Del pantano y del bosque salieron esta tarde de sábado los Cocodrilos matanceros y los Leñadores tuneros para derrotar a sus respectivos rivales y continuar asediando, ahora con más fuerza, a las Avispas santiagueras, quienes tuvieron que conformarse con una división de honores en su cuartel general del Guillermón Moncada ante unos impetuosos Leones capitalinos.

La derrota de los Toros camagüeyanos-quinta en sus últimos seis desafíos-los ha lanzado hasta el cuarto escaño del torneo y ha llenado de dramatismo la tabla de posiciones cuando apenas resta una subserie particular para cerrar el segundo tercio de competencia de esta fase definitoria.

Un bambinazo de Erisbel Arruebarruena y una excelente labor monticular de Yamichel Pérez le dieron la victoria 2-1 a los yumurinos frente a la tropa de Miguel Borroto en los predios del Victoria de Girón.

Pérez apenas permitió una anotación en la misma primera entrada y se mantuvo en el box el juego completo mientras salía ileso de once imparables y ponchaba a ocho contrarios para lograr su éxito número doce de la campaña, líder en ese departamento.

Arruebarruena desapareció la pelota en el sexto episodio con un compañero en circulación para marcar las carreras que necesitó el zurdo de Taguasco para proclamarse victorioso.

La derrota fue a los récords de Yosimar Cousin (4-5), explotado en esa misma entrada después de tolerar su séptimo indiscutible y haber regalado su segundo boleto de la tarde.

Eduardo Blanco por los de casa y Alexander Ayala por los visitantes, se anotaron un trio de sencillos cada uno en el partido.

Una tremenda concurrencia que desbordó las tribunas del Guillermón fue testigo de una doble jornada donde sus Avispas y los Leones capitalinos se repartieron victorias después de elevar las tensiones en ambos desafíos.

A primer turno, los de casa marcaron cinco veces en las últimas dos entradas para llevarse el triunfo 8-5, en un choque donde los visitantes cometieron tres errores al campo y sus lanzadores regalaron siete bases por bolas y cometieron tres wild pitch.

Adriel Labrada (5-2) y el emergente Reynaldo Lamothe (1-1) fueron claves en la ofensiva de los orientales al remolcar cada uno un par de carreras en las postrimerías del partido.

Adrián Sagarra alcanzó su primer éxito de la temporada con un relevo de una entrada donde le anotaron una carrera sin permitir hits y Pedro Álvarez sufrió su segunda derrota con la camiseta azul al soportar tres limpias en apenas 0.2 capítulos trabajados.

Frederich Cepeda se fue de 3-3 con par de remolques por los derrotados.

En el segundo duelo, la tropa de Rey Vicente Anglada tomó desquite 6-5 para asegurar la serie particular de esta semana.

Yandi Molina (3-6) siguió mostrando indicios de recuperación y con un excelente relevo se llevó la victoria al contener a sus rivales durante 5.1 entradas, aceptando solo cuatro hits y permitiendo una sola anotación, mientras Andy Rodriguez salvó su partido número 13 sacando los último cuatro outs del desafío.

Jorge Luis Barcelán disparó tres cañonazos en cuatro turnos para impulsar dos carreras y Yoandry Urguellés sonó par de dobletes que remolcaron también a dos azules para el plato.

Yordanis Samón conectó cuatro imparables en diez apariciones a la caja de bateo y se reafirmó como el líder ofensivo de la campaña con 462 de average.

Por los anfitriones, Rudens Sánchez se llevó las cercas en la misma primera entrada que completó un racimo de cuatro anotaciones y sacó del box al abridor industrialista Marcos Ortega.

La derrota la encajó Carlos Santiesteban (1-3) al permitir las últimas dos carreras de los visitantes en 2.1 episodios laborados.

Por último, los Leñadores de Pablo Civil afilaron las hachas y derribaron a los Elefantes por segunda ocasión en tres días ante una afición adversa en el 5 de Septiembre, esta vez con pizarra final de 6-3.

Danel Castro y Yordanis Alarcón sacudieron estacazos de vuelta completa para redondear un ataque de once imparables, borrando una desventaja de tres carreras en el marcador y el veterano Yoalkis Cruz hizo un relevo efectivo para anotarse el éxito dominando a doce de los trece bateadores que enfrentó a partir del sexto capítulo.