La temporada nacional del 2013 ya es historia, los eventos foráneos se nos vienen encima, con sus respectivos análisis y críticas, sin embargo después de un largo año jugando pelota en Cuba, un vistazo a lo ocurrido, merece la pena.

A pesar de lo subjetivo que pueden parecer algunos señalamientos de este trabajo, el compendio trata de abarcar los hechos más significativos, donde se aplauden los logros y se calumnian las pifias, con el ánimo de que estas últimas sean superadas.
Sin orden lógico les presentamos lo mejor de la temporada:

• Los duelos Freddy Asiel Álvarez-Noelvis Enteca (3 de ellos) en Semifinales.
• El título de Villa Clara, después de 18 años de espera y frustraciones.
• Que Dayan García (ART) terminó con más jonrones (9) que ponches (8) en la campaña, tras 320 veces al bate.
• El 996 de Yordan Manduley (HOL-VCL) como torpedero y que Andy Sarduy (VCL) fildeara 993, además de la oportunidad de que ambos estuvieran alrededor del segundo cojín de los Campeones Nacionales.
• Los refuerzos, de manera general.
• El impresionante promedio de efectividad capturando robadores de Luis Castro (IJV) con 62%, pues eliminó a 32 de los 52 que le salieron al robo.
• La actuación del Novato del Año (unánime) de Norge Luis Ruiz (CMG-SSP).
• La tercera campaña consecutiva de Duniel Ibarra con más de 20 juegos salvados, que es un hecho sin precedentes.
• Erlis Casanova (PRI), que por segundo año en línea es el lanzador de mejor frecuencia de jonrones permitidos, pues en el 2012 permitió solo 2 en 111.2 entradas y en este 2013 ninguno en 124.1 innings de actuación.
• La volubilidad de Edel Tamayo, que jugó todas las posiciones de Matanzas, menos el jardín central y la inicial.
• Que Las Tunas fue el equipo que más salió al robo, con 128 intentos, de los cuales 67, fueron exitosos.
• El control de Yosvani Torres (PRI), con solo 20 pasaportes gratis, en 123.1 capítulos, promediando a uno cada 6.1 inning, o lo que es lo mismo 1,45 boletos por juego completo.
• El arribo a la octava campaña con 100 imparables o más de Isaac Martínez (CAV) y Alfredo Despaigne (GRM-PRI), mientras que Frederich Cepeda (SSP) llegó a 7, Ariel Sánchez (MTZ) y Dainier Moreira (GTM-CAV) a 6, con este último lográndolas de manera consecutiva. Dayan García arribó a 4.
• La Gala del Deporte Cubano y el programa televisivo de selección de refuerzos, pues aunque ambos merecen ser mejorados, son los primeros pasos hacia una prospera y más amplia relación de los medios de comunicación masiva y el deporte en general.
• La actuación de Demis Valdez (MTZ) como designado, pues promedió 480 (25-12) en esas funciones, además de 3 dobletes, 12 remolques y 6 boletos. Lamentablemente en Postemporada, en la misma categoría se fue de 11-1 (091), no produjo carreras y se tomó 4 ponches.
• El jonrón de Ariel Pestano (VCL) como colofón a muchos deseos recientemente reprimidos del mascara y todo su pueblo.
• La medida de obligatoriedad de abridores y relevistas de cada staff, que aunque fue contraproducente a ratos, obligó a los managers a dirigir mejor sus respectivos colectivos.
• Las remontadas de los matanceros y espirituanos en la Semifinal entre ellos.
• Que se decidiera jugar solo en los estadios cabeceras de provincias.
• La noticia del regreso oficial de Cuba a la Serie del Caribe.
• Los premios, mediante viajes al extranjero, de los Campeones Nacionales y el equipo ganador del Juego de las Estrellas.
• Que se permitiera la contratación de peloteros cubanos activos en la Liga Mexicana.

