Los Alazanes de Granma van a toda máquina en la Serie del Caribe de béisbol de Culiacán-2017 y ya tienen asegurado su boleto a semifinales, tras derrotar hoy por 6-1 a los boricuas Criollos de Caguas.

Todos hablan maravillas de los cubanos tras sus demostraciones ante los dominicanos Tigres del Licey, 10 veces monarcas del certamen, y ahora frente los Criollos, tricampeones.

Pura calidad en todos los órdenes de juego, además de mostrar dinamismo, concentración y soltura en cada acción, demostraron hoy los Alazanes para imponerse sin grandes problemas a los puertorriqueños.

Cuba abrió delante en el marcador con una carrera en el final del segundo inning, remolcada por Carlos Benítez con sencillo a la pradera central, después de dos outs, ante el zurdo Jarret Leverett.

Los boricuas reaccionaron y empataron en el principio del tercero, gracias a elevado de sacrificio de Eddie Rosario que impulsó a Jonathan Morales desde tercera base.

Pero el empate fue apenas un espejismo porque los cubanos volvieron a tomar el control de las acciones en ese tercer episodio con un ramillete de tres carreras, en el que influyeron sencillo impulsor de Alfredo Despaigne, doblete remolcador de William Saavedra y sacri-fly de Benítez.

Con la ventaja 4-1, el abridor de los Alazanes, el derecho Vladimir García, trabajó con mayor tranquilidad y sin muchos contratiempos para dominar, aunque en el principio del séptimo capítulo debió ser sustituido por molestias físicas en su pierna derecha.

En su lugar entró el relevista zurdo Liván Moinelo, una joya del pitcheo cubano de apenas 22 años, campeón en la Serie del Caribe de San Juan-2015 con su club de origen, los Vegueros de Pinar del Río.

Y Moinelo cumplió a plenitud al lanzar el séptimo y el octavo capítulos sin admitir libertades, mientras sus compañeros seguían ampliando la diferencia hasta convertirla en irremontable.

En el final del séptimo, los Alazanes pusieron el partido 6-1, gracias a un cuadrangular electrizante, de línea, a lo profundo de los jardines izquierdo y central, de William Saavedra con un hombre en circulación.

El derecho Miguel Lahera tiró impecable el noveno inning para certificar el éxito.

El crédito de la victoria correspondió a García, por su labor de seis entradas completas con dos ponches propinados y apenas una carrera permitida.

Con este resultado, Cuba fijó en 2-0 su balance de victorias y derrotas y aseguró su pase a la ronda de cruces, mientras Puerto Rico quedó al borde del abismo, con pleno de derrotas en tres presentaciones (solo un triunfo sobre el Licey los salvaría).

Para mañana están previstos los duelos Cuba-Venezuela y Dominicana-Puerto Rico.