Tomado de CronoDeportes, por Rafael Rofes.

Ya se batalla en la segunda fase de la actual 54 Serie Nacional de Béisbol en la Isla, de donde saldrán los cuatro elencos que discutirán el cetro del 2015 en tan atractivo torneo. ¡Qué bueno! Pero a mí se me antoja hoy rememorar un gran acontecimiento de esa misma pelota tiempos atrás… ¿Qué aficionado cubano no recuerda aquel play off de cuartos de finales tan encarnecido que escenificaron los dos equipos de la capital de Cuba, Industriales y Metropolitanos del año 2000 en las Series Nacionales?


Aquello fue tremendo, lo viví en carne propia… Y no daré en esta oportunidad mi criterio al respecto – lo hice en su momento como reflejo adicionalmente en este trabajo- pues me parece mucho mejor que uno de los principales implicados en tal acontecimiento, en este caso el mentor de los Metros por aquel entonces, Eulogio Vilanova, sea el encargado de recordarlo y más que todo decir “algunas cositas” que nunca salieron a flote y que ni yo mismo supe – trabajaba en ese tiempo como reportero para Tribuna de La Habana- cuando se produjo aquel memorable “encontronazo”.

Hoy Vilanova vive en Miami, Florida. Para quienes no lo conocen muy bien, sepan que no es habanero, es avileño de pura cepa y que imparte sus conocimientos ahora a jóvenes valores desde edades tempranas en la ciudad floridana e igualmente “pule” a unos cuantos peloteros cubanos que se preparan con ansias de llegar a Grandes Ligas y a otros que ya lo han logrado…

¿Nombres?: Rogelio Armenteros, Lázaro Leyva, Pedro Echemendía, Yogey “el Yiyi” Pérez, Yeral Sánchez, el mexicano Carlos Díaz y muchos más…

Pero dejemos al “Profe” Vilanova dar sus puntos de vista sobre aquel play off, el que de seguro todos los que tuvimos la oportunidad de disfrutar no lo olvidaremos:

“Amigo Rafael, qué tiempos aquellos… Quizás algunos no sepan que yo soy avileño, pero es así”.

¿Entonces por qué te vas para La Habana?

-Es que mi esposa habanera me llevó para la capital, figúrate, y no me quedó más remedio que seguirla y la idea no te puedo negar que me gustó. Y para allá me fui.

¿Y cómo sigues ligado a bola?

-Comencé a trabajar en el centro deportivo Ciro Frías, de Arroyo Naranjo. Te hablo del año 1982.

¿Y qué pasó después?

-Le puse realmente mucho empeño a la pelota de Arroyo. En el 88 me pusieron a dirigir en los infantiles y en primera categoría y las cosas me saliero super bien. Y reconocieron mi labor en los campeonatos provincials de Ciudad de La Habana.

¿De qué manera?

-Sencillo. La Dirección Provincial de Deportes me puso a trabajar con los Metropolitanos, el segundo equipo de la capital cubana. Y finalmente me dieron el cargo de director de los mismos en la Serie 98-99.

¿Y cómo te fue esa primera temporada con los Rojos?

-Bueno. Me dan un equipo, que como sabrás, le habían quitado a peloteros claves y destacados como el primera base Antonio Scull, el jardinero Yasser Gómez, el receptor Iván Correa y los lanzadores Jorge Luis Machado y Amauri Sanit.

¿Pero te dieron otros de Industriales, ¿ verdad?

Sí, me cedieron a Rudy Reyes, a Serguei Perez y a Alexander Malleta.

¿Entonces en el 2000 ya se arma una buena novena de Metros?

-Claro. Pero fíjate, en La Habana es costumbre que los peloteros no rinden en provinciales y no se conoce muy bien a los valores jóvenes. Pero aún así, traje entre otras figuras a Yoandry Urgellés, quien fue después el Novato del Año, cambio a Rudy Reyes de torpedero a antesalista, a Juan Antonio Torriente de la tercera lo paso a la inicial, al campo corto Wilbert de Armas propuse lo enviaran a Industriales y pedí a Osmany Massó

Pero sé que recibiste críticas por esas “innovaciones”…

-No tantas, pero tú sabes muy bien que la mayor crítica que me hicieron fue la de cambiar a Wilbert, porque fue precisamente él quien decidió el famoso play off del 2000 a favor de los Industriales sobre nosotros… Pero pocos fueron capaces de reconocer que fue Osmany Massó el torpedero más destacado de aquella Serie.

