Obligados a ganar, los «cocodrilos» de Matanzas hicieron los deberes este jueves y vencieron 6-3 a Industriales en el segundo partido de la final occidental del béisbol cubano. De tal manera, la serie llegará al Latino con empate a un triunfo por bando.

Esta vez fueron los yumurinos quienes atacaron temprano y anotaron dos veces en la primera entrada frente al zurdo Ian Rendón. Heredia, Benavides y Santoya pegaron cañonazos, y un error de Tabares le abrió las puertas a la segunda carrera.

Pero Industriales descontó una raya en el segundo capítulo por hit de Malleta, boleto a Serguei y otro cohete de Tabares. Luego vino el polémico doble play sobre el roletazo de Frank Camilo, pues el árbitro principal, Elber Ibarra, no apreció que la pelota había golpeado en el pie al receptor capitalino.

De nuevo Matanzas tomó diferencia de dos carreras en el tercer episodio, cuando ligó hits de Benavides, Gracial y Herrera. Sin embargo, los azules empataron en el cuarto por el jonrón de Yasmani Tomás con Serguei en circulación.

Así se mantuvo el choque hasta el sexto, cuando los yumurinos marcaron las tres anotaciones decisivas frente al relevista Darwin Beltrán. Entonces Guillermo Heredia pegó un doble de oro con dos compañeros a bordo y luego Benavides sopló otro cañonazo que clavó la puntilla.

Del resto se encargó el derecho Joel Suárez, quien sustituyó en el quinto inning al abridor Yohan Hernández y no permitió libertades hasta el noveno, cuando les cedió los dos últimos outs al zurdo Yoanni Yera y al «matador» Félix Fuentes, ambos por la vía del ponche.

Así, Víctor Mesa volvió a «tocar la flauta», pues movió toda su alineación y los cambios le salieron a pedir de boca. El propio Benavides disparó tres hits en cuatro turnos como segundo bate y fue el mejor artillero del choque junto a Heredia (de 5-3).

En la conferencia de prensa, el piloto de los «cocodrilos» anunció al derecho Maikel Martínez para abrir el sábado en el Latino. Por su parte, Lázaro Vargas no reafirmó al derecho Frank Monthiet. «Quizá utilicemos otra estrategia», comentó, y dejó a todo el mundo rascándose la cabeza.