Última semana del calendario regular de la 58 Serie Nacional de Béisbol que comenzó en el pasado agosto, al cual ya vemos lejano. Epílogo enigmático, pues aún no conocemos a el cuarteto que disputará el más ansiado título del deporte cubano, noticia que pudiera trascender en el último día del programa, o tal vez sea necesaria una fecha más en pos de la definición.
Y mientras se descifra el complejo jeroglífico, los Leñadores de Las Tunas festejan desde ya la víspera del 2019, con la certeza de haber cumplido su mejor año en este 2018. Hoy son los únicos que duermen tranquilos, sin emular con Pitágoras o echarle mano a la calculadora.
Aunque todavía tienen que contar, las ecuaciones de los Azucareros de Villa Clara, hoy en segundo escaño, son más simples que las de sus perseguidores: si ganan tres de los seis son inalcanzables por el hoy quinto escaño, Industriales, que lo único que puede es igualarles con 32-28; como el cotejo entre ellos está 6-6 habría que ir a las carreras entre ambos y los del centro permitieron menos: 58 por 67.
Si espirituanos y avileños, en estos momentos ocupantes del tercer y cuarto puestos, es decir en zona semifinalista, ganan seis, tampoco los de la capital les pueden dar alcance. Pero eso es imposible, porque a partir de hoy se miden en tierras de la piña y uno tendrá que perder dos de tres, por lo cual no cerrarían con el sexteto de triunfos.
Esa subserie es clave no solo para ellos, sino también para Industriales, que juega desde esta noche en el tenebroso bosque de los Leñadores, que aun clasificados siempre tienen las hachas afiladas. A los Azules lo único que les vale es ganar, porque en esta porfía por la cuarta plaza es el más comprometido, tanto que si triunfan en los siete compromisos terminarían con 32-28, balance al que Gallos y Tigres llegan con cinco éxitos.
Ya sabemos que Industriales no puede empatar con Ciego de Ávila, vencedora en los enfrentamientos particulares por 8-4, y si iguala con Sancti Spíritus, es decir, venciendo en el suspendido entre ambos, quedarían con 6-6, obligando a la decisión por carreras permitidas y sin contar el juego que tienen pendiente por la lluvia del sábado, los Gallos van con ventaja: han tolerado 57 por 66 su adversario.
No hay nada decidido entre esos tres aspirantes, todos tienen posibilidades de avanzar y también los tres están amenazados con no llegar a enero en competencia.
Cierto es que en solo seis días, más la jornada embargada, en pelota pueden suceder muchas cosas. Pero como estamos en diciembre, que en La Habana es tiempo de cine, la verdad es que Industriales está frente a un remake de la serie cinematográfica Misión imposible. Y es que la saga, ya con seis entregas, amenaza con una séptima y siete son las misiones que le van quedando a los dirigidos por Rey Vicente Anglada. Dicen que la próxima del culebrón fílmico podría llevar al agente Ethan Hunt (Tom Cruise) al espacio. Hasta allí no llegarán los Azules, sin embargo, su reto terrenal es tan grande como subirse a una nave espacial.
Y mientras se descifra el complejo jeroglífico, los Leñadores de Las Tunas festejan desde ya la víspera del 2019, con la certeza de haber cumplido su mejor año en este 2018. Hoy son los únicos que duermen tranquilos, sin emular con Pitágoras o echarle mano a la calculadora.
Aunque todavía tienen que contar, las ecuaciones de los Azucareros de Villa Clara, hoy en segundo escaño, son más simples que las de sus perseguidores: si ganan tres de los seis son inalcanzables por el hoy quinto escaño, Industriales, que lo único que puede es igualarles con 32-28; como el cotejo entre ellos está 6-6 habría que ir a las carreras entre ambos y los del centro permitieron menos: 58 por 67.
Si espirituanos y avileños, en estos momentos ocupantes del tercer y cuarto puestos, es decir en zona semifinalista, ganan seis, tampoco los de la capital les pueden dar alcance. Pero eso es imposible, porque a partir de hoy se miden en tierras de la piña y uno tendrá que perder dos de tres, por lo cual no cerrarían con el sexteto de triunfos.
Esa subserie es clave no solo para ellos, sino también para Industriales, que juega desde esta noche en el tenebroso bosque de los Leñadores, que aun clasificados siempre tienen las hachas afiladas. A los Azules lo único que les vale es ganar, porque en esta porfía por la cuarta plaza es el más comprometido, tanto que si triunfan en los siete compromisos terminarían con 32-28, balance al que Gallos y Tigres llegan con cinco éxitos.
Ya sabemos que Industriales no puede empatar con Ciego de Ávila, vencedora en los enfrentamientos particulares por 8-4, y si iguala con Sancti Spíritus, es decir, venciendo en el suspendido entre ambos, quedarían con 6-6, obligando a la decisión por carreras permitidas y sin contar el juego que tienen pendiente por la lluvia del sábado, los Gallos van con ventaja: han tolerado 57 por 66 su adversario.
No hay nada decidido entre esos tres aspirantes, todos tienen posibilidades de avanzar y también los tres están amenazados con no llegar a enero en competencia.
Cierto es que en solo seis días, más la jornada embargada, en pelota pueden suceder muchas cosas. Pero como estamos en diciembre, que en La Habana es tiempo de cine, la verdad es que Industriales está frente a un remake de la serie cinematográfica Misión imposible. Y es que la saga, ya con seis entregas, amenaza con una séptima y siete son las misiones que le van quedando a los dirigidos por Rey Vicente Anglada. Dicen que la próxima del culebrón fílmico podría llevar al agente Ethan Hunt (Tom Cruise) al espacio. Hasta allí no llegarán los Azules, sin embargo, su reto terrenal es tan grande como subirse a una nave espacial.