Yoelkis Cruz nunca había tenido tantos problemas con su nombre como los que hace tres años viene cargando. Y es que durante años, cuando era un pitcher trivial dentro del béisbol cubano no tuvo dificultades con el cambio de su nombre.
Para muchos Yoelkis, para otros Yoalkis, el derecho de Las Tunas ha tenido que convivir con la extraña sensación de estar en boca de aficionados y especialistas al deporte, no solamente por su nombre, además por su rendimiento estable en los últimos años.
«No me gusta eso de estar saliendo por televisión, ni que me pregunten por que hice esto en tal juego o en aquel otro. Lo mío es salir a tirar strike y que no me hagan carreras cuando subo a la lomita, aunque yo sé que no puedo escapar de eso en Cuba». Afirma el espigado lanzador después de pensárselo bastante antes de concederme unos minutos.
«Mira, lo que ocurre con mi nombre es que en todos mis documentos oficiales aparece Yoalkis, pero es un error que vengo arrastrando desde que mis padres me inscribieron, porque ellos me pusieron Yoelkis.
Te imaginas lo que sería para mi tener que cambiar a estas alturas eso, si lo cambio no pudiera ni viajar porque hasta el pasaporte tiene lo mismo»-sentencia mientras cumple el rol de papá con su pequeño intranquilo que ya corre detrás de guantes y pelotas- «No me molesta que me digan ninguno de los dos, por cualquiera respondo, aunque verdaderamente es Yoelkis».
A sus 36 años y más de 100 victorias en la pelota cubana, Yoelkis siente la satisfacción de formar parte del equipo cubano al Torneo Premier 12 que comenzará el 8 de noviembre.
«Nunca había estado en el equipo grande, creo que es la recompenza al esfuerzo de cada día, de cada juego y de cada Serie, solo yo conozco del sacrificio que he hecho para esto. Te aseguro que no hay pitcher en Cuba que corra más que yo en los entrenamientos, por eso considero que es el premio a tanto esfuerzo realizado en muchos años».
Natural del poblado de Gamboa (a unos 20 kilómetros de la capital provincial), Cruz agradece al «profesor Víctor Mesa por haberlo tenido en cuenta». No puede faltar su «gracias a Dios», en un ritual que cumplen la mayoría de los deportistas; frase antiguamente frívola y que ahora mueve a todos.
Cruz tuvo tiempo para mandarle un mensaje a los que no confían en él: «Yo soy de los que está ganando más de 10 juegos por año, cuando la Serie tenía calidad y en los equipos rivales desde el primero al noveno bate cualquiera te castigaba. Es el momento oportuno para mí, en todas mis actuaciones estoy sobrepasando las 90 millas y el control es el mismo. A pesar de tener 36 años nunca me ha dolido ni un dedo.
Esto no quiere decir que no sea un reto, el torneo tendrá mucha calidad, solo me resta demostrar que lanzar juegos de pelota es lo que más disfruto en esta vida».
Yoelkis anda feliz pero sereno, como quien espera mucho más del béisbol: «el Premier 12 me hace la misma ilusión que cuando debuté en Series Nacionales».
Para muchos Yoelkis, para otros Yoalkis, el derecho de Las Tunas ha tenido que convivir con la extraña sensación de estar en boca de aficionados y especialistas al deporte, no solamente por su nombre, además por su rendimiento estable en los últimos años.
«No me gusta eso de estar saliendo por televisión, ni que me pregunten por que hice esto en tal juego o en aquel otro. Lo mío es salir a tirar strike y que no me hagan carreras cuando subo a la lomita, aunque yo sé que no puedo escapar de eso en Cuba». Afirma el espigado lanzador después de pensárselo bastante antes de concederme unos minutos.
«Mira, lo que ocurre con mi nombre es que en todos mis documentos oficiales aparece Yoalkis, pero es un error que vengo arrastrando desde que mis padres me inscribieron, porque ellos me pusieron Yoelkis.
Te imaginas lo que sería para mi tener que cambiar a estas alturas eso, si lo cambio no pudiera ni viajar porque hasta el pasaporte tiene lo mismo»-sentencia mientras cumple el rol de papá con su pequeño intranquilo que ya corre detrás de guantes y pelotas- «No me molesta que me digan ninguno de los dos, por cualquiera respondo, aunque verdaderamente es Yoelkis».
A sus 36 años y más de 100 victorias en la pelota cubana, Yoelkis siente la satisfacción de formar parte del equipo cubano al Torneo Premier 12 que comenzará el 8 de noviembre.
«Nunca había estado en el equipo grande, creo que es la recompenza al esfuerzo de cada día, de cada juego y de cada Serie, solo yo conozco del sacrificio que he hecho para esto. Te aseguro que no hay pitcher en Cuba que corra más que yo en los entrenamientos, por eso considero que es el premio a tanto esfuerzo realizado en muchos años».
Natural del poblado de Gamboa (a unos 20 kilómetros de la capital provincial), Cruz agradece al «profesor Víctor Mesa por haberlo tenido en cuenta». No puede faltar su «gracias a Dios», en un ritual que cumplen la mayoría de los deportistas; frase antiguamente frívola y que ahora mueve a todos.
Cruz tuvo tiempo para mandarle un mensaje a los que no confían en él: «Yo soy de los que está ganando más de 10 juegos por año, cuando la Serie tenía calidad y en los equipos rivales desde el primero al noveno bate cualquiera te castigaba. Es el momento oportuno para mí, en todas mis actuaciones estoy sobrepasando las 90 millas y el control es el mismo. A pesar de tener 36 años nunca me ha dolido ni un dedo.
Esto no quiere decir que no sea un reto, el torneo tendrá mucha calidad, solo me resta demostrar que lanzar juegos de pelota es lo que más disfruto en esta vida».
Yoelkis anda feliz pero sereno, como quien espera mucho más del béisbol: «el Premier 12 me hace la misma ilusión que cuando debuté en Series Nacionales».