Agotadas las fechas, no así el calendario de juegos, de la primera parte de la 55 Serie Nacional, que deja en suspenso a cinco equipos enrolados en la clasificación para el segundo segmento de ocho selecciones, el béisbol cubano abre el paréntesis anunciado para cubrir las exigencias del estreno internacional del Premier 12, en Taipei de China y Japón, entre el 8 y el 21 próximos.
Pasada también la tormenta del anuncio de los 28 peloteros que nos representarán en ese certamen, acerquémonos a las primeras polémicas que vienen suscitando la justa asiática, las cuales pasan por el severo prisma con que más que mirar se escudriña a la selección nacional. Si es o no un evento inferior a los Clásicos Mundiales o que Cuba se halla en el grupo más fácil, lo cual le daría mayores posibilidades de incluirse entre los cuatro grandes de las semifinales, son algunas de las observaciones precontienda.
Está claro que el Premier 12 (P12) no es un Clásico.Uno —el que se avecina— es organizado por la Federación Internacional de Béisbol (IBAF), que en su aspiración de regresar a los Juegos Olímpicos se ha fundido con la de softbol bajo el rótulo de Confederación Mundial de Béisbol y Softbol (WSBC), y el otro corre a cargo de la Major League Béisbol (MLB) o Grandes Ligas. Sin embargo, eso no quiere decir que se despeñe por el precipicio de la falta de calidad. Un experimentado colega, el dominicano Enrique Rojas, ha expresado que incluso así el P12 será un evento muy parecido a su predecesor, y cita un acuerdo entre la IBAF y las ligas mayores de Japón (NPB por sus siglas en inglés), mediante el cual participarían los mejores exponentes nipones.
Según la nómina japonesa inscrita eso ya es una realidad y lo mismo hicieron Sudcorea y Taipei de China, los tres planteles con las estrellas de sus ligas profesionales. Canadá, acudirá con 17 de los campeones panamericanos en el pasado mes de julio en Toronto; Holanda, con 15 de los que vencieron y eliminaron a la Mayor de las Antillas en el III Clásico Mundial, en el 2013; Estados Unidos, matriculó un conjunto plagado de talentos protegidos por las organizaciones de la MLB.
Aunque Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela se han resentido en sus listados por la coincidencia en fecha de sus torneos invernales, lograron llevar a los protocolos del P12, plantillas de nivel con peloteros de experiencia ligamayorista. México es una incógnita por la crisis de poder en el béisbol de ese país, donde la Federación beisbolera ha sido desconocida por el órgano gubernamental del deporte CONADE. E Italia, al menos en el papel, no alcanza el abolengo del resto de las escuadras.
Esas circunstancias, a nuestro modo de ver, y contrario a lo que se viene analizando, hacen al grupo A más difícil. Canadienses, holandeses, boricuas, taipeianos e italianos, por ese orden, serán los rivales de Cuba en esa zona, que al igual que la B da cuatro plazas a cuartos de finales, fase que en un solo partido decidirá a los cuatro semifinalistas. La historia reciente ante esos colectivos muestra la complejidad.
Canadá es prácticamente el mismo equipo que venció 3-1 a los cubanos en Toronto y cuenta con el hombre que solo toleró tres imparables en seis completas, el derecho Shawn Hill y repite también su escudero Tyler Oneill, autor del jonrón que impulsó el trío de anotaciones. Holanda es muy similar a la Misión Imposible de las últimas lides internacionales y Taipei, además de la ventaja a domicilio, está preñada de figuras de primerísimo nivel en la liga japonesa y en la doméstica.En nuestra opinión, a juzgar por lo presentado por Puerto Rico e Italia, serían los candidatos a no avanzar.
Por similar razón, Japón, Sudcorea, Estados Unidos y Venezuela, deben ser superiores a República Dominicana y México. Si así ocurriera, a los dirigidos por Víctor Mesa les sería incomodo un choque de muerte súbita ante japoneses o sudcoreanos, razón por la cual la exigencia en el A es mayor en busca de acomodarse sobre el primero y el segundo escaños para medirse en el cruce presumiblemente con Venezuela o Estados Unidos, lo que no quiere decir que sean manjares. A la calidad de los roster en la llave A, habría que agregarle esta condición para hacer más viable el camino.
Creo que se ha reunido un conjunto con varias posibilidades en el orden táctico, con peloteros de mucho ímpetu y opciones que tienen en cuenta los más altos requerimientos, como el que tendrá frente a Taipei de China. Aunque el tiempo no pasa por gusto, si alguien viene pintado para ese choque es uno de los cuestionados, Danny Betancourt, quien en el 2013 dejó en tres jits sin carreras a los ahora anfitriones en un juego de todo o nada, en la segunda fase del III Clásico Mundial.
