Con reparto de victorias los Gallos saldaron el doble juego en Camagüey correspondiente a la última subserie de la fase regular de la temporada 59 del beisbol cubano.

A primera hora el veloz Yariel Rodríguez caminó toda la ruta a ritmo de una limpia, cinco jits y siete ponches para derrotar a los espirituanos 8x1, con respaldo ofensivo de doce imparables, de ellos tres vuelacercas. La derrota fue a la cuenta de Pedro Álvarez (2-4), quién no pudo sacar out, en otra pálida salida.

En el segundo choque el zurdo Yamichel Pérez lanzó 5.0 actos, con una limpias; mientras el cerrador Yanieski Duardo completó las otras dos entradas para conducir a victoria espirituana de 6x4, en un choque en el que los locales fabricaron tres carreras sucias, de las cuáles dos llegaron después de dos out y tras error del torpedero Daviel Gómez que aprovechó Alexander Ayala para botar la pelota y asustar.

El resultado ratificó a los camagüeyanos de líderes (28-15) y con boleto seguro a la segunda ronda –junto con Santiago de Cuba- y mantuvo viva las remotas esperanzas de los Gallos (25-18) de conseguir el pase directo.

Para ello están obligados a derrotar a los Toros en el juego de hoy martes e imponerse después en el pendiente que tienen ante los tuneros (23-17), programado en el estadio José A. Huelga el 12 de octubre.

Si eso ocurre Sancti Spíritus termina con 27-18, cifra a la que pueden llegar Matanzas (26-18) y Granma (26-18), que finalizan el calendario luego de enfrentarse a Camagüey en el Victoria de Girón e Industriales en el Latinoamericano, respectivamente.

En ambos casos los Gallos necesitan derrotas matanceras y granmenses, y les sería muy positivo que el martes Cienfuegos (27-17) perdiera en el Sandino ante el decepcionante Villa Clara (17-25), aunque lo que suceda en Santa Clara no define del todo la clasificación yayabera.

Y es que para colarse entre los mejores cuatro, el otro rival de peso es las Tunas, que hoy enfrenta a Mayabeque en su patio, donde a continuación saldará deudas con Ciego de Ávila. Un fracaso de los campeones en esos dos choques los eliminaría del boleto directo. De lo contrario, el encuentro en predios espirituanos definiría la suerte de los leñadores y quizás de los espirituanos.