A menos que se produzcan cambios de última hora –lo cual no sería nada sorprendente-, la Serie del Caribe 2019 tendrá modificaciones notables en su formato de competición y a Cuba le tocará ‘bailar con la más fea’.

La decisión de trasladar la sede a Panamá ha traído consigo un sexto equipo en liza, por lo cual ahora no habrá el tradicional round robin a una vuelta, sino dos grupos de tres contendientes cada uno.


Así, los Leñadores de Las Tunas fueron ubicados en la llave I junto a las poderosas selecciones de República Dominicana (Estrellas Orientales) y México (Charros de Jalisco). En la II, a priori mucho más asequible, lidiarán Puerto Rico (Cangrejeros de Santurce), Venezuela (Cardenales de Lara) y el plantel panameño (Toros de Herrera).

Según dieron a conocer representantes de la Confederación de Béisbol del Caribe, cada escuadra jugará dos veces contra sus acompañantes de grupo, y las que encabecen ambos apartados se enfrentarán por la corona regional en el estadio Rod Carew el día 10 de febrero.

Las razones que forzarían la introducción de variantes en este formato involucran a Venezuela y Cuba.

En el caso de los morochos, podrían declinar a última hora como protesta por el retiro de la sede a Barquisimeto, aunque de momento han confirmado su presencia.


Mientras, la parte cubana puede declararse inconforme con la exigencia de asumir todos los gastos de traslado, alojamiento y alimentación, algo que ocurrirá por primera vez en cerca de tres décadas debido a las atípicas circunstancias que han rodeado al evento en esta ocasión.