Después de seis jornadas donde los jonrones brillaron por su ausencia, la fuerza salió a relucir en los cinco partidos vespertinos con 11 cuadrangulares, algunos de ellos decisivos como el del antesalista guantanamero Vismay Santos, para darle a su equipo la quinta victoria en línea.

VISMAY DECIDIÓ CON SU JONRÓN DE TRES CARRERAS.

Fue el del Nguyen Van Troi un partido que exhibió un duelo a ceros durante sus dos primeros tercios entre los derechos José Luis Moulin y el internacional Vladimir Baños, el primero colgando siete escones con solo cinco indiscutibles permitidos. Baños fue un digno rival, pero en la entrada de la suerte transfirió a Cerce, propinó un pelotazo y Vismay le botó la Mizuno 200 por el jardín central.

No menos cerrado resultó el desafío en el remozado parque artemiseño 26 de Julio. Ventaja mínima para los Gallos exhibía el pizarrón por el jonrón de Cepeda con uno a bordo, a la derecha frente al mundialista zurdo Yulieski González, cuando en el noveno el mayor de los Gourriel, Yunieski, remolcó las de la puntilla con tubey a la banda derecha. Fue la cuarta victoria de los espirituanos frente a tres reveses.

Igualmente, por estrecho margen superaron los Sabuesos holguineros a los Huracanes de Mayabeque, una carrera de diferencia en un desafío que los visitantes estuvieron a punto de empatar casi a la hora de recoger los bates cuando cayeron sobre el relevista Yaisel Sierra. El mentor Irochis Bartutis tuvo que apelar al cerrador Pablo Millán Fernández para sacar los últimos cinco outs. Danger Guerrero pegó dos jits en tres turnos y se quedó solo como líder de los bateadores, 525 de average.

De que Camagüey anda bien y Santiago mal dio fe el partido de ayer. Las Avispas tomaron la delantera con dos carreras, impulsadas por el novato José David Silveira con un triple. Pero el pitcheo no aguantó y primero William Luis le botó la esférica al abridor Carlos Manuel Portuondo y después Alexander Ayala clavó el puntillazo sobre una oferta de Alberto Bicet con un cuadrangular.

Los Alazanes granmenses se convirtieron en el único equipo con promedio de bateo por encima de 300 al dispararle 17 inatrapables al pitcheo de la Isla, incluidos seis dobletes y tres cuadrangulares, uno de ellos el primero con las bases llenas de la actual campaña, salido del bate de Carlos Benítez, secundado por Alfredo Despaigne, de 3-2, jonrón y tres remolcadas, Tres novatos lanzaron los últimos cinco actos por los ganadores, incluido el triunfador Gleiner Sanz, autor de ocho outs sin permitir anotaciones.