La publicación USA Today dio a conocer hoy un retrato de quien está llamado a ser la próxima estrella cubana de las Grandes Ligas del Béisbol, se trata del jovencito de 16 años Lázaro "Lazarito" Armenteros.

Lazarito es un habanero que se fue de la isla vía Rusia, pidió entrar a Haití, le fue negada la visa y finalmente tuvo que volar a República Dominicana, donde ha establecido su base de entrenamiento y espera sacar tarjeta de agente libre para ser contratado en la Gran Carpa.

USA Today asegura que habló con dos fuentes que prefieren el anonimato sobre las condiciones y los inminentes avatares del prospecto.

"Este chico, que posee una rara combinación de velocidad deslumbrante, potencia y fuerza en los brazos tiene un gran futuro como jardinero", indicó una de las fuentes.

Otro de los entrevistados por la publicación aseveró que aunque no ha firmado en los predios de la pelota rentada, ya tiene sobre sí los ojos de un equipo para la Liga de Japón que ya le ha ofrecido un contrato por $15 millones.

Un veterano cazatalentos de la Liga Americana valoró a Lazarito como "un talento en bruto" que habrá que pulir, pero que ya se le ven puntos en común con los inmortales como Willie Mays y Bo Jackson.

El joven pelotero está establecido "en una remota ciudad de playa", en Dominicana.

La oportunidad de lujo se ha puesto a los pies del pelotero cubano, sería el próximo 8 de enero cuando el complejo de los Padres de San Diego se abra para que unos 30 equipos de las Mayores lo vean actuar en una exhibición en San Cristóbal, al oeste de Santo Domingo.

En entrevista con USA Today Sport, Armenteros definió así esta coyuntura actual: "Tengo la oportunidad de cambiar mi vida y la vida de mi familia".

La última vez que se le vio en un partido amateur organizado fue en el verano de 2014, en medio de la Copa Mundial (categoría 15U) en Sinaloa, México. Allí Armenteros conectó para .462, con tres dobles, cinco triples y ocho carreras impulsadas en nueve juegos.

El joven prospecto recuerda con dureza la vida que llevaba en la isla. Su padre fue una estrella nacional del básquetbol, Lázaro Armenteros. Por sus ideas contra el Gobierno hizo que la Seguridad sospechara de las intenciones del hijo de utilizar el béisbol como vía para escapar de Cuba.

"Pero me acuerdo de volver a casa a decirle a mi madre que no podía jugar más tiempo debido a los comentarios contra mi padre. Ella me tomó de la mano y dijo: 'Lazarito vamos a encontrar otra vía'", recuerda Armenteros.

Al parecer, ha llegado ese momento que avizoró la madre.