El doble campeón nacional del béisbol cubano, los Tigres de Ciego de Ávila, recibirán como premio la ampliación de las gradas de su cuartel general, el estadio José Ramón Cepero.

Realmente un equipo como Ciego de Ávila, que ha ganado 3 de las últimas cinco Series Nacionales, incluidas la dos últimas, no se merece un estadio que solo puede albergar 5 800 espectadores. El doble de esa capacidad no hace justicia para lo que han significado los Tigres en el béisbol cubano del último quinquenio, pero es una mejoría.

Las obras, que deben concluirse a finales de este año, ampliarán el graderío derecho del estadio, y serán realizadas por la brigada 45 del MICONS, bajo la supervisión de José Hernández Mora.

El estadio cubano que más alegría le ha dado a sus aficionados en los últimos años se inauguró el 2 de agosto de 1964, con un doble juego de exhibición, aunque no fue hasta 1968 que tuvo su primer partido oficial, entre los equipos de La Habana y Granjeros.