Diálogo con el mentor del equipo Cuba, categoría juvenil, que jugó frente a los norteños.

Con saldo de seis victorias y par de derrotas concluyó el tope de béisbol entre las selecciones nacionales juveniles de Cuba y Canadá, desarrollado del 4 al 10 de este mes en los estadios Victoria de Girón y el centenario Palmar de Junco, de la ciudad de Matanzas.

Fueron en las tres últimas jornadas en las que los visitantes lograron sus éxitos con marcadores de 9 carreras por 6, y 5-4, este último con la aplicación de la Regla de la IBAF, previo acuerdo.

Concluidos los juegos, que sirven de preparación a ambos equipos con miras al Campeonato Panamericano de la disciplina, de septiembre próximo en México, el mentor de los antillanos, Luis Cuba, ofreció declaraciones.

“Lo conveniente de estos topes es que ofrecen la oportunidad de prepararse en los individual y colectivo, ya que son peloteros jóvenes, necesitados del conocimiento y experiencia que se obtiene solo en el terreno, al medirse a otros conjuntos, en el caso nuestro a Canadá, uno de los fuertes en el área americana”, manifestó el experimentado preparador.

“Con miras a que todos alcancen un buen nivel técnico le dimos posibilidades a receptores, jugadores de cuadro, jardineros y lanzadores, y pudieron demostrar sus reales capacidades y talentos, y puedo asegurar que estamos listos para seguir la batalla”, señaló el mentor del seleccionado que en el 2013 obtuvo el tercer lugar en el Campeonato Mundial de China Taipei.

“Ganamos seis, pero no estoy satisfecho. El miércoles último perdimos, porque nuestro lanzador, el zurdo Cionel Pérez, luego de propinar 15 ponches y permitir solo un hit, no ganó debido a un error técnico (box) –dos outs y el bateador en dos strikes sin bolas–, que le costó anotara el corredor de tercera para empatar el juego. Luego perdimos 5-4 con la Regla IBAF, con otro pitcher. A esto hacía alusión cuando de ganar en conocimiento y experiencia hablaba anteriormente.”

Al evaluar la actuación general de su equipo, Cuba señaló entre lo más positivo del tope “la ofensiva y la actuación de los jardineros, entre estos a cuatro talentos de mucho porvenir, entre ellos Víctor Víctor Mesa y  Julio Pablo Martínez, de buenas manos y peligrosos madero en ristre”.

Teníamos referencia que en el equipo nacional cubano se prepara para el certamen Panamericano de la categoría en tierras aztecas, y que posee a varias figuras de alto poder  al bate, y lanzadores con velocidades de 88 a 90 millas por hora.

“Sí, es cierto, incluido los ya mencionados, aunque Víctor Víctor presentó una pequeña lesión y no quisimos forzarlo, porque no era necesario, lo mandamos a descansar y de tal forma lo preservamos para otros momentos. Y ya vieron a Jorge Oña, de La Habana, que batea, corre y tiene fuerza en el brazo.

“En el caso de Omar Estévez, este matancero, con 16 años de edad, consideramos que es un talento al que quedan tres años en la categoría. Debe trabajarse mucho con él, para pulirlo al máximo, y también con varios pitchers para mejorar el control, pues otorgaron demasiadas bases por bolas en el tope, y ello indica que hay problema con la mecánica de la especialidad.”

En relación con la defensa el mentor de los cubanos señaló que cumplieron su objetivo, estuvieron bien y tal comportamiento permite trabajar sobre todo en los aspectos técnicos que ahora no salieron bien.

Al preguntar sobre la asistencia de la Isla en el Panamericano de tierras aztecas, Luis Cuba señaló que “esperamos noticias de la Federación Cubana en cuanto a la participación nuestra en el certamen que será del 5 al 12 de septiembre próximo”.