Vamos a recordar algunos nombres de aquellos Metropolitanos del 2000, ¿te parece bien?

-Por supuesto que sí. Allí estaban como receptor Bárbaro Cañizares, Juan Antonio Torriente era el defensor de la primera; Enrique Díaz camarero; Rudy Reyes, antesalista; Osmany Massó, torpedero; Yoandry Urgellés, jardinero izquierdo; Doelsis Linares, jardinero derecho conjuntamente con Serguei Pérez, y Juan Carlos Muñiz, el central. El designado era William Bustamante y Fernando Cervantes, el segundo catcher.

-En el pitcheo contábamos con Juan Pablo Hechavarría, René Espín, Heriberto Collazo, el ya fallecido Luis Felipe Díaz, Yader Martí, Sandy Ojito, Amaury Sánchez, Darwin Rafael Beltrán y Roberto Ibáñez…

En el cuerpo de dirección estaban junto a mí Danilo Valiente, Rolando Verde, Ronald Duarte, Gilberto de Armas y Julio Castanedo y el cargabates era ”El Chiqui” Pacheco.

Calidad asegurada, sin dudas, pero los Industriales tenían también muy buena banda…

-Claro que sí, los Azules tenían entre otros a Iván Correa, Antonio Scull, Juan Padilla, Lázaro Vargas, Ever Bastida, Germán Mesa, Javier Méndez, Carlos Tabares, Yasser Gómez, y en su staff de pitcheo estaban Lázaro de la Torre, Luis Alberto González, Lázaro Valle, Rolando Viera, Maike Quintero, Jorge Luis Machado, Ernesto Noris…

¿Cómo se sintieron tus peloteros previo a este play off crucial?

-Mira, las subseries entre Industriales y Metros siempre fueron duras, nosotros nos fajábamos con ellos deportivamente. No teníamos nada que perder, ellos eran los que jugaban más presionados. Nostros ya habíamos cumplido al colarnos en los play offs.

-Te recuerdo que el bate de madera regresó a la pelota cubana precisamente en el 2000 y en esa serie se dieron pocos jonrones, el líder fue Iván Correa con 10, y el primer nocao que se dio precisamente en esa temporada con este bate de madera se lo dimos nosotros a Industriales 11×1 en la etapa regular. Frente a ellos nos crecíamos y les jugábamos bien fuerte.

Pero siempre existió gran rivalidad entre estas dos novenas de la capital…

Sí, la rivalidad era bien grande, tienes razón. Aquellos jugadores que sacaron de Industriales y que vinieron a Metros querían demostrar su calidad y subir y esa era una bonita oportunidad. Ellos sabían que con Metros también podían ganar y ser grandes peloteros.

Vamos a rememorar ese play off histórico… ¿Qué paso en el primer desafío?

-Le di la bola a Juan Pablo Hechavarría y triunfamos en ese juego 8×5, estuvimos muy bien. Recuerdo que después tiró por nosotros Yader Martí, a quien por cierto Yasser Gómez le dio su primer jonrón en Series Nacionales.

Imagino que se sintieron muy estimulados con ese primer resultado, pero muchos aficionados no…

-Los muchachos estaban muy felices por haber logrado ese primer éxito, pero poco después de terminado el choque fuimos agredidos por el público, con palabras groseras, nos tiraron botellas, de todo, siendo nosotros también un equipo de la capital… y cuando salimos del estadio hasta piedras nos tiraron. Esa fue una constante en los dos juegos que les ganamos.

-Fíjate que en pleno juego Nelson Díaz, el árbitro principal del choque, indicó alertar por la amplificación que si seguían los desórdenes, le iban a dar el triunfo automáticamente a Metros.

Vamos al segundo juego…

-En este René Espín fue nuestro abridor y tiró un juegazo. Nos llevamos otra vez la victoria, esta vez por lechada de 2×0. Este lo decidió Bárbaro Cañizares con jonronazo en el segundo inning con uno en base. Por ellos lanzó Jorge Luis Machado.

¿Entonces qué paso después?

Imagínate, aquello fue super emocionante… Sabíamos que estábamos ya en una posición muy ventajosa. Recuerdo que los Industriales actuaron como home-club con su traje en blanco predominante y nosotros con el rojo de visitador y el apellido detrás. Para el tercer enfrentamiento pedimos seguir jugando con el mismo traje de visitador, pues las cosas nos habían salido de maravillas con él, pero había que cambiar de dagout, entonces la Comsion Nacional no lo aceptó.

