El pelotero cubano Alfredo Despaigne Rodríguez, una de las principales figuras de los Halcones de SoftBank, campeones de la Serie de Japón, terminó la temporada en ese país, con lesión en una de sus rodillas.

La lesión le impidió participar en los dos últimos encuentros ante los Carpas de Hiroshima.

Una trasmisión en vivo, realizada en Facebook, de la celebración de los Halcones, luego de conseguir su cuarto título en los últimos cinco años, muestra al atleta con dificultades para trasladarse cuando mencionan su nombre, junto a otros destacados del conjunto.

Mediante esa red social, confirmó a la Agencia Cubana de Noticias que sí, es verdad, tiene dificultades en la rodilla izquierda, pero no dio más detalles, ni abundó sobre ningún otro elemento.

Recordamos que durante la más reciente temporada esa misma causa le impidió participar en varios desafíos, a pesar de lo cual logró 29 jonrones en la etapa regular y tres en el play off, incluidos dos en la final.

En el video, también se observa a los lanzadores cubanos Liván Moinelo y Ariel Miranda muy alegres por el triunfo, y a Yurisbel Gracial tranquilo, una característica de él, a pesar de resultar decisivo para asegurar el triunfo en el partido que definió la corona para los Halcones, campeones por quinta vez desde 2011.

De forma general, todo el equipo salta, ríe y celebra el éxito en una temporada, que no comenzó bien, pero en la etapa de play off los Halcones demostraron su calidad.

En varias ocasiones, se ve a varios japoneses bromeando con Despaigne, quien luce una gorra y unas gafas para protegerse de las bebidas que tiran algunos como parte del festejo.

Recordamos que hace algunas semanas el cubano, con experiencia durante cinco campañas en la LPJ y líder en “bambinazos” de la historia de los Clásicos Mundiales, estuvo en el centro de atención por una publicación en su perfil personal de Facebook, relacionada con la decisión personal de no incorporarse a la segunda fase del campeonato de su país, luego de concluir la liga en Japón, a pesar de ser escogido como refuerzo de Villa Clara, con la aprobación de la Federación Cubana de Béisbol.

En ese momento incluyó entre sus argumentos la necesidad de descansar, estar junto a su familia y no seguir forzando el cuerpo al máximo.

Campeón de Cuba en dos ocasiones con los Alazanes de Granma, el potente bateador aludió a la salud como elemento indispensable para que el público pueda disfrutar de él y los demás jugadores allá, incluidos Gracial y Moinelo, durante cinco o seis años más.