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El exquisito trabajo de Ismel Jiménez en su última salida ante Matanzas puso un sello de garantía al desempeño del pitcheo de los Gallos en los inicios de la actual campaña beisbolera.
En una galopante carrera hacia las 100 victorias (le faltan solo cuatro), el trinitario lanzó finísimo frente a los yumurinos para ganar su tercer partido y campear entre los principales líderes de la serie. Permitió solo cinco hits durante las nueve entradas que representaron su primera lechada de la justa (colíder).
Lo más llamativo en su trabajo es el control. Solo dos boletos en 27 entradas y 26 ponches (líder hasta el viernes), sostén de un Promedio de Carreras Limpias de lujo: 0.98 (noveno) y un bateo contrario de apenas 202.
Pero el influjo de Ismel ha logrado contagiar al staff espirituano de tal manera que en los primeros 12 partidos los Gallos lideraban el pitcheo de la justa con un excelente promedio colectivo de 2.02.
El cuerpo que entrenan Juan de Dios Peña y Roberto Ramos encabeza el número de lechadas del torneo con cuatro, es el primero en ponches propinados con 70 y concede la menor cantidad de boletos, apenas 15. Imaginen que los lanzadores de Mayabeque, que le siguen en ese acápite, han regalado el doble. Los contrarios le batean para 234 (cuarto).
La mejoría sobrevino tras enfrentar a Ciego de Ávila en la única subserie que han perdido hasta la fecha. En los dos últimos cotejos particulares ante Artemisa y Matanzas los lanzadores yayaberos han permitido solo seis carreras, cinco de ellas limpias en 54 entradas, con tres lechadas incluidas.
Además de Ismel, descuellan entre las individualidades Noelvis Hernández, líder del torneo en PCL con 0.00, al no permitir carreras en 14 entradas de actuación.
Justo es reconocer el trabajo de Yamichel Pérez, quien después de una primera salida fatídica ha tenido soberbias actuaciones con par de triunfos. También Omar Guardarrama, con dos salvamentos.
Resulta más meritorio tal desempeño si tenemos en cuenta que esta ha sido una temporada con reinado del pitcheo en sentido general, con 3.02 de promedio entre los 16 conjuntos.
Así, los lanzadores aupan el accionar de los Gallos, que han logrado un paso muy estable en estos inicios al punto de mantenerse en el pelotón de avanzada de la contienda, con balance favorable de triunfos y reveses, para figurar entre los puestos del dos al cuatro antes de iniciar este viernes el enfrentamiento con los Azules.
Junto al ascenso del pitcheo tranquiliza un poco la gradual mejoría de la defensa que, aun cuando está lejos de sus potencialidades, ha logrado por primera vez rebasar la barrera de los 960, aunque todavía los mantiene por debajo de la media de la campaña.
La ofensiva, por su parte, a pesar de que ha cedido en las últimas presentaciones, ha sido óptima y repartida. Fíjese en un detalle: pese a conectar solo tres cuadrangulares, de manera general se batea para 273 (quintos) y se supera la media de la campaña (257), lo cual confirma que no siempre el promedio es todo lo ilustrativo a la hora de medir la eficiencia.
Ello se traduce en que con los 113 hits han logrado producir 48 carreras: un promedio de cuatro por partido, suficiente para apoyar la efectividad del pitcheo. No obstante, pudiera ser mayor si tenemos en cuenta que de los 174 hombres en posición anotadora han dejado de impulsar a 138.
También lo ratifica Eriel Sánchez, que con 285 de promedio, lidera a los impulsadores de la contienda (13), seguido de su coequipero Frederich Cepeda (12).
Destacan por su promedio Orlando Acebey (318) y Yunieski Gourriel (289).
Mas, habrá que mantenerse atentos al descenso ofensivo, que debe seguir superándose en medio de una lid que aún parece tener patas arriba la tabla de posiciones, sobre todo por tener a Santiago de Cuba en la cola del sótano y varios “rebeldes” como Camagüey, Isla de la Juventud y Mayabeque dispuestos a dar batalla.
Cuando concluyan este fin de semana el enfrentamiento a Industriales, para los Gallos -y para todos los conjuntos- habrá cerrado el primer tercio de la campaña. Desde el martes la tropa de Yovani Aragón estará abriendo el segundo ante Las Tunas en calidad de equipo visitador.
