Cuba cerró este jueves otro episodio preparatorio de cara a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla, Colombia, luego de que 50 peloteros enfrentaran durante una semana a los Diablos Rojos de México y a los Guerreros de Oaxaca, dos novenas del circuito veraniego azteca.

«Estamos satisfechos con el trabajo de los muchachos, un grupo amplio ha tenido la oportunidad de jugar y entrenar, y lo más importante, lo han hecho bajo la mirada de Carlos Martí, quien ya ha sido designado como mentor de Cuba en los Centroamericanos y ha presenciado en todos los escenarios el desempeño de los atletas», expresó Yovani Aragón, director nacional de béisbol, a modo de balance sobre los topes de confrontación.

El otrora serpentinero y manager espirituano enfatizó a nuestro diario que más de 50 hombres han saltado al terreno en estas últimas dos semanas, si sumamos los participantes en los duelos contra los mexicanos y los tres partidos en Nicaragua. «Son rivales diferentes, latinoamericanos, que tienen nivel y serán nuestros contrarios en Barranquilla.

«Además, entre nosotros podemos elevar el techo de mil maneras, pero nunca va a tener el matiz de un pleito internacional. Creo que hemos extraído dividendos positivos de los choques, pues se ha monitoreado a varias figuras de la preselección nacional y ya tenemos un criterio más sólido de su proyección», afirmó Aragón, quien ponderó la utilización de los jugadores de menos experiencia.

«Nuestro objetivo inmediato son los Centrocaribes, pero necesitamos probar a la mayor cantidad de jóvenes porque estamos pensando en el ciclo olímpico completo. Si no les damos la oportunidad ahora no vamos a saber cómo responden ante este tipo de béisbol», aseguró.

Sobre la ruta de este deporte en los próximos meses, especificó que todos los esfuerzos estarán enfocados en lograr la óptima forma deportiva de cara a la lid multideportiva regional de Colombia. «Ahora habrá un impasse corto de diez días, durante el cual los atletas tendrán tareas específicas, pues no es recomendable que se vayan a su casa con un descanso pasivo por completo. Después regresaremos con la serie especial, en la cual entrenaremos y jugaremos por todo el país con la preselección nacional», precisó.

Respecto a los cubanos contratados, dijo que todos, excepto Alfredo Despaigne y Liván Moinelo, son elegibles para integrar la escuadra a Barranquilla.

«Ellos firmaron contratos por tres años y no se acordó su participación en los Centroamericanos, sí en los Panamericanos. Con los demás se incluyeron cláusulas para que se sumen a la última etapa de la preparación con tiempo suficiente, de manera que se pueda valorar su inclusión en el equipo».

Por último, Aragón recalcó la complejidad del venidero reto en los Centrocaribes en suelo cafetero. «Es un torneo sumamente difícil, por la calidad de los rivales y por el sistema de todos contra todos, que nos obliga a ganar y ganar.

«En Barranquilla jugaremos final tras final, y para eso nos tenemos que preparar bien. En primer orden, debemos conformar un equipo con variantes, compuesto por hombres con un registro amplio de herramientas que le permitan al mánager maniobrar según las demandas, y además necesitamos minimizar la cantidad de errores y realizar los movimientos justos en el momento preciso».