A finales de noviembre de 2016 Cuba podría tener decenas de peloteros en Ligas profesionales fuera de Estados Unidos, avizoró hoy el comisionado nacional de béisbol, Heriberto Suárez, ante periodistas especializados.

Hemos comenzado el proceso de negociación con varios de ellos, aunque aún no tenemos nada acordado y realizaremos todos los procesos sin apuros para lograr lo mejor para cada uno de nuestros peloteros, agregó.

Suárez reveló que la entidad bajo su mando presentó una propuesta a la dirección del béisbol en Colombia, con algunos de los jugadores de más calidad y experiencia en Cuba, pero los cafeteros desestimaron la posibilidad de contratar a mayores de 27 años.

La dirección de la pelota cubana, como llaman aquí a este deporte, apuntó en su agenda intereses del club venezolano Bravos de Margarita, más los mexicanos Cañeros de Monchis y Tomateros de Culiacán.

También tienen propósitos idénticos "en República Dominicana, Japón y Nicaragua, naciones con las que mantenemos una comunicación fluida".

La selección cubana que se prepara para el torneo de los XVII Juegos Panamericanos Toronto-2015 de julio próximo, topará antes, del 21 al 25 de junio aquí, con una selección nicaragüense aún por definir y Suárez calificó la ocasión de idónea para iniciar negociaciones para insertarse en el béisbol de ese país.

Conversaremos con Nemesio Porras (presidente de la Federación Nicaragüense de Béisbol) durante el tope y esperamos que logremos un entendimiento feliz para las dos partes, declaró.

Los jardineros cubanos Alfredo Despaigne y Frederich Cepeda, más el lanzador Héctor Mendoza juegan en la Liga profesional de Japón, en tanto con los Capitales de Québec, en Canadá, se desempeñan los jugadores de posición Yunieski Gurriel, Alexei Bell y Yordan Manduley, con el serpentinero Ismel Jiménez.

A partir de noviembre de 2016 podrían ser más, en dependencia de cuantos contratos se firmen. Nuestra dirección está abierta a todas las posibilidades, siempre que se respete la integridad de nuestros jugadores, nuestros derechos y los principios que defiende el béisbol cubano, dijo Suárez.