Por Jorge Ebro.

El período de firmas internacionales sigue tocando con su varita mágica a los prospectos cubanos y ahora alcanza a Randy Arozarena, quien acaba de llegar a un pacto con los Cardenales de San Luis por $1.25 millones.

Meses atrás cuando se hablaba de Arozarena se hablaba de un bono mucho más jugoso, pero tal como se está moviendo el mercado de agentes libre cubanos con restricciones, nadie duda de que Arozarena ha hecho lo correcto en aceptar ese acuerdo.

Nacido en Pinar del Río y con 21 años de edad, Arozarena aún está caliente de haber destrozado la Liga Norte de México, donde finalizó como campeón de bateo al conectar para .377.

Como si fuera poco, este chico resultó el líder de bases robadas y carreras anotadas, segundo en hits, dobles y triples, y séptimo en impulsadas, lo cual da una medida del talento integral y las habilidades que posee.

Ubicado en el puesto número 16 de Grandes Ligas entre los prospectos internacionales y como noveno en la clasificación de Baseball América, Arozarena destaca por la rapidez de su swing y su velocidad en el corrido de bases.

Su poder no es de levantar cejas, pero con un buen entrenamiento pudiera llegar a conectar entre 10 y 15 jonrones, sin descuidar la habilidad para dominar la zona de strike y dirigir la bola hacia todos los ángulos del terreno.

Aunque en Cuba jugaba como torpedero en las categorías juveniles, también puede desempeñarse en la intermedia y quizá los jardines, algo que deberán dilucidar los Cardenales de ahora en lo adelante.

San Luis es el último equipo que rebasa la cifra asignada para firmas internacionales, lo cual se traduce en que el contrato de Arozarena les costará realmente $2.5 millones por el pago de una penalidad y en los próximos dos ciclos no podrán otorgar bonos de más de $300,000.

Recientemente los Cardenales llegaron a acuerdos con otro par de prospectos cubanos: el jardinero Jonathan Machado por $2.3 millones y el lanzador derecho Johan Oviedo por $1.9 millones.

Tomado de ElNuevoHerald.