A Raudel Lazo no le interesa que su nombre no aparezca tanto, pero cuando el río de los Marlins suena es porque alguna piedra trae, y más ahora que el equipo anda en busca de respuestas baratas a problemas de peso.
Firmado por los Marlins en el 2011 –escapó de la isla en el 2010-, Lazo tuvo un excelente debut con los Hammerheads de Jupiter (Clase A avanzada) al terminar con marca de 7-1 y efectividad de 2.44 en función de relevista.
Es muy probable que el zurdo pinareño, de apenas 23 años, reciba una invitación al entrenamiento primaveral, pero en cualquier caso siempre ascendería en el sistema de granja de los peces.
Aunque la temporada de las Ligas Menores finalizó desde septiembre, Lazo no ha dejado de entrenar ni un día y en medio de una práctica brutal en North Miami Beach aceptó conversar con El Nuevo Herald sobre sus planes futuros.
¿Qué te ha dicho el equipo de lo que piensan hacer contigo este año?
“No hemos hablado mucho, pero creo que están contentos con mi trabajo. En realidad ellos saben que me esforcé y di el máximo. Tuve la suerte de ser elegido al Juego de las Estrellas del circuito y espero que me inviten al entrenamiento de primavera, lo cual sería una gran oportunidad para mí’’.
¿Ahora mismo en qué estás trabajando, cuando todavía faltan casi tres meses para la primavera?
“Sobre todo estoy fortaleciendo la parte física. Es cierto que hasta fines de febrero no nos reportaremos al spring training, pero este año no quiero dejar nada al azar y controlar todo lo que pueda controlar. Creo que voy en la dirección correcta, siento el brazo muy fuerte y he entrenado como nunca antes. Cuando venga febrero espero tener un buen tramo recorrido’’.
¿Si los Marlins te llaman al entrenamiento de primavera crees que puedes hacer el equipo para la próxima temporada?
“Por mí no va a quedar. Estoy consciente que he volado por debajo del radar dentro de la organización, pero ellos ya pudieron ver de lo que soy capaz en las Menores. Me preguntabas el por qué de tanta práctica en diciembre, pues bien, la respuesta es que quiero verme lanzando en abril en La Pequeña Habana delante de tantos compatriotas. En mi opinión existen posibilidades en el bullpen del conjunto. Los puestos no están escritos en piedra. Hay chance’’.
Tú empezaste tirando en las 80 millas por horas altas, pero ahora te están midiendo envíos de 94 millas, ¿cómo has logrado ese incremento de velocidad?
“Con mucho trabajo, corriendo y corriendo, tensando mi cuerpo al máximo. Uno a veces no se da cuenta de la fuerza interior que posee. Aquí lo importante no es conformarse con lo que tiene a simple vista, sino buscar bien dentro esas fuerzas, exigirte a ti mismo que la realidad no es suficiente y, en este mundo del béisbol, te recalco que no es suficiente. Siempre hay que ir por más’’.
¿Te consideras un relevista nato?
“Sí, en Cuba era relevista y aquí he continuado con esta labor. Mi condición de zurdo me ayuda mucho a dominar a los bateadores de esa mano, pero trato siempre de imponerme a todos. He logrado especializarme y preparar mi mente para salir de apuros en una entrada, dos o tres. En el bullpen yo puedo hacer de todo’’.
Aunque no eres tan gigante como él, sé que eres primo de Pedro Luis Lazo, quien ahora juega en el béisbol profesional de México. ¿Cómo ves en la distancia al lanzador de Pinar del Río?
“No me comunico mucho con él, pero claro está en Cuba es una leyenda. Un ejemplo de consistencia, de durabilidad. El hecho de que aún sigue trabajando dice mucho de su dedicación al deporte. Yo no tengo su estatura, pero si pudiera llevarme algo de él sería esa constancia y la paciencia para seguir adelante en las buenas y en las malas’’.
Raudel, también zurdo, integró una preselección cubana rumbo a una lid internacional en 2010. Durante el torneo criollo previo lanzó en 29 ocasiones –22 como relevista—con récord de siete triunfos y nueve derrotas, efectividad de 3.99 y 88 ponches.
