Mañana sábado, cuando Pinar del Río y Ciego de Ávila inicien aquí cruenta batalla por el pergamino de la Serie de Oro de la pelota cubana se cumplirán 13 años de que los visitantes se titularon por última vez.

Ello aconteció en el estadio Capitán San Luis, de la tierra del mejor tabaco del mundo, en el que representó el único reinado del actual mentor de los occidentales en la pelota nacional, Alfonso Urquiola.

Fue en la XXXVII serie (1997-98) y el box score de la jornada muestra éxito 2-1 carreras del gigante Pedro Luis Lazo, quien trabajó todo el tiempo para dominar al elenco de Santiago de Cuba, entonces dirigido por el hoy comisionado nacional del deporte de las bolas y los strikes aquí, Higinio Vélez.

La propia hoja de anotación de aquel choque incluye a estrellas como los hermanos Juan Carlos y Omar Linares, por los campeones, y Antonio Pacheco y Orestes Kindelán, por las avispas indómitas.

Pacheco, hoy manager de los santiagueros, impulsó la carrera de los plateados ante un Lazo intransitable, que espació seis indiscutible a la denominada aplanadora oriental.

Todavía en plenitud, Lazo, también lanzador de cabecera de equipos Cuba, se retiró en la apertura de la temporada 50 en su cuartel general, el Capitán San Luis, donde recibió una de las muestras de afecto más grande que se recuerde aquí.

De los pativerdes incluidos en la nómina que jugó aquella noche no queda nadie en activo, salvo su mentor, quien busca coronarse por segunda vez, y el carga bates Alberto Hernández.

Otro de los presentes en el memorable desafío fue el árbitro Omar Lucero.

Él es los que prefieren mentores y lanzadores detrás del plato, y estará acompañado desde mañana por los también jefes de grupos Luis César Valdés, Elber Ibarra, José Pérez Julien, Jorge Luis Pérez, Juan José Cuevas y Pedro Melchor Fonseca.

Para las ocho de la noche está previsto el inicio del play off por el título de la 50 Serie en el parque José Ramón Cepero, de la tierra de la piña.

Dar un vaticinio sobre un posible ganador es harto difícil por lo equilibrado que están ambas selecciones, sin embargo queda en el aire latente la incógnita ¿será premonición la fecha de apertura?.

Es un elemento más para un espectáculo que crece por minuto entre los Tigres de Roger Machado, aspirantes a coronarse por vez primera, y los tabacaleros, ávidos por fumar nuevamente a sus anchas como lo hicieron en seis ocasiones con el nombre de Vegueros y dos con el actual, Pinar del Río.