El veterano pelotero Frederich Cepeda confesó hoy que quiere estar en el equipo Cuba que asistirá al IV Clásico Mundial de Béisbol, previsto a inicios del próximo año.

Sueño con el Clásico. Sería quizás el único cubano con cuatro apariciones en ese torneo y cada hit, impulsada, jonrón o anotada sería un récord personal y para Cuba, declaró al periódico Trabajadores.

El jugador asegura que sus prioridades actuales son la salud, su familia y jugar béisbol, y lamentó que no lo hubieran llamado para la Serie del Caribe de este año, donde pretendía defender el título de Jugador Más Valioso conquistado en la versión de 2015.

De momento, parece que está en condiciones de volver a la selección nacional, pues va segundo entre los bateadores con .439 de average, con seis cuadrangulares y el mejor OBP (.549) y OPS (1256) de la campaña, a pesar de no estar todavía físicamente bien del todo.

En cualquier caso, el jardinero asegura que ahora mismo solo piensa seguir jugando béisbol.

No tengo en mi cabeza retirarme. Incluso, haga o no el equipo al IV Clásico, señaló el jugador, quien se recupera todavía de sendas operaciones de codo y rodilla.

Además, en su mente está mejorar sus números individuales en las campañas domésticas para acercarse a los dos mil hits (tiene hasta este domingo 1776), y los 300 jonrones (acumula 271).

Me atrasé un poco por los dos años que estuve en Japón y solo pude jugar 20 y tantos partidos en la primera Serie cuando regresé. En la pasada, cuando vine, ya se había acabado el torneo, manifestó.

Sobre la inserción internacional de los peloteros cubanos, deseó que se amplíe, pero opinó que todavía deben aprender a manejar los contratos.

Considero que hay que acercarse más a los peloteros contratados. Nadie va a allá a visitarte ni a saber cómo te va. Si no es un abogado, tiene que ser un representante del Inder (Instituto cubano de Deportes) o como se llame, porque pasan cosas y luego es tarde, explicó.

No obstante, considera que esa no es la solución para elevar el nivel del béisbol cubano si no se acompaña de un adecuado trabajo con los que quedan en la Isla, y para eso prefiere que la Serie Nacional sea más larga, para evitar que jugadores prometedores estén fuera de los terrenos.