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Israel sigue soñando en el Clásico Mundial de Béisbol 2017, el sorprendente equipo de medio oriente compuesto en su mayoría por jugadores estadounidenses con ascendencia judía logró uno de los más importantes logros en su historia deportiva al vencer a Cuba con pizarra de 1-4 en lo que es sin duda el resultado más sorpresivo en lo que va de certamen.
Con este triunfo el equipo israelí logra su primera victoria de segunda fase y complica a Cuba que no pudo reaccionar ante el buen orden del equipo hebreo que sacó el máximo provecho de las oportunidades de aumentar su ventaja en el marcador.
Los caribeños picaron adelante con jonrón solitario de Alfredo Despaigne en la parte alta del segundo episodio pero el buen control de Jason Marquis en la lomita maniató durante 5.2 innings a la toleteria cubana con cuatro ponches.
La novena de Israel igualó las acciones en la baja del cuarto cuando Ryan Lavarnway con doble al jardín izquierdo impulsó a Ike Davis hacía el home.
En la baja del sexto Zach Borenstein comandó la ofensiva con sencillo al jardín derecho para impulsar a Ty Kelly hacía la goma y luego Blake Gailen sonó doble impulsor para aumentar la ventaja israeií.
El propio Gailen impulsó otra carrera con toque sutil en la baja del octavo episodio y poner la pizarra con el definitivo 1-4.
Con este triunfo el equipo israelí logra su primera victoria de segunda fase y complica a Cuba que no pudo reaccionar ante el buen orden del equipo hebreo que sacó el máximo provecho de las oportunidades de aumentar su ventaja en el marcador.
Los caribeños picaron adelante con jonrón solitario de Alfredo Despaigne en la parte alta del segundo episodio pero el buen control de Jason Marquis en la lomita maniató durante 5.2 innings a la toleteria cubana con cuatro ponches.
La novena de Israel igualó las acciones en la baja del cuarto cuando Ryan Lavarnway con doble al jardín izquierdo impulsó a Ike Davis hacía el home.
En la baja del sexto Zach Borenstein comandó la ofensiva con sencillo al jardín derecho para impulsar a Ty Kelly hacía la goma y luego Blake Gailen sonó doble impulsor para aumentar la ventaja israeií.
El propio Gailen impulsó otra carrera con toque sutil en la baja del octavo episodio y poner la pizarra con el definitivo 1-4.
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