Una información de última hora (es muy válida la afirmación), proveniente de la página oficial del Tercer Clásico Mundial de Béisbol ha provocado, por supuesto, que no se pueda evadir la indiscutible interrogante: ¿será cierto que la MLB se equivocó o prefiere ahora una distribución más adecuada de los grupos?.

Como se conoce, los organizadores de la magna competencia habían dado a la publicidad recientemente el completamiento oficial de cada uno de los cuatro grupos de la primera fase, ubicándose a España en el “A”, a Taipei de China en el “B”, a Brasil en el “C” y a Canadá en el “D”.

Desde hacía algún tiempo, incluso en la propia web del Clásico, se comentaba que el ganador del clasificatorio celebrado en Panamá sería el que acompañaría a Venezuela, Puerto Rico y República Dominicana en el pool de San Juan, mientras que el que triunfara en el de Alemania iría a engrosar el de Phoenix, Arizona.

Por otro lado, era muy razonable que aquél que se impusiera en el grupo de clasificación de Taipei (los locales eran ampliamente favoritos) estaría en su propio país con las selecciones de Corea del Sur, Holanda y Australia. Después de todo esto, solo quedaba por asegurarse que fuera España el cuarto equipo de Fukuoka.

Sin embargo, parece ahora que las cosas no serán así, pues el World Baseball Classic acaba de informar que España estará en San Juan, mientras que Brasil se irá para Japón..., a menos que tengamos una no muy ligera equivocación de la redacción de esa web.

En opinión de este comentarista, no creo que sea un error de información. Es muy alto el nivel de profesionalidad de los dirigentes del béisbol estadounidense, que conducen con éxito inigualable el mayor espectáculo beisbolero del planeta, para aceptar plácidamente que colocaron la A donde debía ir la E.

Estoy convencido que prefirieron una distribución que esté exenta de cualquier lamentable inconveniente, que pueda afectar el normal desenvolvimiento de una muy respetable competencia. Desde mi posición, por lo menos, la creo adecuada, y en el justo momento.