Aquí va lo peor:

• Las declaraciones de Juan Miguel Gordo (TUN) sobre su propio equipo, después de no clasificar tras la primera vuelta.
• La manera y el momento en que se trató la eliminación de Metropolitanos de la Serie Nacional, por la Federación del deporte.
• La actuación de Yoennis Southeran (GTM) tras pifiar, ver como su record se le iba de las manos y emprenderla violentamente contra el anotador oficial del juego.
• Que la temporada durara 7 largos meses.
• El invento, por segundo año consecutivo, de dos días intercalados entre sedes en la Postemporada.
• La injusta sanción de la Comisión Nacional a Yosvani Alarcón (TUN), dejándolo fuera de la Serie y el Cuba, justo antes del Clásico Mundial, lo que generó varias comentarios que aludían conspiración.
• Los corredores de Sancti Spiritus, que solo salieron 37 veces en 87 juegos, robando solo 18 bases en toda la temporada.
• Que se permitiera darle baja por rendimiento a los refuerzos, cuando se supone que la selección de cada manager sea verdaderamente valorada y por ende su responsabilidad. Matanzas tuvo 9 jugadores como refuerzo, Ciego 6, mientras que el resto asumió con dignidad los 5 que escogieron.
• Las sanciones masivas de la provincia de Camagüey, donde peloteros como Alexander Ayala, Vicyoandry Odelin y Elier Sánchez fueron afectados.
• Que ningún lanzador diera 100 ponches.
• Que ningún bateador conectara 20 jonrones, razón por la cual Alfredo Despaigne (GRM-PRI) y Yulieski Gourriel (SSP) vieron trunca su cadena de 5 temporadas consecutivas arribando a esa cifra.
• La Segunda División, que se convirtió en la improvisación del año, el derroche de la década y el disparate de la historia.
• Las promesas de semifinales en el Clásico Mundial y algunos de los inventos en el roster definitivo, dando al traste todo esto con la esperanza de muchos.
• Que Sancti Spiritus vuelve a dejar con las ganas a los suyos.
• Que José Dariel Abreu sigue sin producir en Playoffs y en cuatro incursiones en esa época del año, tiene solo 9 remolques en 94 veces al bate, a pesar de haber conectado 6 bambinazos.
• El propio relajo con los refuerzos y la Segunda División, que permitió que Jorge Johnson (TUN-SSP), Yunior Paumier (HOL-SSP) y Urmaris Guerra (GRM-IJV) jugaran 98, 95 y 91 partidos respectivamente, mientras el resto no pudo participar en más de 87.
• El trofeo del equipo campeón. Primeramente decir que es increíble que después de 53 años aun la Serie Nacional no tengo un premio distintivo y único, a la vez que el de este año lucia muy rimbombante, grotesco y falto de imaginación. Semejándose más a un pastel de boda que al premio para el equipo del año.
• Entre los Bates de Plata y los Guantes de Oro de este 2013 (donde aún se le nombra erróneamente como el Todos Estrellas) la selección de Joan Carlos Pedroso (TUN-IJV) como inicialista defensivo, cuando en realidad solo participó en 6 juegos en la Segunda Vuelta en esa posición y aunque no cometió errores en 45 partidos, con 28 dobleplays y 444 lances, Luis Felipe Rivera fildeó para 996, con 3 marfiladas en 749 lances y 79 dobles matanzas en 74 encuentros.
• Siguiendo con el tema, mencionar que se omitieron Andy Sarduy (VCL) y Rusney Castillo (CAV) como Guantes de Oro en los jardines, con el primer fildeando para 990, con un error y 5 asistencias en 102 lances y el avileño aún mejor con 994, una pifia, 7 asistencias en 164 lances, mientras se incluían a Dayron Varona (CMG-VCL) (958, 5 marfiladas en 119 oportunidades) y Lazaro Rodríguez (CFG) (981, 2 errores en 103 lances).
• Los atletas abandonando el país, crisis que continúa.
• Que por tercer año consecutivo el Campeón vigente (Ciego de Ávila 2012, Pinar del Rio 2011 e Industriales 2010) se quedó fuera de la Postemporada.
• En los Bates de Plata se pudo haber considerado a los jardineros Yasmani Tomas (IND) (289/364/538/902, 15 HR, 45 CA y 60 CI), Ariel Sánchez (348/413/435/848, 0, 57, 30) o William Luis (CMG-CFG) (257/343/511/854, 19, 46, 62) por encima de Varona, que nostalgia aparte, tuvo estos números 343/406/482/888, 6, 37, 32. No es la más infame de las injusticias, pero claro no está.
• El arbitraje, que sigue estando de lágrimas. La zona de strike, que comenzó la campaña con unas dimensiones y terminó con otras completamente distinta.
• Los cambios de horario y en sentido general todas las improvisaciones de la temporada.

De seguro se nos quedaron asuntos por tratar y usted tendrá sus propias consideraciones, pero para eso lo dejamos polemizando.

Sin mas por ahora.