En una galopante carrera hacia las 100 victorias (le faltan solo cuatro), el trinitario lanzó finísimo frente a los yumurinos para ganar su tercer partido y campear entre los principales líderes de la serie. Permitió solo cinco hits durante las nueve entradas que representaron su primera lechada de la justa (colíder).
Lo más llamativo en su trabajo es el control. Solo dos boletos en 27 entradas y 26 ponches (líder hasta el viernes), sostén de un Promedio de Carreras Limpias de lujo: 0.98 (noveno) y un bateo contrario de apenas 202.
Pero el influjo de Ismel ha logrado contagiar al staff espirituano de tal manera que en los primeros 12 partidos los Gallos lideraban el pitcheo de la justa con un excelente promedio colectivo de 2.02.
El cuerpo que entrenan Juan de Dios Peña y Roberto Ramos encabeza el número de lechadas del torneo con cuatro, es el primero en ponches propinados con 70 y concede la menor cantidad de boletos, apenas 15. Imaginen que los lanzadores de Mayabeque, que le siguen en ese acápite, han regalado el doble. Los contrarios le batean para 234 (cuarto).
La mejoría sobrevino tras enfrentar a Ciego de Ávila en la única subserie que han perdido hasta la fecha. En los dos últimos cotejos particulares ante Artemisa y Matanzas los lanzadores yayaberos han permitido solo seis carreras, cinco de ellas limpias en 54 entradas, con tres lechadas incluidas.
Además de Ismel, descuellan entre las individualidades Noelvis Hernández, líder del torneo en PCL con 0.00, al no permitir carreras en 14 entradas de actuación.
Justo es reconocer el trabajo de Yamichel Pérez, quien después de una primera salida fatídica ha tenido soberbias actuaciones con par de triunfos. También Omar Guardarrama, con dos salvamentos.
Resulta más meritorio tal desempeño si tenemos en cuenta que esta ha sido una temporada con reinado del pitcheo en sentido general, con 3.02 de promedio entre los 16 conjuntos.
Así, los lanzadores aupan el accionar de los Gallos, que han logrado un paso muy estable en estos inicios al punto de mantenerse en el pelotón de avanzada de la contienda, con balance favorable de triunfos y reveses, para figurar entre los puestos del dos al cuatro antes de iniciar este viernes el enfrentamiento con los Azules.
Junto al ascenso del pitcheo tranquiliza un poco la gradual mejoría de la defensa que, aun cuando está lejos de sus potencialidades, ha logrado por primera vez rebasar la barrera de los 960, aunque todavía los mantiene por debajo de la media de la campaña.
La ofensiva, por su parte, a pesar de que ha cedido en las últimas presentaciones, ha sido óptima y repartida. Fíjese en un detalle: pese a conectar solo tres cuadrangulares, de manera general se batea para 273 (quintos) y se supera la media de la campaña (257), lo cual confirma que no siempre el promedio es todo lo ilustrativo a la hora de medir la eficiencia.
Ello se traduce en que con los 113 hits han logrado producir 48 carreras: un promedio de cuatro por partido, suficiente para apoyar la efectividad del pitcheo. No obstante, pudiera ser mayor si tenemos en cuenta que de los 174 hombres en posición anotadora han dejado de impulsar a 138.
También lo ratifica Eriel Sánchez, que con 285 de promedio, lidera a los impulsadores de la contienda (13), seguido de su coequipero Frederich Cepeda (12).
Destacan por su promedio Orlando Acebey (318) y Yunieski Gourriel (289).
Mas, habrá que mantenerse atentos al descenso ofensivo, que debe seguir superándose en medio de una lid que aún parece tener patas arriba la tabla de posiciones, sobre todo por tener a Santiago de Cuba en la cola del sótano y varios “rebeldes” como Camagüey, Isla de la Juventud y Mayabeque dispuestos a dar batalla.
Cuando concluyan este fin de semana el enfrentamiento a Industriales, para los Gallos -y para todos los conjuntos- habrá cerrado el primer tercio de la campaña. Desde el martes la tropa de Yovani Aragón estará abriendo el segundo ante Las Tunas en calidad de equipo visitador.
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