La idea de que por las venas de la mayoría de los cubanos corre béisbol nunca será una expresión en desuso. Pero esa frase pienso que sea más aplicable a los aficionados, porque para los peloteros su deporte más que sangre por las venas, es el bombeo incesante y necesario de su corazón. Rarísimos son los casos de beisbolistas, que una vez retirados del deporte activo, se olvidan de algo que por mucho tiempo les quitó el sueño. Dos amigos de muchos años, ambos cubanos y habaneros por demás, están inmersos en un naciente y revolucionario proyecto, que augura dividendos muy satisfactorios para el béisbol de Europa –y tal vez se expanda más- y sus aspiraciones de engrosar la lista en la MLB.

El otrora lanzador de Industriales y la selección nacional, Yadel Martí Carrillo, y Kleyvert Rodríguez Cueto, experimentado jugador y entrenador, lideran el Proyecto 90. «Esta iniciativa fue creada por Yadel, jefe de operaciones de Phoenix Sports Agency, y yo, sustentada por el jefe de la agencia, el venezolano Reinaldo Larez. Se denomina así, porque 90 no es solo el número de Yadel, sino también porque esa es la velocidad a la que queremos que lleguen los lanzadores, además, no es un secreto que esa es la distancia aproximada en millas entre Cuba y Estados Unidos”, explica Rodríguez Cueto, quien reside en la ciudad italiana de Nuoro y trabaja y juega para el club Cagliari.

“Es un proyecto dedicado a acercar Europa al béisbol profesional estadounidense, partiendo con el área de los lanzadores y receptores, quienes tendrán un período intensivo de entrenamientos en Phoenix por dos meses y en la primera quincena de diciembre se presentarán para mostar su talento ante los scouts de las franquicias de las Grandes Ligas”, revela quien fuera varios años pitcher destacado del béisbol habanero a finales de la década del 90 e inicios del nuevo milenio y miembro de la Agencia- que radica en Arizona-, como agente de jugadores para la División Europea.

El primer paso se dio felizmente. Cuatro jóvenes italianos llegaron hace poco a Estados Unidos y se han involucrado en la rutina de entrenamientos. ¿Cuál fue el criterio de elección aplicado a este cuarteto?

“Como te decía, yo trabajo y juego en Italia, lo que me permite evaluar a los muchachos con mayor facilidad. Todos son jugadorers de la serie A italiana, todos han sido en alguna ocasión jugadores de la selección nacional en las categorías juveniles y tres han sido parte de la Academia Nacional. Los lanzadores son Nicola Zidda y Matthias Zotti y los receptores Andrea di Lacobis y Leonardo Ceppari. Nicola juega en mi equipo Cagliari Baseball, Matthias juega con el Padule, Leonardo con el Viterbo y Andrea con el Latina”.

Como representante de Europa de Phoenix Sports Agency, ¿en qué estado se encuentra la exploración de talentos en otras naciones de ese continente?

“Como agencia en sí no hay nadie, solo nosotros. La diferencia entre un agente y un scout es que el scout propone un jugador a su franquicia y nosotros representamos legalmente un jugador ante una posible firme, no con un solo equipo, sino con todas las franquicias de la MLB. Pienso para el año próximo comenzar a moverme por otros países, siempre siguiendo las órdenes de la agencia, sobre todo aspiro a participar en los eventos europeos en los que juega la élite de las categorias juveniles”.

aaaabb¿Eres consciente de que en varios países europeos hay adolesecentes y jóvenes cubanos que bien pudieran encajar con tu dinámica de trabajo?

“Sí, claro está. Yo dentro de Cuba no trabajo, pero todo aquel que esté fuera, concretamente en la división europea, allí estaré yo para observar sus posibilidades reales”.

¿Por qué te concentras fundamentalmente en el mercado juvenil, cuando existen jugadores con un poco más de edad que pueden entrar en los intereses del proyecto?

“Estamos tratando de trabajar con el sector juvenil, con el talento que se puede terminar de formar en los Estados Unidos. Estamos trabajando entre los 16 y los 23 años de edad fundamentalmente”.

¿Hasta qué punto consideras que Proyecto 90 funcione para estrechar los vínculos entre el béisbol estadounidense y el europeo?

“Nosotros como agencia dimos el primer paso, abrir el puente a Europa con el objetivo de que llegue a las Grandes Ligas. Ahora toca a los jugadores demostrar sin son capaces de llegar. Esta oportunidad es única, nunca se había dado un chance de este tipo. La mayoría de la gente que ha ido por algún proyecto ha pagado sus buenos miles de euros para tratar de hacer un showcase”.

Una vez los jóvenes peloteros llegaron a Estados Unidos, explícame su hoja de ruta con más detalles.

“Llegaron a Phoenix y ahí estaba Yadel y el presidente de la Agencia esperándolos en el aeropuerto. Ahora se encuentran en el hospedaje donde estarán por dos meses y medio y el campo de entrenamiento es cerca de la casa. Lo de ellos es entrenar, entrenar y entrenar, para tratar de cumplir su sueño. Los receptores empezaron anteayer el trabajo con Joel Galarraga (Pocholo), catcher de mucha experiencia con Industriales y otros conjuntos fuera de Cuba”.

¿Te atreves a dar un criterio de la opinión que podría tener la MLB sobre este incipiente, pero ambicioso proyecto?

“La MLB quiere lo mejor, mi tarea es buscar y representar lo mejor que hay de esta parte del mundo, en cuanto a jóvenes peloteros. La MLB no tiene fronteras, tocará a esta asociación evaluar si Europa es apta o no para este nivel y si también está lista para ser profesional”.

“Europa a diferencia de Japón, no pone restricciones. En Japón deben jugar si mal no recuerdo ocho temporadas y después es que pueden jugar en Estados Unidos, mientras que aquí no hay esa restricción. Los jugadores desde que son adolescentes ya pueden ser parte de las franquicias y así vienen ya formados por ese tipo de béisbol, igual como puede ser con cualquier otro jugador de Latinoamérica que no sea cubano”.