Sobre esas demandas trabajan en el Latinoamericano los 28 seleccionados cubanos que encararán un P12 que si bien no es un Clásico Mundial, si es complejo de abordar.
Pasada también la tormenta del anuncio de los 28 peloteros que nos representarán en ese certamen, acerquémonos a las primeras polémicas que vienen suscitando la justa asiática, las cuales pasan por el severo prisma con que más que mirar se escudriña a la selección nacional. Si es o no un evento inferior a los Clásicos Mundiales o que Cuba se halla en el grupo más fácil, lo cual le daría mayores posibilidades de incluirse entre los cuatro grandes de las semifinales, son algunas de las observaciones precontienda.
Está claro que el Premier 12 (P12) no es un Clásico.Uno —el que se avecina— es organizado por la Federación Internacional de Béisbol (IBAF), que en su aspiración de regresar a los Juegos Olímpicos se ha fundido con la de softbol bajo el rótulo de Confederación Mundial de Béisbol y Softbol (WSBC), y el otro corre a cargo de la Major League Béisbol (MLB) o Grandes Ligas. Sin embargo, eso no quiere decir que se despeñe por el precipicio de la falta de calidad. Un experimentado colega, el dominicano Enrique Rojas, ha expresado que incluso así el P12 será un evento muy parecido a su predecesor, y cita un acuerdo entre la IBAF y las ligas mayores de Japón (NPB por sus siglas en inglés), mediante el cual participarían los mejores exponentes nipones.
Según la nómina japonesa inscrita eso ya es una realidad y lo mismo hicieron Sudcorea y Taipei de China, los tres planteles con las estrellas de sus ligas profesionales. Canadá, acudirá con 17 de los campeones panamericanos en el pasado mes de julio en Toronto; Holanda, con 15 de los que vencieron y eliminaron a la Mayor de las Antillas en el III Clásico Mundial, en el 2013; Estados Unidos, matriculó un conjunto plagado de talentos protegidos por las organizaciones de la MLB.
Aunque Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela se han resentido en sus listados por la coincidencia en fecha de sus torneos invernales, lograron llevar a los protocolos del P12, plantillas de nivel con peloteros de experiencia ligamayorista. México es una incógnita por la crisis de poder en el béisbol de ese país, donde la Federación beisbolera ha sido desconocida por el órgano gubernamental del deporte CONADE. E Italia, al menos en el papel, no alcanza el abolengo del resto de las escuadras.
Esas circunstancias, a nuestro modo de ver, y contrario a lo que se viene analizando, hacen al grupo A más difícil. Canadienses, holandeses, boricuas, taipeianos e italianos, por ese orden, serán los rivales de Cuba en esa zona, que al igual que la B da cuatro plazas a cuartos de finales, fase que en un solo partido decidirá a los cuatro semifinalistas. La historia reciente ante esos colectivos muestra la complejidad.
Canadá es prácticamente el mismo equipo que venció 3-1 a los cubanos en Toronto y cuenta con el hombre que solo toleró tres imparables en seis completas, el derecho Shawn Hill y repite también su escudero Tyler Oneill, autor del jonrón que impulsó el trío de anotaciones. Holanda es muy similar a la Misión Imposible de las últimas lides internacionales y Taipei, además de la ventaja a domicilio, está preñada de figuras de primerísimo nivel en la liga japonesa y en la doméstica.En nuestra opinión, a juzgar por lo presentado por Puerto Rico e Italia, serían los candidatos a no avanzar.
Por similar razón, Japón, Sudcorea, Estados Unidos y Venezuela, deben ser superiores a República Dominicana y México. Si así ocurriera, a los dirigidos por Víctor Mesa les sería incomodo un choque de muerte súbita ante japoneses o sudcoreanos, razón por la cual la exigencia en el A es mayor en busca de acomodarse sobre el primero y el segundo escaños para medirse en el cruce presumiblemente con Venezuela o Estados Unidos, lo que no quiere decir que sean manjares. A la calidad de los roster en la llave A, habría que agregarle esta condición para hacer más viable el camino.
Creo que se ha reunido un conjunto con varias posibilidades en el orden táctico, con peloteros de mucho ímpetu y opciones que tienen en cuenta los más altos requerimientos, como el que tendrá frente a Taipei de China. Aunque el tiempo no pasa por gusto, si alguien viene pintado para ese choque es uno de los cuestionados, Danny Betancourt, quien en el 2013 dejó en tres jits sin carreras a los ahora anfitriones en un juego de todo o nada, en la segunda fase del III Clásico Mundial.
Sobre esas demandas trabajan en el Latinoamericano los 28 seleccionados cubanos que encararán un P12 que si bien no es un Clásico Mundial, si es complejo de abordar.