores, de la capital de Sinaloa, en el circuito invernal de la Liga Mexicana del Pacífico.

Todo empezó cuando el primero en el orden, el cubano Juan Carlos Linares depositó la esférica detrás de la barda del jardín izquierdo al primer lanzamiento que le hizo Tovar. Salas fue el segundo en batear, pegó un enorme batazo de foul pegado al poste del prado izquierdo y fue out en elevado a la primera base con el sexto lanzamiento del juego del abridor de Charros.
El estadounidense Nick Buss se presentó a la caja de bateo y tras colocarse en cuenta de tres bolas y un strike, prendió un lanzamiento y puso la pelota a viajar por el prado derecho en el lanzamiento 11 de Tovar en la entrada.
Cuatro lanzamientos después vino el tercer vuelacercas de la entrada, cuando en cuenta de una bola y dos strikes el mexicano Jorge "Chato" Vázquez pegó un batazo que pasó la barda del jardín central.
El quinto en el orden, Arturo Rodríguez, entregó el segundo out con otro elevado a la primera base, ahora en terreno de foul.
El lanzamiento 19 de Tovar fue histórico, pues el cubano Ronnier Mustelier le desapareció la esférica por el prado derecho, para el cuarto jonrón de la entrada que llevaba a Tomateros y Tovar al libro de récords.
Al final no todo fue felicidad para Tomateros, pues dejaron escapar la victoria al caer por 6-5 ante los Charros, que de paso se llevaron la serie.