Muchos coinciden en que Cuba presenta una preselección sólida de cara al Campeonato Panamericano de béisbol, categoría Sub-23, en el cual nuestro país se jugará la clasificación mundialista para el certamen del orbe del próximo año.

Sin embargo, la ausencia del inicialista camagüeyano Leonel Segura ha motivado comentarios entre los aficionados, pues el zurdo fue líder de los bateadores de la última lid nacional Sub-23 (promedio de 438, 63 jits, 17 dobles), y en la ronda clasificatoria de la 57 Serie tuvo average de 308, con diez extrabases y 28 remolques para los Toros agramontinos. Además, Segura ha sido cerrojo en el primer cojín, con altos promedios defensivos.

Sobre el tema, Jesús Barroso, al frente de la Serie Nacional y uno de los miembros del cuerpo de dirección de la pre Sub-23, reconoció en diálogo con Granma la calidad de Segura, pero explicó que la inicial está cubierta por Norel González y Oscar Luis Colás.

«Esta no es una preselección propiamente dicha, porque no entrenaremos dos meses en busca de los mejores. Por eso, en algunas posiciones, llamamos a quienes consideramos deben integrar directo el equipo. No ha sido así en segunda o tercera, por ejemplo, pues no existe claridad respecto a los titulares.

«En primera, Norel debe ser el titular, porque nos aporta poder en el medio de la alineación, es un bateador del cual no podemos prescindir. Como suplente nos decantamos por Colás, quien además de jugar en la inicial y los jardines, puede lanzar, y es zurdo, algo que no abunda en nuestro staff», precisó Barroso.

Estos planteamientos tienen lógica, pero Norel solo jugó un partido en la inicial durante la primera ronda de la 57 Serie, mientras Segura se ha convertido en un especialista defensivo con aptitudes ofensivas. Eso debería pesar para, al menos, tenerlo en cuenta, como ocurrió meses atrás cuando se incluyó en el conjunto cubano al tradicional Torneo Interpuertos de Rotterdam.

EL CAMINO DE LA ESPECULACIÓN

Y la comidilla beisbolera de este lunes fue la sanción de una subserie a Víctor Mesa, o más bien el silencio de la Dirección Nacional de Béisbol (DNB) sobre los motivos del castigo. En la circular No. 1 de la segunda ronda de la 57 Serie, se expone que el mentor de Industriales cometió una indisciplina, pero no se explica de qué índole.

Como es lógico, cuando no se aclaran estos asuntos comienzan los rumores y esos corren como pólvora por la calle.

Pero a ciencia cierta, nadie tiene la verdad en las manos, y desde la DNB, donde sí saben lo que pasó, prefieren no aclarar el asunto, pues, según nos dijo vía telefónica Yovani Aragón, director nacional, en ninguna otra oportunidad se han develado los detalles de las indisciplinas de otros jugadores o managers.

En este punto, Aragón tiene razón. Casi nunca la DNB ha develado detalles sobre indisciplinas, pero, en cambio, sí han respondido en profundidad a la prensa sobre diversos hechos pasados. En esta oportunidad eso no ha sucedido, solo se ha incentivado la especulación, lo que viene siendo otro lanzamiento descontrolado en la gestión del organismo rector de la pelota cubana.

La Serie Nacional, si aspiramos a que se mantenga como el máximo espectáculo deportivo del país, no puede permitirse más fallos de este tipo, ni tampoco el secretismo o la falta de transparencia, males que restan credibilidad y despiertan la desconfianza del gran protagonista del show beisbolero: la afición.