BRILLANTE CEREMONIA DE RETIRO A PEDRO LUIS LAZO

Valió la pena el hecho de que los aficionados pinareños colmaran el estadio Capitán San Luis, de la ciudad capital, desde las diez de la mañana de este domingo, para disfrutar primero, de la despedida oficial del deporte activo del pitcher más ganador del béisbol cubano, su astro Pedro Luis Lazo y para celebrar después, con la aplastante barrida de su querido equipo vueltabajero ante Industriales en esta Serie Nacional número 50.

Vestido con un traje gris y una corbata negra, Lazo, de 37 años, llegó montado en un coche tirado por caballos al estadio pinareño acompañado de su esposa y sus dos hijas y escoltado por dos conocidos jinetes: su ex compañero de equipo Donald Duarte y el ya retirado de la pelota nacional, Osmani Urrutia, de quien Lazo es incondicional amigo.

Dentro de las hazañas más significativas logradas por el “rascacielos de Cuba”, está el hecho de haber sido el pitcher número 41 que logró 100 victorias con 25 años.

Fue Lazo además, el octavo pinareño en arribar a 100 triunfos y el segundo en lograr 200, después de Rogelio García. Fue el único además, que en 15 temporadas arribó a esa magistral cifra de éxitos.

Con su victoria 235 destronó al zurdo matancero Jorge Luis Valdés en contiendas nacionales de béisbol.

Aproximadamente media hora después, vendría el regalo final, de los tantos que recibió Lazo en la ceremonia de retiro; el triunfo de Pinar del Río a Industriales, con el cual se lograba la barrida completa a los actuales campeones.

Desde inicios de partido, los vueltabajeros salieron decididos a cumplimentar lo que para muchos, era imposible. Con marcador de siete carreras por cuatro, y ofensiva de doce imparables, Yosvani Torres se adjudicó la cuarta sonrisa del campeonato, reafirmando que para derrotarlo, hay que batearle con creces.

Torres ha regalado solamente tres bases por bolas en 35 entradas y un tercio de actuación. Lanzador sin velocidad aterradora en sus envíos, domina excelentemente la zona de strike, sin permitirle libertades al descontrol.

Con el juego a favor de los medias verdes de Alfonso, seis carreras por una, los caprichos de este deporte no permitieron que Torres transitara con comodidad en el séptimo acto.

En dos ocasiones estuvo latiente la posibilidad del doble play, malogradas primero por una pelota levantada a última hora ante David Castillo y después por el propio Yosvani, quien desvió con su guante la esférica en rolata de Stayler Hernández a la izquierda del pitcher.

Tres anotaciones fueron marcadas pues, en ese episodio por los azules de Germán Mesa, quienes se metieron completamente en el desafío, acortando la desventaja a solo dos carreras.

Alain Castañeda, relevó a Torres, pero finalmente cedió su lugar en la lomita al siniestro Irandi Castro, salvador del partido trabajando solo durante una entrada y un tercio.

Una jugada polémica se produjo en el final del octavo, con Pinar a la ofensiva, cuando, con corredor en segunda, el alto mando de Industriales decidió transferir a Donal Duarte, para lanzarle a Yosvani Peraza, quien no anda del todo bien ofensivamente hablando.

El cuarto madero pinareño no hizo quedar mal a su mentor, y con indiscutible al jardín izquierdo, fletó para el home play, la séptima de los locales, sacando fuera de juego a los citadinos, quienes se fueron barridos por la joven tropa pinareña.

Fue sin dudas, el regalo que faltaba a Pedro Luis Lazo, para que este domingo fuera uno de los días más felices de toda su vida, a pesar de lo nostálgico que resulta acogerse al retiro.

Los pinareños despiden el año 2010, asentados cómodamente en la tercera posición del circuito occidental con balance de 15 victorias y nueve descalabros, antecedidos por Cienfuegos y Habana.

Las actividades serán reanudadas el martes 4 de Enero de 2011, cuando “el nuevo tsunami verde”, visite la capital cubana para enfrentar a los débiles Metropolitanos, en compromiso de vuelta, en el estadio Santiago “Changa” Mederos de la Ciudad Deportiva.