Pinar del Río pudiera coronarse campeón del béisbol cubano si lograra vencer hoy a Matanzas en en sexto partido de la gran final del campeonato, algo de lo cual su capitán Donal Duarte se muestra convencido.

El veterano antesalista, inmerso en su temporada 13 con la elástica pinareña, destacó la importancia del triunfo en el quinto partido de la serie, en el que Pinar borró una desventaja 5-8 con tres carreras en el final del noveno inning, y más tarde dejó al campo a sus rivales, en el onceno capítulo, por jonrón en solitario de Osniel Madera.

Ese juego era muy importante, el que lo ganara daba un paso muy importante para ser campeón, nos tocó a nosotros y ahora tenemos la autoestima muy arriba, manifestó el infielder de 32 años.

Es uno de los partidos más intensos que he jugado en mi vida, se complicó mucho y estuvimos a punto de perder, pero nunca nos dimos por vencidos hasta darle vuelta, agregó Duarte, campeón nacional en la campaña 2010-2011, la número 50.

Durante ese desafío el mentor de Pinar del Río Alfonso Urquiola utilizó a todos sus jugadores disponibles, 27 en total, e incluso colocó a Duarte como receptor en el décimo capítulo, en un movimiento atrevido, pero que finalmente rindió frutos.

Siempre tengo disposición para hacer las cosas, da igual si es en tercera base o de receptor, cuando uno tiene disposición siempre salen bien las cosas, lo primero es el equipo, destacó Duarte, quien sustituyó en sus primeros años al mítico antesalista Omar Linares, considerado por muchos expertos como el mejor jugador de la historia del béisbol cubano.

Duarte admitió a Prensa Latina que "no he llegado en forma óptima a estos playoffs, aunque he impulsado algunas carreras (ocho). Pero eso es secundario, lo que hace falta es el triunfo del equipo, mientras eso pase yo me siento realizado.

Cuando uno no está bien debe jugar para el equipo, aportar, por eso me he sacrificado (con varios toques de pelota), para no "matar los rally" y adelantar a mis compañeros, abundó, al referirse a algunas jugadas de estrategia que, de encontrarse en buena forma deportiva, nunca hubiera realizado.

En 14 temporadas, Duarte exhibe porcentaje ofensivo de .311 y OBP de .393, además de mil 384 hits, 586 carreas impulsadas, 779 anotadas, 105 jonrones, y un promedio defensivo de .951.

Hoy día, en la gran final del 53 Campeonato, Pinar del Río se encuentra a una victoria de conquistar el título por décima vez en la historia de las series nacionales (1978, 1981, 1982, 1985, 1987, 1988, 1997, 1998, 2011, los seis primeros con el nombre de Vegueros), solo dos menos que Industriales, máximo acaparador de cetros.

En la Serie por la corona, los vueltabajeros perdieron los juegos uno (3-5) y cuatro (3-4), pero se impusieron en los desafíos dos (12-5), tres (7-3) y cinco (9-8), para tomar el control del enfrentamiento contra el Matanzas de Víctor Mesa, el mejor equipo de la temporada regular.

Para incluirse en la gran final, Pinar del Río debió remontar un 1-3 en la serie semifinal contra Industriales, con éxitos sucesivos en los choques cinco, seis y siete, un proeza que será recordada eternamente.