Uno de los grandes peloteros que podrían estar disponibles por el “precio correcto” durante esta temporada muerta es Yasiel Puig. De hecho, los Dodgers de Los Ángeles intentaron adquirir a Bryce Harper en agosto y, según reportes, el jardinero cubano era uno de los integrantes del grupo que enviarían los californianos a los Nacionales de Washington a cambio de la mencionada estrella. Si el “Caballo Loco” verdaderamente está en el mercado, podría ser una pieza excelente para un club con necesidades en el outfield.

Puig, quien cumplirá apenas 28 años el 7 de diciembre, entrará en su séptima campaña en las Grandes Ligas y salvo dos campañas bastante discretas, el slugger derecho tiene una carrera bastante interesante que ya cuenta con amplia experiencia de 58 juegos en postemporada.

Su desempeño en el terreno incluye un paquete tremendo de herramientas: poder, una defensa respetable, un brazo temible, velocidad en las almohadillas y una dosis notable de esa chispa que los anglosajones denominaron hustle.

Aparte, como punto a su favor, finalmente se ha alejado de situaciones que tanta polémica le generaron.

El nacido en Cienfuegos aún es una tremenda carta que tienen los Dodgers en su roster, dada su relación aporte/costo, pues este año (el que podría ser su último con los californianos) es el último de arbitraje, antes de poder declararse agente libre. Probablemente, su sueldo seguirá siendo bastante accesible por todo 2019 y ese siempre es un factor importante a la hora de evaluar un canje.

¿Qué ofrece Puig? En 2018 participó en 125 duelos y ligó para .267 de average, pero lo más interesante está en otros números: 21 dobles, 23 estacazos de vuelta completa, 63 carreras impulsadas y un OPS atractivo de .820.

Yendo más allá, a números más profundos, el ISO (una casilla que mide la frecuencia de extrabases) de Yasiel dio un salto impresionante en los dos últimos años. En 2016 estuvo en .153, pero quedó en .224 y .227 en 2017 y 2018, respectivamente. Esos dos últimos promedios son considerados excelentes según el portal FanGraphs.com.

También desde 2016, el citado toletero muestra una evolución notable en cuanto a las wRC+ (Weighted Runs Created Plus), una estadística que sirve para medir cuántas carreras creó un jugador en comparación con un pelotero regular.

Por defecto, el registro inicial es 100 y cada punto por debajo o por encima representa cuán mejor o peor es la figura con respecto a un jugador del montón, por así decirlo.

Puig pasó de exhibir wRC+ de 101 en 2016, de 117 en 2017 y 123 en 2018, lo que quiere decir que creó 23 por ciento más carreras que la media de la liga.

También este año fue el mejor para él en porcentaje de conexiones fuertes, con 38.4 %, el más alto de su trayectoria en la Gran Carpa y notablemente mejor que el de 2017 (32.9 %). Otro punto es que nunca antes había conectado tantas líneas: 21.3 por ciento, superior al 16.1 por ciento del año pasado.

Aparte de todo esto, el antillano ofrece una calidad ampliamente visible contra lanzadores derechos: .297/.357/.564/.921 y cuando se paró a batear en situaciones de alta presión (denominadas escenarios High Leverage) en 2018, ligó para .341, con un OPS de .1059 y 15 fabricadas en 41 oportunidades oficiales.

Durante el receso entre temporadas o en plena campaña, todo parece indicar que Puig podría estar en el punto más dulce de su carrera, en el momento perfecto: un año antes de ser agente libre y conseguir otro contrato millonario.