Firmado por los Marlins en el 2011 –escapó de la isla en el 2010-, Lazo tuvo un excelente debut con los Hammerheads de Jupiter (Clase A avanzada) al terminar con marca de 7-1 y efectividad de 2.44 en función de relevista.
Es muy probable que el zurdo pinareño, de apenas 23 años, reciba una invitación al entrenamiento primaveral, pero en cualquier caso siempre ascendería en el sistema de granja de los peces.
Aunque la temporada de las Ligas Menores finalizó desde septiembre, Lazo no ha dejado de entrenar ni un día y en medio de una práctica brutal en North Miami Beach aceptó conversar con El Nuevo Herald sobre sus planes futuros.
¿Qué te ha dicho el equipo de lo que piensan hacer contigo este año?
“No hemos hablado mucho, pero creo que están contentos con mi trabajo. En realidad ellos saben que me esforcé y di el máximo. Tuve la suerte de ser elegido al Juego de las Estrellas del circuito y espero que me inviten al entrenamiento de primavera, lo cual sería una gran oportunidad para mí’’.
¿Ahora mismo en qué estás trabajando, cuando todavía faltan casi tres meses para la primavera?
“Sobre todo estoy fortaleciendo la parte física. Es cierto que hasta fines de febrero no nos reportaremos al spring training, pero este año no quiero dejar nada al azar y controlar todo lo que pueda controlar. Creo que voy en la dirección correcta, siento el brazo muy fuerte y he entrenado como nunca antes. Cuando venga febrero espero tener un buen tramo recorrido’’.
¿Si los Marlins te llaman al entrenamiento de primavera crees que puedes hacer el equipo para la próxima temporada?
“Por mí no va a quedar. Estoy consciente que he volado por debajo del radar dentro de la organización, pero ellos ya pudieron ver de lo que soy capaz en las Menores. Me preguntabas el por qué de tanta práctica en diciembre, pues bien, la respuesta es que quiero verme lanzando en abril en La Pequeña Habana delante de tantos compatriotas. En mi opinión existen posibilidades en el bullpen del conjunto. Los puestos no están escritos en piedra. Hay chance’’.
Tú empezaste tirando en las 80 millas por horas altas, pero ahora te están midiendo envíos de 94 millas, ¿cómo has logrado ese incremento de velocidad?
“Con mucho trabajo, corriendo y corriendo, tensando mi cuerpo al máximo. Uno a veces no se da cuenta de la fuerza interior que posee. Aquí lo importante no es conformarse con lo que tiene a simple vista, sino buscar bien dentro esas fuerzas, exigirte a ti mismo que la realidad no es suficiente y, en este mundo del béisbol, te recalco que no es suficiente. Siempre hay que ir por más’’.
¿Te consideras un relevista nato?
“Sí, en Cuba era relevista y aquí he continuado con esta labor. Mi condición de zurdo me ayuda mucho a dominar a los bateadores de esa mano, pero trato siempre de imponerme a todos. He logrado especializarme y preparar mi mente para salir de apuros en una entrada, dos o tres. En el bullpen yo puedo hacer de todo’’.
Aunque no eres tan gigante como él, sé que eres primo de Pedro Luis Lazo, quien ahora juega en el béisbol profesional de México. ¿Cómo ves en la distancia al lanzador de Pinar del Río?
“No me comunico mucho con él, pero claro está en Cuba es una leyenda. Un ejemplo de consistencia, de durabilidad. El hecho de que aún sigue trabajando dice mucho de su dedicación al deporte. Yo no tengo su estatura, pero si pudiera llevarme algo de él sería esa constancia y la paciencia para seguir adelante en las buenas y en las malas’’.
Raudel, también zurdo, integró una preselección cubana rumbo a una lid internacional en 2010. Durante el torneo criollo previo lanzó en 29 ocasiones –22 como relevista—con récord de siete triunfos y nueve derrotas, efectividad de 3.99 y 88 ponches.