Este lunes, fue otra jornada donde los refuerzos volvieron a encender la luz roja en la lomita: Yosvany Torres con actuación victoriosa de 9-2 a favor de los Leopardos visitantes, y Frank Monthiet —a segundo turno— dándole a los Cocodrilos de casa un triunfo por blanqueada 5-0.

En una doble cartelera es bien difícil ganar dos veces, así que la división de honores entre Villa Clara y Matanzas en el Estadio Victoria de Girón fue algo parecido –casi idéntico— a la última serie que disputaron en la actual campaña.

Aquél enfrentamiento lo lideró el equipo anaranjado 2-1, gracias a dos jonrones cruciales de Yurien Vizcaíno, y el madero oportuno del inicialista habanero Alexander Malleta para definir el juego 3.

Norel González fue tan grosero con el zurdo Yoanis Yera (10-2, 2.65 ERA) y el diestro Alexander Bustamante, que le sonó dos largos jonrones a cada uno para así solidificar la labor de Torres, a quien ahora solo lo separan tres triunfos de los 100.

Yera, salió apabullado después de soportar cinco hits y seis carreras ante igual número de oponentes, ya que el único out lo obtuvo el guante “salvador” de Juan Carlos Torriente.

Torres (5-5, 3.63 ERA) despachó siete innings donde admitió dos limpias –ambas en el segundo acto—, ponchó a tres y regaló un pasaporte, para así rebajar su efectividad en la segunda etapa a 2.63, y su tasa de boletos por cada nueve capítulos –sin contar los intencionales— rumbo a un ‘!subvalorado e impecable!’ 0.98.

“Me sentí duro, con buen control y estaba consistente y agresivo, aunque siempre cuidándome de esos buenos bateadores que tiene matanzas”, dijo a Radio Rebelde Yosvani Torres Gómez, que podría convertirse lanzando con el uniforme de Villa Clara en el onceno lanzador pinareño que obtiene 100 triunfos en Series Nacionales.

“No estoy pensando en el récord personal (100 ganados en su carrera). Ahora mismo, aquí, de refuerzo, solo quiero ayudar al equipo, aconsejar a los muchachos jóvenes. Es preciso desde ya, seguir fortaleciéndonos en todos los sentidos con la mente en que sí se puede discutir y ganar el campeonato”.

Por la senda contraria y a segundo turno, Frank Monthiet (6-3, 3.02 ERA) volvió a dibujar un panel de ceros frente a la tanda de los naranjas, con dos ponches una base por bolas y cuatro hit permitidos en cinco episodios durante la victoria de los Cocodrilos 5-0.

“Sabía que podía ir ajustando de nuevo el ritmo. Es mayormente lo que ha pasado en mis más recientes cuatro aperturas. Mucho enfoque, preparación, entrega. La confianza de nuestro manager Víctor Mesa y el equipo en general, ha sido fundamental”, afirmó el derecho refuerzo de Industriales, que se apuntó la sonrisa número 86 en la pelota cubana y está en los metros finales camino al centenar de sonrisas.

Los yumurinos tomaron ventaja de 2-0 en el mismo capítulo inicial, por un error del camarero Andy Sarduy, mientras que Alaín Sánchez (6-5) era el blanco de 11 hits tras retar a 22 rivales en cinco capítulos.

La tropa de Víctor Mesa sumó una artillería de 13 cañonazos, y siete fueron de la tanda baja de la alineación. El sexto bate Yurisbel Gracial pegó de (4-3) y Juan Carlos Torriente sacudió el madero de (3-2) con par de producidas, una empujada y una anotada.

Otra de las claves del partido estuvo en el pitcheo del zurdo Ramón Licor, quien vino con bases llenas en el sexto capítulo y evaporó a tercero, cuarto y quinto bate.

Jeferson Delgado no se baja del asiento del líder de bateo .427 (213-91) y Yordanis Samón arribó a 20 dobletes en la campaña, su número 300 en la pelota cubana.

De manera curiosa, Samón ha conectado sus tubeyes 298, 300 y 301 frente al diestro de Minas de Matahambre Yosvany Torres. Su primero en series nacionales fue el 21 de noviembre de 2002 a costa de un pitcheo de Ismael González, ex relevista de Ciego de Ávila.

Ahora la serie particular entre Villa Clara y Matanzas está 5-3 a favor de los Cocodrilos, aunque los compromisos históricos favorecen ampliamente a los villaclareños 75-66.

En el Estadio Mártires de Barbados, Ciego de Ávila evitó un segundo resbalón ante los Alazanes de Granma, quienes ganaron 1-0 el primer choque con faena monticular del diestro Lázaro Blanco (11-2). Vladimir García (11-5) salió derrotado y Miguel Lahera cerró para su cuarto salvamento.

Un sencillo del emergente Héctor Arias se encargó de empujar la única anotación del duelo vespertino, anotada en las piernas de Guillermo Avilés.

Pero, a segunda hora, Dachel Duquesne (9-5) lució tan inmenso como cuando se fumó el tabaco de los Vegueros, y le dio a los Tigres la victoria del título el pasado 17 de abril en la 55 Serie Nacional de Béisbol.

Duquesne, ponchó a once rivales, toleró solo una limpia y regaló dos pasaportes.

Del bando opuesto, Yoalkis Cruz (8-5) fue castigado con cinco limpias y siete hits, suficiente inefectividad para no pasar del quinto round.
Eliecer Griñan -¿¡sorpresa!?- volvió a sorprender con sus piezas de bateo en el plato, y sacudió el madero de 4-3, con doble, triple y par de remolcadas.

Yunior Paumier disparó dos bambinazos en el Estadio Calixto García, José Castañeda lo imitó con un batazo de vuelta completa en el primer juego y Marnolkis Aguiar remolcó cuatro carreras en el segundo choque, lo necesario para hilar dos éxitos de los Cachorros, 6-3 y 9-4.

Carlos Santiesteban (8-7) y Noelvis Entenza (6-1) fueron sólidos en el box para asegurar el cuarto triunfo consecutivo del equipo, mientras que, los diestros, Dany Betancourt (6-5) y José Ramón Rodríguez (7-5) esta vez no pudieron controlar a sus oponentes.