Alejado del frío de Toronto, Adeiny Hechavarría está seguro de que su carrera en las Grandes Ligas entrará en fuego una vez que tenga la oportunidad de jugar de manera consistente para los Marlins de Miami.
Todos los reportes de scouts afirman que el santiaguero, que debutó en agosto de este año en las Mayores, posee manos soberbias y no por gusto la revista especializada Baseball América lo seleccionó como el mejor defensor dentro de la franquicia de Toronto, pero también existen dudas sobre su capacidad para batear como lo exige el béisbol de alto nivel. Hechavarría también ha leído las evaluaciones sobre su juego y para los críticos tiene una respuesta: lo mejor está por venir.
Una de las piezas más importantes del canje que envió a Canadá a varios peloteros de los peces, el cubano accedió a hacer un alto en su entrenamiento de fin de año para conversar con El Nuevo Herald sobre ese futuro que aún está por escribirse delante de una fanaticada que tanto clamó por tener un pelotero de la isla en el club de Grandes Ligas en La Pequeña Habana.
¿Te sorprendió el pacto entre los Marlins y los Azulejos?
“No te voy a decir que fue un shock, pero sí me sorprendió un poco. En Cuba uno nace y muere jugando para el mismo equipo y aquí lo hace con 30 posibilidades potenciales. Sólo hay que saber adaptarse y sobrevivir a los cambios’’.
¿Piensas sobrevivir a este?
“Fijate que no lo veo mal. Qué mejor que estar al lado de la familia, los amigos y los fanáticos del país de uno. Y lo mejor de todo, adiós al frío, porque, compadre, mire que allá en Toronto hace frío…’’.
¿Qué expectativas tienes con los Marlins?
“Espero que me traten bien, soy un buen muchacho, de buen corazón y también espero pagarles con mi mejor juego. Tengo el chance de florecer y convertirme en un pelotero reconocido en las Mayores, sé que ellos me darán mucho tiempo de juego, que es lo que necesito para demostrar mi talento. Creo que es una situación ganadora para mí desde todo punto de vista’’.
Aquí todavía hay mucha gente descontenta con esa canje que se llevó a peloteros de experiencia y años dentro del club, ¿qué le dirías a esos fanáticos?
“Yo entiendo a los fanáticos, pero la vida está llena de ciclos y hay que darle tiempo al tiempo. En mi caso, sólo puedo ofrecer mi palabra de que lo mejor de Adeiny Hechavarría está por venir. Vengo con el corazón en la mano a dar mi máximo esfuerzo y ojalá que se caliente de nuevo ese cariño por el equipo. Los que llegamos no queremos otra cosa que ver felices a los aficionados’’.
Por aquí han pasado torpederos de calibre como Alex González, Hanley Ramírez, José Reyes. Esa posición es de mucha responsabilidad.
“Sí, estoy consciente de eso, pero creo que, con toda la humildad posible, puedo ocuparme de ese puesto y continuar la labor de esos grandes jugadores que mencionas. No puedo presionarme ni tratar de hacer más, sino salir a ser quién soy’’.
Omar Vizquel se ha deshecho en elogios para ti, ¿qué significa cuando una leyenda como el venezolano te mima de esa forma?
“Un orgullo y un placer. Cuando estaba junto a él quería convertirme en una esponja, tratando de aprender lo que más pudiera. Omar es un Salón de la Fama y él me daba consejos, me hacía ver errores, me hacía chistes cuando me veía preocupado. Me decía que no tratara de hacer todo perfecto, pero que siempre lo hiciera todo con pasión. Todavía pienso en él y se me eriza la piel’’.
Todos los reportes de scouts afirman que el santiaguero, que debutó en agosto de este año en las Mayores, posee manos soberbias y no por gusto la revista especializada Baseball América lo seleccionó como el mejor defensor dentro de la franquicia de Toronto, pero también existen dudas sobre su capacidad para batear como lo exige el béisbol de alto nivel. Hechavarría también ha leído las evaluaciones sobre su juego y para los críticos tiene una respuesta: lo mejor está por venir.
Una de las piezas más importantes del canje que envió a Canadá a varios peloteros de los peces, el cubano accedió a hacer un alto en su entrenamiento de fin de año para conversar con El Nuevo Herald sobre ese futuro que aún está por escribirse delante de una fanaticada que tanto clamó por tener un pelotero de la isla en el club de Grandes Ligas en La Pequeña Habana.
¿Te sorprendió el pacto entre los Marlins y los Azulejos?
“No te voy a decir que fue un shock, pero sí me sorprendió un poco. En Cuba uno nace y muere jugando para el mismo equipo y aquí lo hace con 30 posibilidades potenciales. Sólo hay que saber adaptarse y sobrevivir a los cambios’’.
¿Piensas sobrevivir a este?
“Fijate que no lo veo mal. Qué mejor que estar al lado de la familia, los amigos y los fanáticos del país de uno. Y lo mejor de todo, adiós al frío, porque, compadre, mire que allá en Toronto hace frío…’’.
¿Qué expectativas tienes con los Marlins?
“Espero que me traten bien, soy un buen muchacho, de buen corazón y también espero pagarles con mi mejor juego. Tengo el chance de florecer y convertirme en un pelotero reconocido en las Mayores, sé que ellos me darán mucho tiempo de juego, que es lo que necesito para demostrar mi talento. Creo que es una situación ganadora para mí desde todo punto de vista’’.
Aquí todavía hay mucha gente descontenta con esa canje que se llevó a peloteros de experiencia y años dentro del club, ¿qué le dirías a esos fanáticos?
“Yo entiendo a los fanáticos, pero la vida está llena de ciclos y hay que darle tiempo al tiempo. En mi caso, sólo puedo ofrecer mi palabra de que lo mejor de Adeiny Hechavarría está por venir. Vengo con el corazón en la mano a dar mi máximo esfuerzo y ojalá que se caliente de nuevo ese cariño por el equipo. Los que llegamos no queremos otra cosa que ver felices a los aficionados’’.
Por aquí han pasado torpederos de calibre como Alex González, Hanley Ramírez, José Reyes. Esa posición es de mucha responsabilidad.
“Sí, estoy consciente de eso, pero creo que, con toda la humildad posible, puedo ocuparme de ese puesto y continuar la labor de esos grandes jugadores que mencionas. No puedo presionarme ni tratar de hacer más, sino salir a ser quién soy’’.
Omar Vizquel se ha deshecho en elogios para ti, ¿qué significa cuando una leyenda como el venezolano te mima de esa forma?
“Un orgullo y un placer. Cuando estaba junto a él quería convertirme en una esponja, tratando de aprender lo que más pudiera. Omar es un Salón de la Fama y él me daba consejos, me hacía ver errores, me hacía chistes cuando me veía preocupado. Me decía que no tratara de hacer todo perfecto, pero que siempre lo hiciera todo con pasión. Todavía pienso en él y se me eriza la piel’’.
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