No superó esta vez los límites, pero el duelo de este jueves entre Matanzas y Villa Clara repitió la dosis de tensión que su predecesor, y de paso atizó la lucha que se vive por estos días para completar el cuadro de semifinalistas en la presente Serie Nacional.

De nuevo se convirtieron los lanzadores, y sobre todo los de segunda línea, en los pilares del escenario donde se vivió esta batalla. Del lado yumurino el refuerzo santiaguero Alain Delá cubrió el mismo tercio que el local Yasmani Hernández Romero sin diferencias notables.

A partir de entonces, los relevistas Lázaro Blanco —uno de los «repescados» de la Segunda División a última hora— y el naranja Yosvani Pérez tensaron el pulso hasta el decisivo noveno capítulo.

Antes, ambos estrategas habían intentado infructuosamente inclinar la balanza desde sus particulares visiones. Aunque hay que reconocer que fue el alto mando matancero quien más cerca estuvo de cerrar el lazo con una envidiable velocidad en función de la ofensiva.

Pero fue el antesalista visitante Yurisbel Gracial quien dictó sentencia con par de imparables impulsadores. El primero de ellos llegó en el quinto episodio tras un doble de Guillermo Heredia —llegó a tercera por sacrificio de Ariel Sánchez— y sirvió para equilibrar la pizarra.

El otro, y sin dudas el más importante, fue el último de un trío de hits que soportó el perdedor Diosdani Castillo en la novena entrada y propulsó la carrera que no pudieron remontar los dueños de casa frente al salvador Maikel Martínez.

Este resultado dejó a la tropa de Víctor Mesa muy cerca de la clasificación y de algo tan importante como es el hecho de evitar el pase como cuarto lugar y tener que cruzarse en semifinales con los aplastantes Elefantes de Cienfuegos.

El elenco sureño no pudo esta vez imponer su paso en territorio vueltabajero, donde los pativerdes volvieron a marcar en la apertura gracias al vuelacercas 17 de Yosvani Peraza que encontró a un compañero en circulación.

Pero la estocada más mortífera de los anfitriones llegó en el tercer episodio cuando Luis Alberto Valdés le sacó la pelota al estelar zurdo Norberto González con dos hombres a bordo. Luego, un boleto con las bases repletas del rescatista Leorisbel Sánchez redondeó el racimo de cuatro que fue insalvable.

También bajo el sol de este jueves continuó la mala racha de los Gallos espirituanos, quienes solo han podido ganar uno de sus últimos cinco partidos. No obstante, la derrota villaclareña les abrió finalmente las puertas de la postemporada.

Esta vez los pineros invocaron a la diosa fortuna que tantas veces le dio la espalda cuando caían una y otra vez por la mínima diferencia, y cambiaron la tendencia.

Todo sucedió en el octavo capítulo, cuando ya no estaba sobre el box el diestro yayabero Ismel Jiménez, quien había dejado un inning antes a su equipo con ventaja de una y aspiraba a llegar a su triunfo 14.

La misión de llevar la nave hasta buen puerto fue encomendada a Yasiel Sierra, pero no pudo evitar ni el empate ni la carrera decisiva, esta impulsada por cañonazo de Yoise Su después de que el mentor Yosvani Aragón ordenara la transferencia intencional de Andy Ibáñez para llenar las bases y facilitar así el out.

Aunque no fue a los libros, impecable fue la actuación del artemiseño devenido pinero Yulieski González, quien trabajó ocho innings de forma excelente.