Con una ofensiva de 13 imparables, la selección cubana de béisbol derrotó 7-6 a Taipéi de China y mantuvo su invicto en tres presentaciones en el torneo internacional de Rotterdam, Holanda, que reúne a equipos de cinco naciones.

Los alumnos del manager Vladimir Hernández, quienes jugaron herméticos a la defensa, abrieron el pizarrón en el primer inning con hit de Humberto Bravo, combinado con un wild pitch, otro imparable de Dainier Gálvez y sacrificio de Yusniel Ibáñez.

Agregaron otra más en el segundo episodio, cuando Leonel Segura ancló en el primer cojín por un error y luego fue propulsado por doblete del receptor Frank Camilo Morejón.

Taipéi descontó una en el cuarto capítulo y luego se fue delante en el quinto, al pisar cuatro veces la registradora, todo ante las ofertas de César García, quien permitió cinco sencillos y otorgó cuatro boletos en 4.2 entradas de actuación. El batazo clave fue un biangular de Huang-Chia con las bases llenas.

Pero Cuba no se amilanó y ripostó con dos en el sexto y otras tres carreras en el inning de la suerte, en el cual se combinaron dos bases por bolas e imparables y dos remolques de Edilse Silva, quien anota por hit de Leonel Segura, en el cual cometió error el jardinero central asiático.

Ya en el noveno inning, el primer relevista Yoandry Ruiz permite un hit y es sustituido por Alexander Rodríguez, a quien Tai le da roletazo con el cual pifia el torpedero Roberto Acea. Hernández decide darle pasaporte intencional a Lyn Hai y con los ángulos congestionados, Liao Chun recibe boleto que impulsa la sexta anotación de Taipéi.

Ahí mismo explota Rodríguez y en su rescate llegó al box Luis Enrique Castillo, quien se apunta juego salvado al dominar a Lin Tzu. La victoria fue al aval de Ruiz.

Mañana Cuba, que ya está clasificado para la semifinal, tendrá su partido más complicado cuando se enfrente al equipo de Holanda.