Un juego de pelota cerrado, con la expectativa al límite digno del campeón y subcampeón de la 60 Serie Nacional de Béisbol. Así se descorrieron las cortinas de la temporada 61 de la pelota cubana entre Granma y Matanzas, con vendetta para los cocodrilos 4-3, y la pelota rodando ya en toda la geografía nacional.

Armando Ferrer y Carlos Martí apostaron a dos de las mejortes cartas de sus respectivos staff de pitcheo: Noelvis Entenza y César García.

Diestros de calidad, independientemente de que a ambos le arañaron la pintura con dos carreras en el mismo primer inning, en buena medida por que sus respectivas defensas no les acompañaron.

Así caminaron ambos elencos hasta el quinto, con autorrelevos de ambos abridores, los cuales fueronencontrando el control sobre sus comandos y las defensas cerrando las brechas.

Justo en la baja de ese acto el antesalista Osvaldo Abreu conectó un doble y empujó a Alexquemer Sánchez con la ventaja parcial. Esa conexión decretó la salida de Entenza, y en su rescate llegaría el zurdo Naykel Cruz, una de las revelaciones de la pelota cubana de la pasada contienda, y quien haciendo gala de sus virtudes, se encargó de poner un cerrojo a la batería de los granmenses, que en definitiva concluyó el desafío reducida a cinco indiscutibles.

Los yumurinos igualarían las acciones en el principio del sexto, y luego, en el llamado lucky seven un jonrón en solitario del jardinero central Eduardo Blanco les dio la ventaja mínima, que a la postre resultó definitiva.

Martí intentó contener a los de la Atenas de Cuba con Kelbis Rodríguez, uno de los relevistas que mejores dividendos le dio a su cuerpo de lanzadores en la campaña precedente, pero en esta oportunidad no estuvo del todo ajustado, y soportó un biangular, aunque el mal ya estaba hecho.

Este primer desafío demostró que los bateadores de nivel continúan estando por encima del pitcheo promedio en nuestros clásicos domésticos; independientemente de que el duelo dominical no fue de esa ofensiva desbordada. En ese acápite los yumurinos dispararon una decena de cohetes, pero pudieron ligar mejor a la hora de producir carreras, al punto de dejar una decena corredores en las almohadillas.

Factores claves:

El relevo hermético del siniestro Naykel Cruz por los matanceros, demostrando ante un elenco de una alineación profunda como Granma, monarcas nacionales además, que puede encarar cualquier tipo de choque, bajo presión además.

Permitió un solitario inatrapable en 4.2 tercios de episodios, además de retirar a tres rivales por la vía de los strikes.

El cuadrangular vencedor de Blanco, un bateador versátil, que siempre he valorado, y que ciertamente ante la profundidad del line-up yumurino está colocado en el noveno turno al bate, también por la velocidad que despliega sobre las bases y para enlazar la batería.

Del otro lado, César García cargó con el revés luego de trabajar seis episodios en los cuales soportó ocho cohetes y las cuatro anotaciones de los yumurinos.

La inauguración

Con anterioridad al desafío, se celebró la ceremonia inaugural de la Serie, en la cual los anfitriones hicieron gala de su hospitalidad y tanto atletas como árbitros se comprometieron a jugar e impartir justicia con transparencia y amor a la camiseta, ante una representación de cada uno de los 16 elencos en disputa.

El cierre, con un repaso de los ocho mejores equipos de la Serie 60 para tener una idea antes de adentrarnos en el clásico de las aspiraciones de los contendientes:

    Granma.
    Matanzas.
    Las Tunas.
    Pinar del Río.
    Sancti Spíritus.
    Santiago de Cuba.
    Cienfuegos.
    Industriales.

La pelota ya está rodando. Usted, siga a partir de ahora las incidencias de nuestro torneo. La hora de la polémica comenzó y ahora los cálculos hasta dentro de 75 partidos, comenzarán en los amantes de nuestra pasión.