Claro que no puede asombrarnos una actuación como la del equipo Cuba en el cuarto juego del tope que sostiene con la organización USA Baseball, mediante la cual alcanzó su primer éxito en cuatro salidas.
Y no debe extrañarnos, porque el nivel de la escuadra que dirige Roger Machado es superior a la presentada por los anfitriones, en cuya nómina aparecen jóvenes peloteros del segundo año universitario. Claro que eso no le quita méritos a Dachel Duquesne, un lanzador de ocho temporadas en Series Nacionales, que obliga al adversario al contacto, pues no da bolas y que anoche tuvo su curva y su slider, dominantes.
En siete completos mandó hacia el home 104 lanzamientos, ponchó a cinco, dio dos boletos y solo un corredor le llegó a posición anotadora por wild y error del receptor Yosvani Alarcón, en una jugada que debió encontrar encima de la intermedia al camarero Juan C. Torriente o al torpedero Raúl González.
«Basé mi trabajo en el control, era esencial. Me propuse salir siempre delante o arriba de cada bateador, pues el primer out del inning es vital, evita profundidad en el ataque del rival», dijo Dachel al terminar el partido.
«Sí, la recta era para marcar, pero fueron los rompientes, curva y slider, los lanzamientos que usé para sacar out», afirmó, y a la pregunta de si esta era su mejor actuación internacional, contestó:
«Bueno, es muy importante, a lo mejor hasta ahora es así, no habíamos ganado un partido. Es decir, tiene una relevancia», aseguró.
Aunque no se trate de una lid internacional de envergadura, él no ha tenido una larga carrera con el equipo Cuba, de ahí el valor de este triunfo.
Duquesne impidió lo que había ocurrido en los tres primeros desafíos, en los cuales USA Baseball marcó la diferencia siempre en el tercio de apertura. Los congelados ahora fueron los bates locales. Al avileño le hubieran bastado las tres del segundo capítulo cuando sus compañeros pegaron cuatro imparables, incluyendo dobletes de Yordanis Samón y Yoelkys Céspedes.
Sin embargo, la ofensiva antillana pudo expresar su solvencia y plantar la real diferencia con sus bisoños oponentes. En el quinto tres inatrapables, esta vez con biangular de Yosvani Alarcón, escribieron otras dos en la pizarra. En el séptimo ligaron cuatro incogibles y el batazo de dos almohadillas lo aportó Jeferson Delgado para registrar otro par de anotaciones.
Todo este bagaje ofensivo fue producido ante los envíos de Gianluca Dalatri, un hombre de buena recta, pero realmente poco dañina, pues apenas se le movía en su trayectoria. Hay que decir que Dalatri fue el primer derecho abridor en el tope, antes sus compañeros zurdos habían hecho estragos en la alineación cubana.
Es bueno aclarar también que cuando hablamos de nivel superior a los contrarios que enfrentamos, nos referimos a varios de los peloteros caribeños que están en esta escuadra, cuyos expedientes los ponen por encima de este tope y de la Liga Can-am.
La respuesta a por qué no salió un resultado como este en la mayoría de los juegos hay que buscarla fuera del terreno, desde la misma concepción del equipo hasta el real objetivo de esta gira por Canadá y Estados Unidos.
Por eso digo que no hay de qué asombrarse, Dachel es un pitcher de nivel y la plantilla dirigida por Roger Machado tenía nivel suficiente para imponerse. Por cierto, este mismo elenco logra su sexta victoria en 25 juegos y no vencía desde el pasado 27 de junio cuando le ganó a Rockland Boulders, en la liga Can-am y parece que Duquesne tiene la llave, pues aquel día él fue el abridor –aunque no ganó– y para más coincidencia, Leomil González, como ayer, fue el cerrador del duelo. Por cierto, el taponero fue quien aceptó las carreras del cuadro oponente, al aceptar tres jit y dar un pelotazo en el noveno.
Juan C. Torriente (4-3 y dos remolcadas), Norel González (4-3, una empujada y otra anotada); Yordanis Samón (3-2, impulsó una y registró dos en home y Yosvani Alarcón (5-2, con dos anotadas), fueron las bujías de la ofensiva de la ecuadra nacional.
