Antes de pactar en el invierno pasado con los Medias Blancas de Chicago, el cubano José Abreu era considerado por muchos el mejor bateador del mundo fuera de las Grandes Ligas.
Una vez que firmó por $68 millones de dólares con los Media Blancas, demostró desde el primer día que su calidad estaba a la altura del mejor béisbol del mundo y hoy es el bateador más caliente del momento.
En la semana del domingo 27 de julio al sábado 2 de agosto, Abreu disparó 12 hits en 20 turnos, para un astronómico average de .600, con cuatro anotadas y seis impulsadas.
El casi seguro ganador del premio de Novato del Año en la Liga Americana sumó entre sus imparables cuatro dobletes y un cuadrangular, para un slugging de .950.
Asimismo, recibió siete pasaportes y estableció una seguidilla de diez comparecencias seguidas embasándose, ya por cohetes, ya por cuatro pelotas malas.
Abreu, líder absoluto en las Grandes Ligas en jonrones (31) y remolcadas (84), había expresado incomodidad a principios de la temporada por jugar en el frío de Chicago.
Pero llegó el verano y a su producción de vuelacercas y empujadas ha sumado ahora el bateo de promedio y ya anda en .308, décimo del joven circuito.
Su compañero de equipo y compatriota Alexei Ramírez también brilló en los últimos siete días, con ocho hits en 27 turnos (.296), seis anotadas y nueve impulsadas.
Ramírez tuvo como extrabases tres biangulares y un bambinazo, para slugging de .519.
Una vez que firmó por $68 millones de dólares con los Media Blancas, demostró desde el primer día que su calidad estaba a la altura del mejor béisbol del mundo y hoy es el bateador más caliente del momento.
En la semana del domingo 27 de julio al sábado 2 de agosto, Abreu disparó 12 hits en 20 turnos, para un astronómico average de .600, con cuatro anotadas y seis impulsadas.
El casi seguro ganador del premio de Novato del Año en la Liga Americana sumó entre sus imparables cuatro dobletes y un cuadrangular, para un slugging de .950.
Asimismo, recibió siete pasaportes y estableció una seguidilla de diez comparecencias seguidas embasándose, ya por cohetes, ya por cuatro pelotas malas.
Abreu, líder absoluto en las Grandes Ligas en jonrones (31) y remolcadas (84), había expresado incomodidad a principios de la temporada por jugar en el frío de Chicago.
Pero llegó el verano y a su producción de vuelacercas y empujadas ha sumado ahora el bateo de promedio y ya anda en .308, décimo del joven circuito.
Su compañero de equipo y compatriota Alexei Ramírez también brilló en los últimos siete días, con ocho hits en 27 turnos (.296), seis anotadas y nueve impulsadas.
Ramírez tuvo como extrabases tres biangulares y un bambinazo, para slugging de .519.
¡Sé el primero en comentar!