En la mejor de las lides se impuso el visitador, sin importar la hostilidad del público: el "Arquímedes Colina" consiguió en predios del otrora "Manuelita" las dos victorias necesarias para la celebración, dejando tendido al favorito de las gradas, el "14 de Julio", por cuatro éxitos ante dos. Y ya tiene su campeón la 34 Liga Azucarera de Béisbol.

Con el pitazo de inicio de zafra en Cienfuegos, comenzaron las acciones en el centro, que hasta ese momento favorecían a los orientales dos sonrisas por una. Pero el viernes empataron los sureños con el único marcador abierto de los tres encuentros y fue de cinco carreras por una. Con la igualada a dos por equipo, el fin de semana ponía al máximo las tensiones.

Sin embargo, los granmenses jugaron mejor sus cartas y se impusieron por la mínima en las jornadas de sábado y domingo: 2x1 primero y 1x0 después, para sentenciar la final, choques donde hizo aguas la defensa de los anfitriones.

“Este regreso del ‘Arquímedes Colina’ responde a la preparación desde hace dos años y creo que conformamos un equipo bastante completo, explica su mánager, Damián Batista Vega. Teníamos serias deficiencias en el área de los lanzadores, mas conseguimos reforzarla con hombres de calidad como Alexei Alarcón, con varios años en Serie Nacional, y Joaquín Morales, el primer abridor.

“Realmente hasta aquí nos trajo la ofensiva, pues contamos con un grupo muy bateador, desde el primer bate hasta el noveno. Incluso, con un excelente banco, donde cualquiera puede consumir turno y conectar un cuadrangular con facilidad. A ellos sumamos corredores rápidos, para darle un cierre al conjunto.

“Otro de nuestros objetivos era trabajar por la continuidad, con muchachos jóvenes en condiciones de mantenerse cuatro o cinco, o quizás hasta más temporadas. Llevamos doce años estando entre los mejores equipos del país y eso debemos conservarlo.

“Nos enfrentamos a un equipo de gran calidad como el “14 de Julio”. Fue una final muy pareja”, concluye Batista Vega. También los locales dan fe del oponente:

“Un digno rival, asegura Ángel Miguel Acea Herrera, al frente de la novena de casa. Se prepararon para esta ocasión y ya vieron el resultado. Yo me siento muy orgulloso de mis jugadores: hombres rápidos, de muy buena ofensiva y defensa. También es un equipo a futuro: así como ustedes ven que ha arrancado nuestro ingenio, así mismitico lo hará nuestro béisbol”.

Terreno fuera, varios pendientes quedaron al torneo en esta ocasión: “en esta 34 edición confrontamos problemas con el aseguramiento, comenta Félix Borges Martínez, comisionado nacional de la Liga Azucarera. Sobre todo con las pelotas y los trajes, porque este año la Industria Deportiva no nos vendió ni lo uno ni lo otro. Toca agradecerles a los comisionados en las provincias por su apoyo y también a la Comisión Nacional, de lo contrario, no hubiésemos podido desarrollar este campeonato.

“Esperamos que a nivel de país nos ayuden más en la próxima campaña, máxime la nueva dirección del INDER, añade. Nosotros también formamos parte del movimiento deportivo cubano y somos los más veteranos de pelota; incluso nos dirigió Martín Dihigo en los inicios. Además, subimos atletas a la Serie Nacional y, al menos este año, son cerca de 17 en toda la Isla. Por eso la Liga tiene que continuar”.