“No fuimos productivos. Conectamos 12 jits y apenas anotamos tres carreras. Así no se puede aspirar a ganar un juego”, expresó con franqueza Abeicy Pantoja, mentor de Leñadores de Las Tunas, tras caer por segunda vez consecutiva ante los Tigres de Ciego de Ávila en la gran final de la III Liga Élite del Béisbol Cubano.

En este segundo desafío, la ofensiva tunera, conocida por su capacidad de empujar corredores, dejó a 10 hombres en circulación, incluidos siete en posición anotadora, un déficit que resultó determinante en el resultado.

“Nuestros bateadores están persiguiendo lanzamientos fuera de la zona de strike. Les pedimos paciencia en el cajón antes de que empezara la serie, pero no la han tenido”, lamentó Pantoja, al destacar una de las principales causas del bajón ofensivo.

Históricamente, los Leñadores no han iniciado ninguna final —ni en la Serie Nacional ni en la Liga Élite— con dos derrotas seguidas. Su poder ofensivo, liderado por sluggers de temer, siempre había marcado la diferencia en instancias decisivas.

Sin embargo, el estratega recordó que esta misma alineación fue capaz de producir 15 carreras ante Santiago de Cuba en semifinales. “Eso demuestra que tenemos con qué reaccionar. Quizá hagamos ajustes en el orden al bate para el tercer juego”, adelantó.

El próximo compromiso será este martes en el estadio Julio Antonio Mella, con los tuneros como anfitriones. Allí podría comenzar la remontada, aunque Pantoja advierte que “todos estamos conscientes de la urgencia de fabricar carreras”. El cuerpo técnico se reunirá para definir los cambios necesarios que devuelvan a la novena su poder remolcador.

El técnico también reconoció que los errores en momentos clave y algunas decisiones apresuradas han costado carreras vitales. “No se puede ganar así. Hemos pagado muy caro nuestras equivocaciones”, subrayó.

Aun así, el timonel confía en su cuerpo de relevistas, especialmente en Keniel Ferraz, Rodolfo Díaz y Alberto Pablo Civil, a quienes considera pilares de este equipo campeón. “Con ellos he ganado dos títulos. Tengo plena confianza en que responderán cuando más lo necesitamos.”

Sobre el próximo duelo, aseguró: “Estar 0-2 abajo es incómodo, pero no imposible. Este equipo ha demostrado carácter y compromiso. Solo hay que salir a hacer el trabajo como sabemos.”

Para el tercer juego, Eliander Bravo subirá al montículo por Las Tunas, mientras que Kevin Soto lo hará por Ciego de Ávila, en un choque crucial que podría definir el rumbo de esta final de la Liga Élite del Béisbol Cubano.