fuente J rebelde Raiko martin

BAYAMO.- Cambió la historia porque fueron esta vez los representantes del occidente del país quienes impusieron su ley en el Juego de las Estrellas correspondiente a la presente temporada beisbolera. En el estadio Mártires de Barbados de esta ciudad, los dirigidos por Víctor Mesa castigaron a los lanzadores del este, para así asegurarse un triunfo con pizarra de 9-4 que les garantizó el desquite por la derrota en la anterior versión de esta fiesta.

Como en la jornada sabatina, miles de granmenses llenaron el graderío del embellecido parque para disfrutar además de la final del derby de jonrones, en el que el ídolo local Alfredo Despaigne aspiraba a su primera corona.

Pero antes del esperado duelo de artilleros hubo espacio para la solemnidad y el reconocimiento. Como se había anunciado, entre las actividades programadas estuvo la exaltación de diez nuevos miembros de lo que hasta el ano 1961 fue conocido como el Salón de la Fama, y al cual las autoridades del béisbol cubano han rebautizado como el Salón de las Glorias.

Mientras fueron leídos sus nombres y una breve síntesis de su palmarés, cinco miembros del Comité Seleccionador recogieron las placas acreditativas a nombre del árbitro Amado Maestri, y los jugadores Esteban Bellán, Conrado Marrero, Camilo Pascual y Orestes «Minnie» Miñoso, escogidos entre aquellos que brillaron antes de 1959.

Acto seguido, recibieron los honores Omar Linares, Luis Giraldo Casanova, Orestes Kindelán, Braudilio Vinent y Antonio Muñoz, quienes sobresalieron por sus actuaciones en nuestras series nacionales.

Después de la cerrada ovación a los nuevos distinguidos, comenzó la lucha por la supremacía entre los sluggers que animaron la final del derby de jonrones. Un día antes el inicialista de Industriales Alexander Malleta, y el jardinero santiaguero Alexei Bell, habían asegurado el reto a Despaigne.

Abrió la tanda el indómito con par de vuelacercas seguidos en sus dos primeros swines, pero fue fallando una tras otra sus oportunidades hasta consumir los seis intentos fallidos. Luego, Malleta estuvo a punto de irse en blanco, pero después de cinco swines sin éxito, logró igualar el par de estacazos conectados por Bell. Y ahí terminó.

Quedó la escena lista para que Despaigne complaciera a sus seguidores y sus dos primeros batazos sobrepasaron los límites del jardín izquierdo. Pero la incertidumbre llegó cuando falló cinco intentos sucesivos. En el octavo la pelota tomó el vuelo necesario para caer en el graderío y se acabó la puja.

Ya en el partido entre las constelaciones de ambos extremos de la Isla, las del oeste hicieron la diferencia con un racimo de cinco anotaciones en el sexto episodio. Antes, habían pisado el home en cuatro ocasiones, todas gracias a la oportunidad, madero en ristre, de Lourdes Yunielki Gourriel, quien bateó de 5-3. El infilder de Industriales propulsó las tres primeras con un cuadrangular por la mano contraria, y la otra con cañonazo seco a la pradera central.

Por los perdedores los más destacados a la ofensiva fueron Bell con par de hits en igual cantidad de turnos y un remolque, y el local Yordanis Samón, autor del otro cuadrangular de la tarde.