A Frederich Cepeda se le reconoce como el mejor bateador de Cuba desde hace varios años. Su calidad, probada en casa y allende los mares, lleva incrustado el sello de su padre, un profesor con más de cuatro décadas de experiencia en el béisbol de base.

Las dificultades de los bateadores cubanos, la cercanía del III Clásico Mundial y la historia sobre cómo aprendió a batear su hijo, motivaron el diálogo con Pablo Francisco Cepeda Estrada. Batear es la acción más difícil del béisbol.

¿Cómo la enseña?

Aplico los principios del entrenamiento deportivo y la metodología de la enseñanza. Comienzo por el agarre del bate, la postura del cuerpo y la mecánica, que incluye los movimientos preparatorios y el golpeo a la pelota. Explico cada acción, las demuestro y luego realizo el swing completo. Trabajo, por separado, las técnicas de la parte superior y las de piernas, para después engranarlas.

¿Cuáles son las mayores dificultades que afrontan los niños?

Para muchos están en sacar y meter el pie o en bajar el codo. Sin embargo, lo principal es que no dejan “la vista y los hombros por dentro”, es decir en la zona de strike. Cuando eso falla, no pueden percibir la rotación de la bola ni su dirección (pegada o afuera), y se deforma la mecánica, pues se echan para atrás apoyándose en los talones y realizan el swing atrasado y como barriendo.

¿Qué hace para resolver esos problemas?

Oriento al alumno realizar swings en la posición de rodillas, pero lo principal es el batintín, ya que favorece el trabajo de la cadera, la ruptura de la inercia y el dominio del paso. El empleo de la pelota boleada es un error, genera muchas deficiencias técnicas.

La elección de los lanzamientos y el análisis del pitcheo rival son otras deudas de los bateadores cubanos…

La concentración es vital para elegir la bola buena. Sin embargo, las prácticas de bateo casi siempre se realizan con apuro y requieren la mayor atención de los niños, para que atiendan los señalamientos que el profesor realiza a todo el grupo y desarrollen la observación. Si analizas el actuar de los grandes peloteros en el banco, notaras que no “andan a lo loco”, sino tranquilos, concentrados, estudiando al rival. Eso hay que formarlo y exigirlo desde pequeños.

La variabilidad al cantar la zona de strike también afecta…

Muchos de los problemas del bateo cubano provienen de ahí. La zona de strike es una sola y los peloteritos deben aprenderla. Ahora se habla de las líneas vertical y horizontal, y de las 17 pulgadas de ancho, pero eso siempre existió. Juego pelota desde los nueve años y sabía que la pelota buena venía entre las rodillas y las axilas.

En el béisbol norteamericano y japonés predomina un tipo de swing corto y rápido, que sirve hasta para dar jonrones…

Es el adecuado, viene a ser como un jab en el boxeo. Muchos de nuestros peloteros cargan el swing y lo ejecutan tipo “avión”, por eso reaccionan tarde a la recta dura. Además, lo hacen con tanta fuerza que pierden visibilidad y coordinación, lo cual es fatal. ¿Cómo enseñó a batear a Frederich Cepeda? Con mucha paciencia, lo llevaba al área y me entretenía jugando con él. Aquello le fue gustando y empecé a prepararlo con el batintín y el pitcheo corto por encima del brazo. Le lanzaba adentro y afuera para que conectara hacia una banda y la otra. Le dibujé en su mente la zona de strike y le exigía respetarla en todo momento.

¿Y la cualidad de ser bateador ambidextro?

También la adquirió de niño, superando muchas dificultades a la derecha. Cuando se ponchaba le daba ánimo para seguir adelante. Me gusta gustó que mis alumnos bateen a las dos manos, incluso he logrado que toda una alineación lo haga satisfactoriamente.

¿Por qué tenemos tan pocos peloteros con esa habilidad?

Algunos entrenadores plantean, erróneamente, que los ambidextros descuidan su mejor posición, al no concentrarse en ella. Pero la verdad es que prima el campeonismo y cierta vagancia, pues estos peloteros exigen una labor especializada y doble. Frederich era mi hijo y no le quitaron la idea, pero a otros sí y perdieron la condición.

¿Cuál es la principal virtud de su hijo en el home?

La paciencia. Cuando comenzó en la serie nacional decían que no era “agresivo”, como si poner la cara huraña y discutir con el árbitro sirviera para conectar mejor o más largo.

¿Qué piensa sobre Cuba en el III Clásico Mundial?

Hay que lograr un engranaje bueno, dirigir concienzudamente, sin fantasear, aplicando en el juego lo entrenado. En la gira por Asia no vi que se hicieran mucho el hit and run, el toque de sorpresa o el robo de base con amago y bateo. Seguimos cuadrándonos sobre el home para tocar, una jugada arcaica. Tampoco se roba cuando el bateador está en la cuenta completa o por decisión propia, lo cual resta confianza y posibilidades ofensivas.