El béisbol puede ayudar en las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, expresó Ben Rhodes, asesor adjunto de seguridad nacional para comunicaciones estratégicas del gobierno del presidente Barack Obama.
Citado por el diario The New York Times, el alto funcionario manifestó que existe mucho apoyo para que ese deporte sea parte de la apertura entre Estados Unidos y Cuba, aunque la persistencia del bloqueo económico, financiero y comercial es un serio obstáculo que debe eliminar el Congreso estadounidense.
El béisbol es una institución venerada en ambos países, y en la medida en que se profundizan los lazos entre los dos pueblos y la reconstrucción de puentes, las Grandes Ligas (MLB, por sus siglas en inglés) tiene un papel, puntualizó.
Según el Times, el gobierno de Obama y la MLB trabajan para crear un sistema completamente nuevo que facilite los intercambios y el contrato de jugadores cubanos que no estarían obligados a abandonar su país, destaca Prensa Latina.
En ese sentido, el periódico informó de contactos en Nueva York entre un abogado de las Grandes Ligas, Dan Halem, y funcionarios cubanos para expresar el interés en reformar la disposición existente al respecto.
Agregó que varios directivos norteamericanos también viajaron a Cuba en octubre último para examinar los campos y otras instalaciones y determinar si peloteros de las Grandes Ligas pueden jugar en Cuba en la próxima primavera.
El diario neoyorquino puntualizó que el béisbol y el gobierno de Obama tendrán que superar un laberinto de normas y procedimientos, lo cual se allanaría si el Congreso elimina las leyes del bloqueo.
En las últimas semanas, precisó el Times, la MLB, apoyada por la Casa Blanca, solicitó una licencia para hacer tratos con Cuba a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro.
Esa dependencia está encargada de aplicar las sanciones del bloqueo impuesto por Estados Unidos contra Cuba desde hace más de medio siglo.
Si el gobierno aprueba la solicitud de la MLB, la oficina del comisionado deberá negociar los términos para la firma de los jugadores con la asociación de beisbolistas y el gobierno cubano, aclaró la publicación.
Citado por el diario The New York Times, el alto funcionario manifestó que existe mucho apoyo para que ese deporte sea parte de la apertura entre Estados Unidos y Cuba, aunque la persistencia del bloqueo económico, financiero y comercial es un serio obstáculo que debe eliminar el Congreso estadounidense.
El béisbol es una institución venerada en ambos países, y en la medida en que se profundizan los lazos entre los dos pueblos y la reconstrucción de puentes, las Grandes Ligas (MLB, por sus siglas en inglés) tiene un papel, puntualizó.
Según el Times, el gobierno de Obama y la MLB trabajan para crear un sistema completamente nuevo que facilite los intercambios y el contrato de jugadores cubanos que no estarían obligados a abandonar su país, destaca Prensa Latina.
En ese sentido, el periódico informó de contactos en Nueva York entre un abogado de las Grandes Ligas, Dan Halem, y funcionarios cubanos para expresar el interés en reformar la disposición existente al respecto.
Agregó que varios directivos norteamericanos también viajaron a Cuba en octubre último para examinar los campos y otras instalaciones y determinar si peloteros de las Grandes Ligas pueden jugar en Cuba en la próxima primavera.
El diario neoyorquino puntualizó que el béisbol y el gobierno de Obama tendrán que superar un laberinto de normas y procedimientos, lo cual se allanaría si el Congreso elimina las leyes del bloqueo.
En las últimas semanas, precisó el Times, la MLB, apoyada por la Casa Blanca, solicitó una licencia para hacer tratos con Cuba a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro.
Esa dependencia está encargada de aplicar las sanciones del bloqueo impuesto por Estados Unidos contra Cuba desde hace más de medio siglo.
Si el gobierno aprueba la solicitud de la MLB, la oficina del comisionado deberá negociar los términos para la firma de los jugadores con la asociación de beisbolistas y el gobierno cubano, aclaró la publicación.