Con la misma garra que una vez mostró en enfrentamientos subidos de temperatura entre Villa Clara y Ciego de Ávila, Yeniet Pérez asume su inclusión como refuerzo de Los Tigres en la segunda etapa de la LIV Serie Nacional de Béisbol.

Siempre que pisa la grama del estadio José Ramón Cepero, se le ve confiado, y aleja la presión que implica jugar para un público ajeno, exigente y fanático por momentos.

A pesar de la breve estancia con los "felinos", Yeniet se ha ganado el visto bueno de los aficionados: que "las coge todas en tercera", que "tiene poder al bate", que "tiene tremendo brazo"; y no le guardan resentimiento por pertenecer al equipo que por años dominó a los locales en los play off.

"Lástima que los villaclareños no hayamos podido avanzar, sin embargo, ahora debo darlo todo por la causa del conjunto que confió en mí", declaró quien protege el tercer cojín y ocupa el sexto madero en la tanda avileña.

Hasta ahora, le ha ido bien al bate y a la defensa. En la subserie contra Los Cachorros conectó tres indiscutibles e igual número de impulsadas en ocho oportunidades y fue infranqueable en la esquina más caliente.

La rivalidad entre Naranjas y Tigres no le parece un impedimento: "hace años conozco a los peloteros de aquí y los considero como mi familia. Siempre hemos jugado partidos peleados; lo demás es parte del espectáculo".

Yeniet agradeció la calurosa acogida de los aficionados y los aplausos tras un buen fildeo y se refirió, además, a las ventajas de jugar en una provincia cercana a la suya, pues "siempre que se pueda será más fácil visitar a la familia".

Aunque sabe lo que significa ganar el campeonato nacional, quiere imitar la actuación del holguinero Yordan Manduley, el indómito Edilse Silva y el tunero Danel Castro, pilares fundamentales en el título logrado por su escuadra en la Serie 52.

Igual aspiración comparten los coterráneos Alain Sánchez y Ariel Borrero, quienes, al igual que gran parte de los jugadores avileños, desean "probar" de nuevo el trofeo, pero esta vez con sabor a naranja-piña.