Los Cocodrilos cuentan con 34 victorias y sólo 3 derrotas para así asegurarse en la cima de la actual Serie Nacional de Béisbol. Entre los aficionados existen detractores y seguidores, algo que sucede en todos los equipos de la Isla y por tanto los yumurinos no están exentos de ello.

Los que no están de acuerdo con el excelente paso de los matanceros se centran solamente en los errores y métodos del manager Víctor Mesa; los tildan de equipo del exterior por los peloteros que tienen de otras provincias del país y especulan de lo que pudiera pasar en la segunda fase, que exige un mayor rigor y esfuerzo en cada salida al terreno.

Algunos, prepotentes al ver el impetuoso paso de los roji-amarillos, comentan que siempre sucede lo mismo: cúmulo de victorias en la primera fase pero en la postemporada pierden el ritmo y al final no logran coronarse como campeones. Otros dicen que es sólo cuestión de tiempo, están adaptados a esa actuación del equipo y cuando tienen que demostrar su preparación, les falta.

Es importante destacar que cualquier dirección de una novena puede cometer errores tácticos debido a que son seres humanos y pueden equivocarse, además por las características estratégicas de este tipo de deporte, también corren el riesgo de errar en alguna decisión, pero el que no arriesga, ni gana ni pierde.

Por otra parte es importante resaltar que los métodos de Víctor Mesa puede que influyan pero no determinan la actuación de los Cocodrilos porque los emplea desde el inicio de cada temporada. Además, explosivo e intranquilo pero está en cada detalle del juego porque eso sí, siente y vive la pasión del béisbol, se entrega por completo y exige de los muchachos el máximo para lograr que cada partido sea avivado y no monótono.

Recordar también que el equipo no ha logrado consolidarse del todo debido a las deserciones de varias de sus mejores figuras, quedando así los más inexpertos.

Además, es necesario estudiar qué está pasando en otras provincias que peloteros, a la altura por ejemplo, del granmense Yordanis Samón está en la escuadra de VM32 .

Los seguidores, por su parte, están contentos con el brillante desempeño pero no satisfechos del todo, comentan que las derrotas han sido porque no jugaron para ganar y por tanto los conllevan a sentir cierta duda y temor por la etapa que se avecina ya que se concentra mejor defensa, ofensiva y picheo, es decir, aumenta la calidad del torneo.

Muchos a pesar de tener cierta desconfianza, comentan que son incondicionales a los Cocodrilos, que el Victoria de Girón se llenará para disfrutar cada éxito, nadie sabe lo que puede suceder. Confiamos en Víctor Mesa, en los Cocodrilos. Este año huele a gloria para Matanzas.