La organización de Grandes Ligas estadounidenses (MLB por sus siglas en Inglés) estaría contemplando abrir una oficina en La Habana, informa hoy El Nuevo Herald.
Aludiendo a “una fuente con conocimiento del tema”, la publicación online dice que altos ejecutivos de MLB ya habrían solicitado los permisos para abrir la oficina en la capital de Cuba. El Herald explica que esta sería “similar” a la que hay en República Dominicana porque se “facilitaría el desarrollo de las operaciones de béisbol, aseguraría que los clubes cumplan las leyes establecidas de conjunto entre Las Mayores y el país, y ayudaría en proyectos sostenibles para mejorar comunidades”.
A fines del pasado año Grandes Ligas solicitó al gobierno de EE.UU. un permiso especial para contratar peloteros directamente en Cuba. Se cree que la autorización de la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC) para tal efecto ya está en la fase de borrador.
La apertura de la oficina en La Habana daría un giro radical a la cuestión de la fuga de peloteros cubanos. El año pasado emigraron –legal e ilegalmente– unos cien beisbolistas, muchos de ellos con la vista fija en un contrato con Grandes Ligas.
Entre los últimos peloteros cubanos que abandonaron un equipo nacional para jugar en EE.UU. están los hermanos Yulieski y Lourdes Gourriel, el primero de ellos considerado por muchos como el mejor de ese deporte en la Cuba actual.
Aludiendo a “una fuente con conocimiento del tema”, la publicación online dice que altos ejecutivos de MLB ya habrían solicitado los permisos para abrir la oficina en la capital de Cuba. El Herald explica que esta sería “similar” a la que hay en República Dominicana porque se “facilitaría el desarrollo de las operaciones de béisbol, aseguraría que los clubes cumplan las leyes establecidas de conjunto entre Las Mayores y el país, y ayudaría en proyectos sostenibles para mejorar comunidades”.
A fines del pasado año Grandes Ligas solicitó al gobierno de EE.UU. un permiso especial para contratar peloteros directamente en Cuba. Se cree que la autorización de la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC) para tal efecto ya está en la fase de borrador.
La apertura de la oficina en La Habana daría un giro radical a la cuestión de la fuga de peloteros cubanos. El año pasado emigraron –legal e ilegalmente– unos cien beisbolistas, muchos de ellos con la vista fija en un contrato con Grandes Ligas.
Entre los últimos peloteros cubanos que abandonaron un equipo nacional para jugar en EE.UU. están los hermanos Yulieski y Lourdes Gourriel, el primero de ellos considerado por muchos como el mejor de ese deporte en la Cuba actual.