¿Y por qué querían seguir jugando con el mismo traje?

-Porque varios de nuestros peloteros eran religiosos y querían seguir con el rojo, además, en la pelota algunos equipos juegan siempre con el mismo traje, se adaptan a eso, ejemplo, los Yanquis de Nueva York, y en Cuba hoy en día se usa o se combina el traje como se desea… Pero fíjate, los Industriales tenían o usaban pantalón Adidas y nosotros y los demás conjuntos pantalones Batos cubanos. ¿Era justo eso?

Imagino tuvieron que cambiar de traje…

Efectivamente, tuvimos finalmente que cambiarnos de traje. Y te doy más datos, ambos equipos estábamos alojados en la Villa Panamericana de La Habana del Este y después de estos dos primeros juegos que ganamos, nos mandaron para la casa, porque nos comentaron que existían “algunos problemas” en la Villa.

¿Y para dónde mandaron entonces a los peloteros de Industriales?

-Contradictoriamente a los peloteros de Industriales los dejaron allí en la Villa. ¿Cómo se explica eso? Y tu sabes, amigo que la alimentación de un deportista, por solo ponerte un ejemplo no es la misma en una Villa con todas las condiciones que en casa de cada uno de ellos, pues como se sabe la alimentación en los hogares cubanos deja mucho que desear, eso lo sabe todo cubano. Además, algunos de nuestros atletas un poco que se desordenaron al tener que ir a sus hogares. Tú sabes como es eso.

-Fíjate que para los últimos tres juegos restantes de ese play off iban recogiendo en una guagua a pelotero por pelotero para llevarlos a jugar al estadio. Por supuesto, era evidente que después de haber triunfado nosotros en esos dos primeros partidos llegarían las dificultades para nosotros.

-Los mejores bates fueron reservados para los Industriales, para las prácticas nos daban solo diez pelotas cuando los Azules usaban las que quisieran, los peloteros nuestros comían en sus casas, como te dije anteriormente, y los rivales en la Villa, el trato era bien diferente.

-Otra cosa, los llamados dirigentes de las diferentes organizaciones de la capital apenas nos saludaban, evitaban ese saludo, y mucho menos nos dieron las felicitaciones por haber ganado los dos primeros encuentros. Sin embargo, sería injusto si no mencionara que el único que se acercó a nosotros y nos felicitó fue Esteban Lazo, cuando aquello primer secretario del Partido en Ciudad de La Habana, quien por cierto le dio un casa a Juan Pablo Hechavarría, quien vivía en pésimas condiciones, al extremo que tenía que dormir en el piso, allá en La Corea, un barrio de San Miguel del Padrón. Pero te digo, todo se preparó inteligentemente para favorecer a Industriales. Tristes hechos, mi amigo, pero reales.

-Y en mi caso, por haber luchado y haber realizado un buen papel con Metros, me dieron como premio que me quitaron posteriormente del equipo a Bárbaro Cañizares, a Yadel Martí, a Enriquito Díaz, a Yoandry Urgellés, a René Espín, o sea que me desarticularon el equipo… el famoso desangramiento de Metros, del que jamás estuve de acuerdo.

-Sepan que a mí algunos capitalinos no me soportaban en La Habana. Figúrate, guajiro en La Habana y con resultados, eso hizo ronchas en algunos, por ejemplo a Agustin Marquetti, quien dijo en unas Confesiones de Grandes, de Aurelio Prieto, que qué sabía yo de pelota para dirigir, y creo que lo dijo más que todo porque el no hizo el grado para comandar a Metros como director, pues venía de la Liga de Desarrollo y porque su hijo tampoco hizo el equipo, quien estaba lesionado en su brazo de lanzar. Sin comentarios.

Volvamos al terreno… ¿Qué pasó en el tercer choque?

