En Cuba hablar hoy de pelota se torna complicado y hasta tedioso, pero soy de las que prefieren ir a la mata para detectar la raíz y luego intentar enderezar el tronco.

“Angélica, lo más importante es lograr el consenso. Unir a la familia del béisbol cubano”, me dice enfático Ernesto Reynoso, director nacional de la disciplina desde hace muy poco tiempo.

Hombre con la naturalidad y sencillez características de los pinareños, comienza la conversación con detalles del recorrido por provincias que se hará a partir de este lunes y hasta el cinco de diciembre.

“El propósito es identificar propuestas que contribuyan al desarrollo gradual del béisbol cubano. El primer segmento abarcará de Guantánamo a Cienfuegos, y después cubriremos occidente, mayoritariamente a razón de dos encuentros diarios.

“Existe un documento base, conformado con el ánimo de conducir los intercambios, pero ningún tema que despierte interés será vetado, e insistimos en que el único objetivo es escuchar para tomar notas y poner en manos de los especialistas el resumen del que emergerán la identificación de las tendencias. Los problemas sabemos que están. Lo que necesitamos son sugerencias.

“Por supuesto que entre los asuntos previstos está la estructura de la Serie Nacional, y como en los restantes lo que opine el pueblo se tendrá en cuenta.

“Existe un proyecto, ya discutido con las provincias desde el pasado año, pero las definiciones solo llegarán luego de este proceso.

Otro tema llamado a ganar protagonismo es el de los juegos a las dos de la tarde. Según Reynoso, la cuestión va en dos direcciones: algunas instalaciones no tienen luminarias, a lo que se suma la situación energética durante esta última etapa.

“Ya hicimos un levantamiento en el país y tenemos dominio de la disponibilidad de los territorios. El caso de Camagüey es bien conocido, pues además del problema energético, no hay luces y la posición del terreno tampoco favorece.

“No obstante, como ya informamos, decidimos sellar los partidos por oscuridad y continuarlos al día siguiente.

“En los debates estarán presentes también lo relacionado con la reserva deportiva, contrataciones, la selección de talentos, el rescate de activistas y entrenadores en las áreas. Asimismo, el horario de las prácticas y las dificultades de implementos y materiales”.

Después de ese recorrido, asegura Reynoso, se trazará una estrategia concreta, buscando un resultado a corto, mediano y largo plazos, en el cual todavía se trabaja.

“Confiamos en que el proceso tribute a nuevas proyecciones. El diseño de 2020 existe, aunque evidentemente hay que perfeccionarlo. En la etapa del Premier 12 se implementó, pero no fue suficiente”.

—¿La 59 Serie Nacional?

—Va siendo competitiva, los seis equipos tienen posibilidad de acceder a los play-off semifinal y final y se mantiene la asistencia de público. A diferencia de otras series, se ha visto el despunte de selecciones como Camagüey y Cienfuegos.

“Durante el Premier 12, como estaban en el torneo miembros del equipo Cuba, se buscó la variante de suplir con refuerzos para mantener el espectáculo, un propósito que consideramos cumplido. Ahora se mantienen cinco refuerzos por conjunto como en anteriores temporadas.

“Han surgido contratiempos como el de la subserie Industriales-Las Tunas. Una afección diarreica aguda afectó a parte del plantel de la capital, e inmediatamente se realizó la valoración médica. Se profundiza en las causas que pudieron provocarla. Los implicados han ido saliendo de la situación y ya el juego se recuperó".

—¿Del Premier 12 se ha hablado mucho, pero, de todos modos vale la pena conocer sus consideraciones?

—Evidentemente no se logró el objetivo, que era pasar a la Súper Ronda. El partido con Canadá, que estuvo una por cero hasta el séptimo inning, terminó por decidir.

“Cuba, Australia y Canadá quedaron empatados con una victoria y dos reveses. No avanzamos por diferencia de carreras, pues nuestra ofensiva fue excesivamente pobre.

“Durante los choques de preparación en China Taipéi se demostró un determinado nivel, pero en la competencia fue diferente. Se bateó para.163, con solo 16 hits. El pitcheo otorgó demasiadas bases por bolas (17) y nuestros bateadores recibieron solo cuatro.

“Hubo imprecisiones a la defensa aunque de modo general estuvo en 981. Al conjugar los renglones del juego, más la impaciencia detrás del plato, y el escaso empleo de la velocidad en función de la ofensiva se explica el resultado adverso”.

—¿Cree que faltaron cambios oportunos en el line- up?

“Se respetó la decisión del cuerpo técnico, a partir de que era un torneo corto y solo tres juegos para clasificar. Hay criterios alrededor de ese asunto porque todos los cubanos de una forma u otra conocemos de béisbol. En realidad no se hicieron muchos movimientos. Sabemos que es una de las cosas que está en el estado de opinión de la población”.

—¿Entre los criterios de la población figura también el hecho de que los peloteros contratados en Japón debieron haberse incorporado a los entrenamientos de Taipéi?

—Al terminar su campeonato con los Halcones de SoftBank: Alfredo Despaigne, Yurisbel Gracial y Liván Moinelo se quedaron entrenando en Japón. Fueron pocos días, aunque sabemos que no es lo mismo entrenar que jugar. A pesar de ello, creo que eso no estuvo entre las principales causas de sus rendimientos y el revés de Cuba”.

Con espíritu positivo-recalcó el comisionado-  que quedan dos oportunidades para los Juegos Olímpicos de Tokio.

“Del 22 al 26 de marzo es el preolímpico en Arizona, Estados Unidos, que va a ser una competencia muy fuerte. En el grupo de Cuba (B) estarán además Canadá, Venezuela y Colombia. El torneo otorgará un solo cupo para la Olimpiada y dos rumbo al último clasificatorio, previsto en Taipéi de China del primero al cinco de abril”.

Con vistas a esas lides se prevé otra etapa de preparación corta, teniendo en cuenta el tiempo que haya cuando se regrese de la Serie del Caribe.

“Habría que ver cuántos peloteros de esa preselección asistirían y a cuántos les serviría de preparación. Luego, empezaría la concentración para enfrentar el reto.

“Hasta el momento, a nivel mundial hay solo cuatro clasificados: Japón, Corea del Sur, México e Israel. Es un hecho que el nivel del resto de los equipos ha aumentado y nosotros necesitamos elevar el nuestro”, afirma Reynoso.

—¿Qué se ha pensado en cuanto a la contratación de entrenadores cubanos en el exterior?

—El acuerdo que se firmó con la Confederación Mundial de Béisbol y Sóftbol, contempla impulsar ese frente, vital para adquirir elementos que después se pongan en práctica en Cuba.

“Tenemos que superarnos en lo relacionado con la ciencia aplicada al béisbol. El mundo entero lo hace, nosotros tenemos que insertarnos. En el Premier, Alfredo Ríos nos ayudó mucho con las estadísticas y otros aportes desde la sabermetría. Debemos llegar a la competencia con el contrario estudiado, y luego ahí, continuar observándolo para ganar seguridad.

“Los que amen al béisbol, que somos todos los cubanos, pueden aportar. Queremos retomar los buenos ejemplos de personas, que han dirigido antes que yo.

“En las categorías infantiles se vinculan padres, árbitros, técnicos, prensa. Podríamos hablar de otros niveles, en fin, todos lo que pudieran sumarse para rescatar ese amor que nos permita salir de este momento adverso.

“No solo es un problema de estructura, de deserciones, de una justificación. Hay que buscar todos los resortes para elevar el nivel de la pelota cubana. Eso lo espera Cuba y nosotros trabajaremos por ello”, concluyó Reynoso.