Un reconocido comentarista cubano, lamentablemente desaparecido hace muchos años, pero que hoy se le recuerda con respeto y aprecio, José A. Salamanca, más bien conocido como “Boby” Salamanca, dijo siempre que la calidad no es patrimonio del profesionalismo ni del dinero, y el equipo de béisbol de Cuba lo demostró.
Enfrentó a lo mejor de los equipos profesionales y semiprofesionales de Venezuela, México y Puerto Rico, salvo algunas grandes excepciones que todos conocemos, y logró la victoria.
Tenían mucha razón quienes señalaron con buen juicio que al seleccionado Vegueros de Pinar del Río no se podía menospreciar, y que si bien en los inicios no estaba en sus mejores momentos en ofensiva y pitcheo sobre todo, no significaba esto que sería un manjar para los demás seleccionados participantes en la LVII Serie del Caribe de Béisbol, de San Juan, Puerto Rico.
Las noches del sábado y domingo últimos lo demostró al vencerr en toda la línea a morochos Caribes de Anzoátegui para asombro de unos pocos, y Tomateros de Culiacán, respectivamente, para reafirmar la calidad de la pelota cubana, sin que ello signifique que esté bien, pues requiere grandes ajustes y, sobre todo, necesita participar al más grande nivel internacional para adquieir herramientas dificitarias, como aseguran verdaderos conocedores del deporte de las bolas y los strikes.
Ellos saben que Cuba es la Patria de brillantes peloteros que también pasaron por estas Series, con quienes ganó anteriormente siete versiones, con Camilo Pascual, Orestes Miñoso, Pedro Ramos, Conrado Marrero, Fomental y muchos otros que dieron gloria al deporte de la linda Isla antillana, cuyo pueblo hoy siente la alegría de esta reciente actuación de sus muchachos, quienes reverdecieron laureles, e incluyo a los nacidos en su tierra que no se encuentra en el Gran Caimán, pero que lo respetan por ser dignos y genuinos hijos de él. Comparten esta satisfacción, y aman a su terruño, la Patria de José Martí.
Muchos quizás todavía no lo creen, porque no esperaban este resultado, sobre todo luego de los tres fracaso de la etapa preliminar, pero el béisbol no admite premoniciones, cada uno de sus juegos es una nueva historia, y esta nos la entregó con la sonrisa del triunfo.
Lo del sábado y domingo será inolvidable, los Vegueros de Pinar del Río, sus refuerzos, enseñaron que su país es pequeño en geografía, pero muy, muy grande de CORAZÓN, tan gran que no cabe en el Caribe Insular. Felicidades a Frederich Cepeda, Norge Luis, Héctor, Freddy Asiel, Moinelo, Yander, Yulieski, Malleta, Yadiel, Despaigne, Valdés y a todos los demás que demostraron que la calidad no es patrimonio del profesionalismo.
Enfrentó a lo mejor de los equipos profesionales y semiprofesionales de Venezuela, México y Puerto Rico, salvo algunas grandes excepciones que todos conocemos, y logró la victoria.
Tenían mucha razón quienes señalaron con buen juicio que al seleccionado Vegueros de Pinar del Río no se podía menospreciar, y que si bien en los inicios no estaba en sus mejores momentos en ofensiva y pitcheo sobre todo, no significaba esto que sería un manjar para los demás seleccionados participantes en la LVII Serie del Caribe de Béisbol, de San Juan, Puerto Rico.
Las noches del sábado y domingo últimos lo demostró al vencerr en toda la línea a morochos Caribes de Anzoátegui para asombro de unos pocos, y Tomateros de Culiacán, respectivamente, para reafirmar la calidad de la pelota cubana, sin que ello signifique que esté bien, pues requiere grandes ajustes y, sobre todo, necesita participar al más grande nivel internacional para adquieir herramientas dificitarias, como aseguran verdaderos conocedores del deporte de las bolas y los strikes.
Ellos saben que Cuba es la Patria de brillantes peloteros que también pasaron por estas Series, con quienes ganó anteriormente siete versiones, con Camilo Pascual, Orestes Miñoso, Pedro Ramos, Conrado Marrero, Fomental y muchos otros que dieron gloria al deporte de la linda Isla antillana, cuyo pueblo hoy siente la alegría de esta reciente actuación de sus muchachos, quienes reverdecieron laureles, e incluyo a los nacidos en su tierra que no se encuentra en el Gran Caimán, pero que lo respetan por ser dignos y genuinos hijos de él. Comparten esta satisfacción, y aman a su terruño, la Patria de José Martí.
Muchos quizás todavía no lo creen, porque no esperaban este resultado, sobre todo luego de los tres fracaso de la etapa preliminar, pero el béisbol no admite premoniciones, cada uno de sus juegos es una nueva historia, y esta nos la entregó con la sonrisa del triunfo.
Lo del sábado y domingo será inolvidable, los Vegueros de Pinar del Río, sus refuerzos, enseñaron que su país es pequeño en geografía, pero muy, muy grande de CORAZÓN, tan gran que no cabe en el Caribe Insular. Felicidades a Frederich Cepeda, Norge Luis, Héctor, Freddy Asiel, Moinelo, Yander, Yulieski, Malleta, Yadiel, Despaigne, Valdés y a todos los demás que demostraron que la calidad no es patrimonio del profesionalismo.