El ajedrez que representa la temporada muerta en el béisbol de las Grandes Ligas tiene a los Medias Rojas en una posición ventajosa para hacer una gran jugada. Luego de firmar a Hanley Ramírez y a Pablo Sandoval con contratos millonarios, tienen en su poder una pieza de gran valor que podría reportarle a ese club una ficha más, en ese deseo por repotenciar su cuerpo de lanzadores.

Se trata del jardinero cubanoYoenis Céspedes, quien no deja de ser un jugador atractivo para cualquier divisa con la necesidad de alinear a un pelotero dotado de varias herramientas. Siempre resulta un gusto ver jugar a Céspedes, porque cuenta con atributos tanto al ataque como a la defensa, que lo convierten en un show para la afición.

Los Medias Rojas tienen una ofensiva poderosa, pero con un superávit en sus jardines, sobre todo si se toma en cuenta que Ramírez no jugará como torpedero debido a la presencia del curazoleño Xanders Bogaerts, sino como patrullero izquierdo. Eso convierte en un terreno sumamente poblado a las praderas de ese conjunto, que tienen en su nómina a Daniel Nava, Shane Victorino, Jackie Bradley, Allen Craig y al también cubano Rusney Castillo.

En Boston buscan con urgencia un lanzador abridor. Se sabe que durante los últimos días están en dura competencia por firmar al zurdo Jon Lester (curiosamente por quien recibieron a Céspedes), aunque la pugna ha sido alta, particularmente con los Cachorros de Chicago, que le habían ofrecido al zurdo una gran cantidad de dinero, lo que le complica las cosas a los patirrojos, dado que de excederse en cuanto al dinero tendrían que pagar un impuesto al lujo.

A todas estas, los Medias Rojas tienen en Céspedes la pieza que podría servir de anzuelo para el movimiento necesario. Las primeras conversaciones han apuntado hacia los Tigres de Detroit, que requieren de un jardinero. Se había hablado del interés por parte de los Nacionales de Washigton, quienes tienen en el mercado a Jordan Zimmermann y Doug Fister para poder firmar un jardinero. Por su parte los Filis de Filadelfia también han ofrecido a Cole Hamels.

Céspedes está en el último año de su contrato de 36 millones de dólares. Para la campaña de 2015 cobrará 10,5 millones de dólares, lo que le colocaría dentro de un grupo de peloteros no tan costosos para un equipo. El interés podría subir siempre y cuando algún club lo considere útil para ayudar a ganar juegos y que valga la pena desprenderse de un lanzador por él.