En ese juego ocurrieron cosas interesantes. En el séptimo inning íbamos delante nosotros 1×0 con Heriberto Collazo en la lomita. Por ellos tiró Lázaro de la Torre. Recuerdo que los Industriales llenaron las bases en esa entrada con un out y entonces Iván Correa dio rolling a tercera, bueno para doble play de frente a Rudy, pero este pifió y solo pudo sacar en primera y por ende no se pudo sacar la doble matanza. Después Juan Padilla elevó fly al derecho y Serguei no lo pudo fildear… El tenía mucha presión porque de Industriales lo habían cambiado a Metros, y lo habían convertido en la llamada Esperanza Azul y lo pusieron con 17 años a actuar con Industriales . Bueno, la cosa fue que se fueron arriba y ganaron finalmente 5×4. Lázaro Valle relevó y si Industriales llegó más adelante se lo debió a él, quien retornó al béisbol ese año y les dio muchos triunfos a ellos.

Cuarto juego

Ellos nos ganaron 9×5 y todo quedo listo para el quinto y decisivo juego.

Quinto juego

Fue un encuentro donde hubo varios jonrones. Terminó 12×7 a favor de Industriales, siendo el héroe de ese juego Wilbert de Armas, con dos jonrones decisivos, y Torriente pegó dos por los nuestros. Lázaro Valle de nuevo se creció. Y nada, perdimos en buena lid.

¿Qué pasó después de perder esa reñidísimo enfrentamiento?

Yo paré ingresado en el Hospital Hermanos Ameijeiras, figúrate, la presión arterial no me bajaba, tremenda hipertensión. No era fácil, como decimos nosotros, ganar los dos primeros y caer en ese play off con un 2-0 delante. Era prácticamente imposible perder como perdimos. Y te digo, no justifico la derrota, pero fueron muchos poquitos los que imposibilitaron que Metros pasara esa fase con posibilidades de llegar a la final.

Bueno, para que no te vuelva a subir la presión, cambio de tema. ¿Quién ha sido para ti elmejor director en Series Nacionales?

-Difícil pregunta, es que los ha habido muy buenos, magníficos. Yo en los personal admiré a José Miguel Pineda, para mí era el mejor que había en Cuba, tenía vista para todo, entre los mejores, conjuntamente con Ramón Carneado, Roberto Ledo, Jorge Fuentes, Alfonso Urquiola, Rey Vicente Anglada, Servio Borges, quien tuvo más resultados que conocimientos. También el “Coco” Gómez, Arnaldo Rachat. Y como entrenadores de pitcheo te digo a Pedrito Pérez, José Manuel Cortina, Orlando Chinea y otros. Y mira, entre los entrenadores de bateo me viene a la mente el villaclareño Pedro Moré.

¿Crees justo que se haya eliminado a Metropolitanos de las Series Nacionales de Cuba?

-Esa fue una decisión bien mala para la capital y buena para las provincias. Higinio Vélez siempre estuvo en contra de Metros, y fue quien públicamente dijo que no podía ver a ningún habanero. Lo peor que se ha hecho en la pelota cubana fue poner a Higinio como Comisionado Nacional y darle tanto poder de mando.

¿Algo a la afición de la Isla y fuera de esta?

Mi reconocimiento y agradecimiento a tanta gente bella que nos iba a ver y apoyarnos a los diferentes estadios de Cuba. Nosotros, los Metropolitanos, éramos muy queridos y bien recibidos en cada territorio. Fue una pena que en la capital algunos seguidores de Industriales nos ofendieran, nos insultaran y nos repudiaran tanto…, fueron incidentes muy desagradables, la verdad. También fue poco profesional por parte de las autoridades deportivas y de las diferentes organizaciones en aquel momento su menosprecio por nosotros.

Agregar que si aún queda algún aficionado de Metropolitanos, darle las gracias por seguirnos y ojalá algún día resurja este conjunto y pueda una vez más deleitar a la afición con su aguerrido juego. Todo es posible en esta vida.

Y aprovecho la oportunidad para señalar finalmente que el béisbol cubano en cuanto a campeonatos y estructura anda muy mal, pero el talento y calidad del pelotero están ahí y hoy en día es inmenso el valor del jugador cubano, es altamente reconocido, con solo mirar lo que hacen en Grandes Ligas se afianza lo anterior.

Muchos peloteros, entre ellos norteamericanos, y gente conocedora de este deporte en Estados Unidos hablan encomiásticamente de los nuestros. Y si ellos pudieran venir a jugar a las Grandes Ligas sin restricciones y sin tener que salir del país arriesgando sus vidas, se inundaría esa pelota de cubanos como siempre sucedió desde antes de 1959. De eso no me cabe la menor duda.

Mis saludos y todo mi respeto para nuestros peloteros y para el aficionado cubano.