Los Caribes de Anzoátegui concluyeron invictos (4-0) la etapa clasificatoria de la Serie del Caribe 2015, al vencer 4-2 a los Tomateros de Culiacán y enfrentarán a los Vegueros de Pinar del Río en la segunda semifinal del sábado.

Los venezolanos remontaron una desventaja inicial de dos carreras y tras empatar en el sexto episodio con doblete clave del cubano Félix Pérez, aseguraron el partido en el octavo con bambinazo de Oswaldo Arcia con un corredor en circulación.

Arcia, quien prácticamente llegó del aeropuerto para el estadio, salió a cazar una oportunidad ante el relevista mexicano Manuel Barreda y en cuenta de 1-3 le pescó una recta en la zona alta para desaparecerla por el jardín derecho. "En ese turno salí bien agresivo al plato, listo para hacerle swing a cualquier pitcheo que se quedara en la zona. Gracias a Dios me llegó el lanzamiento que estaba esperando y pude hacer buen contacto", explicó Arcia, quien juega en Grandes Ligas para los Mellizos de Minnesota.

Fue un juego arduo, que requirió de una remontada del equipo que mejor lució a lo largo de toda la fase preliminar. "Este partido mostró una faceta más de lo que ha sido este equipo desde la temporada en Venezuela, pues aunque salimos en desventaja, supimos mantenernos pegados a la espera de las oportunidades que nos diera el rival", dijo por su parte Omar López, dirigente de los Caribes.

"Hay que darle crédito a nuestros relevistas. Primero Carlos Silva, aunque la defensa no pudo materializar una jugada que lo complicó y ya con bases llenas tuve que traer a Jan Toledo, que depende de las sinkers, para tratar de obligar a los bateadores a conectar de rolas, como en efecto pasó, para minimizar el daño", añadió López.

Para la semifinal del sábado ante Cuba, el mentor había anunciado inicialmente a Omar Poveda, pero decidió cambiar y darle la pelota a Darrell Thompson.

"Anoche (jueves) durante el juego, pensando en ciertas cosas que se me vinieron a la mente, como parte del instinto con que he dirigido todo este año, decidí que Darrell Thompson debería ser el abridor frente a Cuba, pues tiene los días de descanso y ha sido a lo largo de toda la temporada uno de nuestros principales hombres", consideró López.

"Sin quitarle méritos a Poveda, creo que Thompson es el hombre, porque si no hay victoria mañana no hay juego final el domingo. Tengo que jugármela con mi carta de todo el año", añadió el director.

"Thompson sabe que tiene que salir a hacer su pitcheo, a marcar strikes y no regalar bolas, pues ellos (los cubanos) son bateadores muy agresivos, que le hacen swing a todo entre los dos o tres primeros pitcheos que ven. Ellos mismos se van a hacer out cuando se desesperen en el home plate", concluyó.