El miércoles en la noche en el Isidoro García de Mayagüez, el derecho Jorge Martínez se remontó a su patria y sintió como si hubiese estado lanzando para sus Cocodrilos de Matanzas de la Serie Nacional de Béisbol de Cuba, solo que eran los colores de los Cangrejeros de Santurce los que defendía y a los Indios a los que blanqueaba.

El derecho de 29 años tuvo esa noche la mejor demostración de un lanzador en esta temporada de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC) cuando, luego de permitir un hit al primer bateador que enfrentó -Irving Falú- procedió a amarrar los bates de los Indios durante ocho entradas en las que dio sólo un boleto, ponchó a siete y retiró de forma seguida a los últimos 20 bateadores que enfrentó, para llevarse el triunfo.

“Me sentí como en Cuba”, dijo Martínez un día después. “Allá incluso tuve un ‘no hitter’ (contra los Industriales de la Habana en la campaña 2008-09) y tiré varios partidos de un hit, por lo que el juego (del miércoles) me recordó mucho eso. Fue un día especial. A mi equipo le hacía mucha falta y sabía de lo que se trataba el juego. Sé que la ofensiva no está en su mejor momento y había que ganar con pocas carreras”.

Con la actuación de esa noche, Martínez, quien salió legalmente de Cuba en julio con su esposa y reside en Miami, dejó su marca en la LBPRC en 3-3 y su efectividad en 1.86. Ha ponchado a 28 en las 38.2 entradas en que ha trabajado para los santurcinos.

“Me sentía súper bien, estaba colocando los pitcheos donde quería y todo mi repertorio estaba a la orden. He tirado otros buenos partidos, pero el del miércoles creo que se debió a que he venido cogiendo entradas en la liga y he ido conociendo a los bateadores, que es importante. Al conocerlos, soy un mejor pitcher”, indicó Martínez, quien lanzó su último partido en Cuba en junio durante la serie final en la que su equipo de Matanzas cayó ante los Naranjas de Villa Clara.

Poseedor de un arsenal que incluye recta, slider, sinker y cambio “que tiro en cualquier conteo, pero con diferentes ángulos”, Martínez aseguró que el proceso de adaptarse a su primera liga profesional no ha sido difícil dado a dos factores: la calidad de los peloteros que enfrentó en Cuba, que describió como “tremendísima”, y la acogida que ha sentido de parte de los Cangrejeros y de los puertorriqueños.

Martínez es elegible para ir al sorteo de las Grandes Ligas en junio próximo.

“Ya mandamos los papeles y todo están en orden. Siempre he dicho que me concentro en lanzar bien donde estoy. Ahora estoy aquí y en esto estoy enfocado”, dijo Martínez.

“Me siento muy bien estando aquí. Siempre Cuba y Puerto Rico han sido dos países que se han llevado muy bien. Al llegar, mi equipo me ha dado una tremenda acogida y eso ha hecho más fácil mi estancia porque para nada es secreto que los peloteros cubanos dondequiera que vamos siempre estamos solos, no tenemos la familia, no tenemos la posibilidad de regresar tan rápido sino que estamos fuera siempre. Y el llegar a un equipo y que te acojan así como lo ha hecho Santurce ayuda mucho”, finalizó.