Para este viernes, por Cuba abrirá el quinto y último juego el zurdo Yoannis Yera.
Y no debe extrañarnos, porque el nivel de la escuadra que dirige Roger Machado es superior a la presentada por los anfitriones, en cuya nómina aparecen jóvenes peloteros del segundo año universitario. Claro que eso no le quita méritos a Dachel Duquesne, un lanzador de ocho temporadas en Series Nacionales, que obliga al adversario al contacto, pues no da bolas y que anoche tuvo su curva y su slider, dominantes.
En siete completos mandó hacia el home 104 lanzamientos, ponchó a cinco, dio dos boletos y solo un corredor le llegó a posición anotadora por wild y error del receptor Yosvani Alarcón, en una jugada que debió encontrar encima de la intermedia al camarero Juan C. Torriente o al torpedero Raúl González.
«Basé mi trabajo en el control, era esencial. Me propuse salir siempre delante o arriba de cada bateador, pues el primer out del inning es vital, evita profundidad en el ataque del rival», dijo Dachel al terminar el partido.
«Sí, la recta era para marcar, pero fueron los rompientes, curva y slider, los lanzamientos que usé para sacar out», afirmó, y a la pregunta de si esta era su mejor actuación internacional, contestó:
«Bueno, es muy importante, a lo mejor hasta ahora es así, no habíamos ganado un partido. Es decir, tiene una relevancia», aseguró.
Aunque no se trate de una lid internacional de envergadura, él no ha tenido una larga carrera con el equipo Cuba, de ahí el valor de este triunfo.
Duquesne impidió lo que había ocurrido en los tres primeros desafíos, en los cuales USA Baseball marcó la diferencia siempre en el tercio de apertura. Los congelados ahora fueron los bates locales. Al avileño le hubieran bastado las tres del segundo capítulo cuando sus compañeros pegaron cuatro imparables, incluyendo dobletes de Yordanis Samón y Yoelkys Céspedes.
Sin embargo, la ofensiva antillana pudo expresar su solvencia y plantar la real diferencia con sus bisoños oponentes. En el quinto tres inatrapables, esta vez con biangular de Yosvani Alarcón, escribieron otras dos en la pizarra. En el séptimo ligaron cuatro incogibles y el batazo de dos almohadillas lo aportó Jeferson Delgado para registrar otro par de anotaciones.
Todo este bagaje ofensivo fue producido ante los envíos de Gianluca Dalatri, un hombre de buena recta, pero realmente poco dañina, pues apenas se le movía en su trayectoria. Hay que decir que Dalatri fue el primer derecho abridor en el tope, antes sus compañeros zurdos habían hecho estragos en la alineación cubana.
Es bueno aclarar también que cuando hablamos de nivel superior a los contrarios que enfrentamos, nos referimos a varios de los peloteros caribeños que están en esta escuadra, cuyos expedientes los ponen por encima de este tope y de la Liga Can-am.
La respuesta a por qué no salió un resultado como este en la mayoría de los juegos hay que buscarla fuera del terreno, desde la misma concepción del equipo hasta el real objetivo de esta gira por Canadá y Estados Unidos.
Por eso digo que no hay de qué asombrarse, Dachel es un pitcher de nivel y la plantilla dirigida por Roger Machado tenía nivel suficiente para imponerse. Por cierto, este mismo elenco logra su sexta victoria en 25 juegos y no vencía desde el pasado 27 de junio cuando le ganó a Rockland Boulders, en la liga Can-am y parece que Duquesne tiene la llave, pues aquel día él fue el abridor –aunque no ganó– y para más coincidencia, Leomil González, como ayer, fue el cerrador del duelo. Por cierto, el taponero fue quien aceptó las carreras del cuadro oponente, al aceptar tres jit y dar un pelotazo en el noveno.
Juan C. Torriente (4-3 y dos remolcadas), Norel González (4-3, una empujada y otra anotada); Yordanis Samón (3-2, impulsó una y registró dos en home y Yosvani Alarcón (5-2, con dos anotadas), fueron las bujías de la ofensiva de la ecuadra nacional.
Para este viernes, por Cuba abrirá el quinto y último juego el zurdo Yoannis Yera.